Baeren Hotel, The Bear Inn

Posada u hostería

Nos alojamos aquí por 2 días con mi esposa. Las habitaciones son cómodas. Sin embargo, el personal de recepción, así como la camarera en el restaurante eran extremadamente grosero. La camarera literalmente nos gritó cuando pedimos una cuchara extra.

Muy buena estancia. El desayuno era bueno. El personal era muy amable y servicial. Tenía habitación en el segundo piso. Perdimos la instalación de ascensor.

La habitación estaba limpia y el desayuno era muy bueno. Buen desayuno.

No se recomienda. Antigua cabaña y servicio desagradable.

Personal amable en la recepción. Muy servicial a nuestro muy tarde en el check-in. La habitación era grande y cómoda. Hermoso en un sentido histórico rústico. Para las personas que buscan un hotel auténtico y un buen precio, este es un gran lugar para descansar mientras esquiar o disfrutar de cualquier actividad de montaña.

Tamaño de la habitación x4 realmente bueno. ¡ excelente desayuno!

Sólo tuvimos una comida. Estaba bien. Nada especial. Servicio también bien.

Restaurante con un servicio muy amable y un menú con el típico Bernese Spetzialitäten a precios razonables.

Los turistas chinos por favor tenga en cuenta que la recepción del hotel tiene discriminación racial obvia, y el check-out encontrará razón para deducir dinero, el personal de recepción llamado Fabienne, actitud es muy malo.

BNI-Meeting, desayuno buffet como siempre arriba.

Para nada lo aconsejo, es un hotel muy antiguo, sin ascensor, nuestra habitación muy pequeña, cero comodidades, cama incomoda, en fin un desastre para quien busca algo de comodidad y de confort.

Tiene dueño muy grosero que trata de venderle cutre habitación a un precio caro y no se preocupa por los trajes.
Cuando vino primero habló con la señora de recepción estaba dispuesta a darme muy lindo dormitorio en 110$, vine espaldas algunos momentos más adelante dueño dijo que sólo venderá esa habitación por 140$. Pero si quiero espacio para 110$ tiene una derecha de buffet… Hay muchos lugares por ahí que está abierto para los negocios.

Presupuesto excelente hotel, muy acogedor con excelente desayuno.

Nos alojamos en el hotel por 3 noches estaba bien. Nos decidimos a cenar una noche y esperaron más de 30 minutos para la comida…

El 29.01.2014 hemos de Berna llamado, una Mesa reservada y después de Stroganoff preguntado, lo que ya en varias ocasiones ministra, porque la Calidad, el Precio y el Ambiente es único. Una Señora reconoció el Pedido y dijo que si nuestra Petición. Después de la Llegada en el encantador Restaurante, estudiamos la Tarjeta, he aquí, no Stroganoff. En el Manejo de los escritos de la época nosotros, nuestra Preocupación, le preguntó en la Cocina, y ahora viene el Martillo. "Quisiera el Personal de la cocina en nuestro Deseo de entrar, que podría haber sido simplemente una Espera de 20 Minutos"! Donde se encuentra, en la Suiza Gastroscene algo así? Le damos la Enhorabuena y un gran Agradecimiento a la Dirección y el Personal.

Esta iba a ser nuestra cuarta visita al hotel, pero en esta ocasión, con un grado de temor, dado que el hotel había sido vendida en Marzo y acaba en la vida nada permanece igual. Oh, cuán equivocados estábamos, el hotel ha florecido bajo la nueva propiedad de Bernard Müller, fuimos recibidos calurosamente por Vencer Niederer Jefe de recepción que se aseguró de nuestro equipaje fue rápidamente transportado a la sala de nuestra elección, y en la cena el Camarero Jefe resultó ser el profesional consumado. En los siguientes 13 noches el personal salió de su manera de hacer de nuestra estancia una verdadera ocasión memorable, de hecho, en el Día Nacional de Suiza, el hotel le ofrece lo que sólo puede ser descrito como uno de los mejores asadores de que me he encontrado en los últimos años, las opciones de comida fue magnífica, y nadie se hubiera quejado de la calidad o a la cantidad. Para el resto de nuestro tiempo en el menú de la cena era siempre muy bueno y servido con estilo y variedad, nunca se repite una vez durante toda nuestra estancia. Si tuviéramos una crítica, era a la hora del desayuno, cuando el servicio y la variedad de comida disponible era algo fragmentado resultante en el entrecejo fruncido de los huéspedes y la promoción de ciertos platos, etc para ser repuesta. Por lo tanto, era una ocasión triste cuando tuvimos que salir para el inicio de nuestro viaje de regreso a Kent.

Un muy cómodo y encantador casco antiguo hotel, con camas muy confortables. Buenas instalaciones y una ubicación ideal, con buena tranpsort enlaces para visitar todas las partes de la Oberland Bernés.