Bearan Bar & Rooms Albergue

Hostal muy céntrico, perfecto para visitar Pamplona ya que estás casi al lado de la plaza del Castillo. La habitación que nos adjudicaron era amplia y acogedora, el baño estaba muy limpio. El único inconveniente es que nuestra habitación daba a la calle San Nicolás, y por la noche había bastante ruido, que aún así no nos impidió dormir. Volvería a alojarme en ese hostal.

La atención muy amable, un sitio céntrico en las calles de recorrido del encierro, los pinchos buenísimos, la habitación por lo menos la que toco a mi no en buenas condiciones, una guardilla con unas escaleras muy estrechas y de difícil ascenso, la ducha fatal.

Relación calidad — cantidad — precio excelente. Especialmente teniendo en cuenta las fechas. Muy recomendable (cosa que ya he hecho a nivel particular)

Buena atención por parte del personal. Habitación sencilla y acogedora. Con aire acondicionado… Repetiría sin duda.

Hostal hiper céntrico. Ha mejorado muchísimo desde la última vez. Muy cómodo, limpio y silencioso a pesar de estar en una de las calles más concurridas de la ciudad. Muy buena relación calidad-precio.

Muy lindo y el personal excelente. Muy buena ubicación.

Buenos bars relajados bien, pero necesitaba un descanso de dos descansos del Camino y la nieve, excelente ubicación. Personal amable.

Tienen muy buenos pinchos y son muy agradables.

Se come bastante bien. Entre semana el menú de cena vale 20€ y está todo bastante rico. Los camareros son muy profesionales. Cómo pega diría que cuando nos tocó cenar ahi, se les había acabado la mayoría de lo que ponía en la carta, eso sí, nos ofrecieron otros platos que también estaban muy buenos. Sitio recomendable.

Habitación correcta. Acogedora. Servicio muy bien. Abajo restaurante de pinchos, y muy buenos. Calidad precio correcta. La situación del Hostal en una de las calles más concurridas para ir de pinchos y el ruido de la calle no se percibe en la habitación. Estupendo.

Atención inmejorable. Sencillo, económico, muy agradable y en pleno casco viejo de Pamplona. En su restaurante se come muy bien. Buenos pinchos. Volveré.

Fatal, las habitaciones viejas, la cama más dura no puede ser, no hay quien duerma ahí, y encima tampoco puedes dormir en el sofá cama por que no te dejan sábanas ni almohada. Insonorizado? No se que entienden ellos por insonorizado y además la calefacción en pleno noviembre la encienden una hora al día, así que la habitación permanece congelada el día entero. Para el baño no han sido capaces ni de dejar un sobre de gel, o al menos un sobre por persona. Nos han dejado un sobre de champú para dos personas, así como una toalla… Penoso. Y solo de pensar que nos quedan dos días aquí muero.

Las camas son muy viejas. El TV es muy pequeño. La mesa de la habitación estaba muy rota y vieja. Necesita una renovación urgente. Es económico pero realmente vale lo que sale. Lo único bueno es que esta bien ubicado y son buena onda la gente que lo atiende.

(Sólo referente al bar) Pulcro, limpio y bien decorado. Tienen un buen surtido de bebidas (a destacar las cervezas de grifo Moritz tostada o rubia) y algunos de los mejores pinchos de la calle San Nicolás. Por destacar uno, el de langostino. No obstante a algunas horas hay que armarse de paciencia en la — concurrida — barra.

Muy bueno. Impresionantes las manitas de cerdo. Pocas mesas para comer, mejor si se va con reserva.

En pleno centro de Pamplona, las habitaciones correctas y muy limpias el personal encantador y muy amables, eramos un grupo de 8 personas cuatro parejas y hemos estado súper bien, gracias por hacernos la estancia tan acogedora. Lo recomiendo sin duda.

Comodo, limpio, trato agradable. Para volver.

Atienden el menú y no hacen modificaciones, si tienes intolerancia alimenticia tienes que pedir lo poco que hay en el menú de 15€ Postres caseros es lo que indica en el menú, lo que te ofrecen de poste es: melón, sandia, helado de limón con el que se hace sorbete de limón, una tarrima de helados vainilla y arroz con leche. Si queréis tirar 15€ es vuestro sitio, si queréis comer bien, hay mucha y mejor oferta.

El personal es encantador, el hostal acogedor y con una gastronomia exquisita.

Trato amable y cercano. Precio muy asequible tanto en servicio de hostal como de restaurante. Habitaciones sencilas y limpias.

Habitación pequeña pero económico. Bien para una noche.

Onw de la besr hoteles que he estado.

Ubicación inmejorable, en el centro de Pamplona. En una calle con muchos bares y restaurantes ya un paso de la plaza del castillo. La habitación estaba muy limpia y con aire acondicionado, lo que se agradece porque la habitación daba a un patio y al abrís la ventana se oía ruido de extractores o motores. Los empleados muy amables, sobre todo con los niños, ya que fuimos una pareja con dos niños.

Escribo esta reseña exclusivamente para el bar, buen surtido de pintxos, altamente recomendable el frito de langostino.

El bar está muy muy bien. Las copas se ponen con mucho cariño.

Buen hostal, Entrada y recepcion algo pesada ya que es por el bar y tardan en atender en funcion del trabajo de barra. Habitaciones correctas y limpias con un baño, por habitacion, grande y espacioso.

Céntrico, y al menos un camarero es osasunista de los sufridores. Una estrellita por ello. La cerveza me gustó mucho.

Es un Hostal muy céntrico para salir a tomar algo y pasear. Las habitaciones no están mal y las camas son cómodas. Tal vez mejoraría la limpieza. El Wi-fi no sirvió hasta el último dia. En general es un Hostal económico, buena relación calidad precio y muy bien situado.

Es el mejor hostal en el que he estado, los dueños son inmejorables, el trato fantástico, las habitaciones muy bien y la situación en pleno centro. Y las tapas geniales! gracias por todo!

Muy centrico. Buen precio para la zona. No se siente el ruido de la calle al menos en las habitaciones interiores.

Una experiencia muy agradable para un gran precio. ¡ está en una buena ubicación, limpio, y el Wi-Fi era fuerte!