Hotel Castillo de Javier Hotel

Fui con mi marido a San Fermín. Fuimos allí a cenar el sábado por la noche. Estaba tan lluvioso y todos los restaurantes estaban llenos. Teníamos un menú de 25 euros por persona. Tenía 3 entrantes y un plato principal. Bebidas y pan estaba incluido en el precio. Toda la cena fue deliciosa. Tienen tantos postres para elegir. El servicio era rápido y la camarera era fantástica con nosotros. Lo recomiendo.

Si el precio hubiera sido la mitad de lo que era el alojamiento básico podría haber sido excusado. Estaba muy limpio y en una buena ubicación, pero no relación calidad-precio.

El bar está muy bien y la atención también.

Fui a Pamplona por competir en un triatlón y al llegar al hotel ya nos avisó en recepción de que la bici en la habitación iba a quitar mucho espacio. Y tenían razón, pues las habitaciones son muy pequeñas (con la bici apenas quedaba espacio de paso). Ubicación inmejorable, bien aisladas del ruido de la calle (que no era poco) y limpias. Por ponerle algún "pero" además del espacio, comentar que la habitación abría con llave y no tarjeta, por lo que las luces también eran todas manuales. Personal de recepción y bar amables, de hecho me ofrecieron guardar la bici en un almacén por el tema del espacio.

Buen desayuno, precio razonable en pleno casco antiguo de Pamplona. Trato agradable.

Muy limpio amigables y económicos.

Es pequeño pero muy confortable. Lo más: Agradable, limpio, atención muy cordial, bar propio muy lindo, pequeño como son los de la zona. El baño de habitación, excelente. Lo menos: Habitación con espacio estrecho para la cama, si bien cómoda.

En plena zona de movida juvenil tiene un poco de peligro los fines de semana pero bueno por lo demas normal.

Viernes 10 de marzo. Pintxos muy ricos y camareras superamables.

El hotel es céntrico y muy tranquilo, es fácil de encontrar y hay un bus que te lleva directo a la estación de tren. El personal del hotel muy amable y atento. La habitación es acogedora, limpia. La relación calidad precio es correcta. Seguro que contaremos con este hotel pafa próximas visitas a la ciudad.

ADVERTENCIA he experimentado con este hotel una experiencia que arroja una luz extraña en el camino de la gestión con los clientes: cuando quería hacer el check in en 10.11.2017 cuando hice una reserva Hotel Castillo de Javier, me sorprendió-y Obviamente también por eludir la plataforma-informó que la habitación reservada no estaba disponible allí a pesar de una larga reserva hecha. Pero tienes un lugar de sobra en un paseo de 15 minutos lejos otro hotel para mí preocupado. No me ofrecieron ninguna ayuda. Tuve que caminar hasta el otro hotel (mi taxi era por supuesto largo ido), nos registramos y nos quedamos todo el período reservado. Con el otro hotel me quedé muy satisfecho. Cuando el check out después de tres días pagué la factura del otro hotel y viajamos.
Apenas había regresado a casa, para mi sorpresa más, que el Hotel Castillo de Javier a través de mi tarjeta de crédito, el número de que se conocía a través de la plataforma de reserva, la cantidad debida al hotel y el paradero de la duración de la reserva Ya se había movido el primer día.
Dado que esta cantidad no superó el rendimiento del hotel, lo que me causó un esfuerzo extra, exigí la inversión rápida de la cantidad en cuestión.
De hecho, tomó dos meses completos y necesitó muchas intervenciones de mi lado hasta que finalmente conseguí la cantidad detrás.

El hotel se encuentra en el corazón del centro histórico y peatonal de Pamplona. 1 estrella pero vale mucho más! Habitación pequeña pero todo bien cuidado y con la ventaja de un micro balcón con vistas a la vida nocturna mangereccia. Por la noche, desde el balcón observamos el movimiento y las voces se apagan lentamente.

Gran local, lugar donde se puede comer traditionañ de alimentos y de acogida en el centro de la ciudad.

Un lugar perfecto para pasar el fin de semana en Pamplona. En el corazón de la ciudad, cerca de los lugares emblemáticos de la capital navarra.

Únicamente he disfrutado del bar comedor. Aunque no hay sitio para muchas personas, la cocina es muy buena. He disfrutado un sábado de un menú de 22€ completo y muy rico.

(Sobre el bar) Ubicado en una zona excelente el bar está atendido por un equipo ágil, amable y atento. A diferencia de otros ubicados en las cercanías con la cañita te ponen un "cariñito" (cosa muy a agradecer). Usualmente no está tan lleno, la barra tiene una longitud generosa, hay varias mesas para sentarse pero, aviso, no es muy grande.

Se encuentra en pleno casco antiguo de la ciudad de Pamplona. Es vistoso y ofrece un menú barato respecto a la calidad que ofrece. Trato al cliente de 10.

Fuimos a comer unos pinchos. Buen servicio y buena comida. El precio el habitual en la zona en la que está.

Quiero calificar este hotel con una estrella y este es por desgracia demasiado. Reservamos este hotel a través de Internet y miramos las fotos en Internet. Cuando llegamos tuve que pagar primero. Luego salimos de la casa y fuimos al otro lado de la calle a un bar donde nos dieron esta habitación. Mira las fotos y compárelas.

Todo estaba limpio y el cuarto de baño nuevo y limpio también. Calidad precio excelente. En todo el centro de Pamplona. Volvería a ir. La cama muy cómoda.

Precio sin duda competitivo, justo en el centro. Habitación individual pequeña pero limpia y cómoda. Dentro de un bar hospitalario muy típico y tranquilo.

La habitación estaba muy bien y el baño era muy bueno. ¡Recomienda!

Habitaciones pequeñas, pero muy céntrica. Pequeño y agradable restaurante / bar para una tarde en la noche o temprano en la mañana merienda.

Pros: la ubicación del hotel es muy céntrica, a pocos pasos de la Plaza del castillo. Contras: la habitación individual es muy pequeña.

En el viejo Cartier se encuentra donde todo sucede. Idealmente situado para encontrar un restaurante de tapas o murciélago de moda.

Hotel decente con no más habitación un poco pequeña. Muy bien situado en el centro de la ciudad, todo cerca. Calles muy animadas por la noche, si es posible elegir una habitación interior. Recepción cerrada en 23hoo, código de acceso.

Yo no podía quedarse una noche, pero la señora en la recepción fue tan dedicado a encontrar una habitación para mí. Ella realmente se preocupa de los clientes.

Poco sitio de bar y mala distribución.

Trato alucinante, atentos y con buen acercamiento al cliente, los pinchos variados y de la tierra de Navarra, están todos deliciosos.

El bar bien surtido de pinchos variados No muy caro y en el centro del casco viejo.

Habíamos acordado que el precio era el de booking, pero al día siguiente a la salida no lo han respetado.

Muy central, limpio, para una noche muy bien.

Tranquilo, a un precio razonable, muy céntrico. Disfruté de mi estancia de una noche aquí.

Las habitaciones, seguro que hay ratoneras más amplias y que no hagan que te quieras suicidar tras estar ahí 5 minutos. Ruidoso. Tanto interior (máquinas que suenan en el patio toda la noche) como exterior. Personal, lento y sin reflejos. Dirección, pasan de todo, menos de la pasta, claro.