Agroturismo Ordaola

Agroturismo

Agradable estancia en el entorno más hermoso. El anfitrión fue muy amable y servicial. La comida fantástica. El camino era muy estrecho pero estaba bien en coche.
Un gran lugar para caminar.

Hemos estado de fin de semana con amigas (despedida de soltera) y todo ha salido perfecto… la situación es en plena naturaleza con unas vistas preciosas, las instalaciones estaban muy limpias, la comida buenísima y Carlos es muy amable… Nos ha facilitado mucho las cosas. El ático es ideal para ir en grupo como fuimos nosotras.

No he pernoctado pero he estado comiendo y no lo recomiendo…
Estabamos tres personas en el comedor y el camarero desaparecido! Hemos tenido que ir a buscarlo en dos ocasiones durante la comida para que nos atendiese…
Precio muy excesivo para la calidad y el servicio…

Una casa preciosa en un entorno increible. El dueño encantador. Desayuno buenisimo y comidas y cenas de menu o carta. Recomendable 100%.

Un lugar perfecto para desconectar, hasta llegar el camino es un poco estrecho para dos vehículos de cuatro ruedas pero al llegar, sientes que merece la pena. Muy recomendable. Buen trato en recepción, buen desayuno y el dormitorio estaba bien.

Está en la montaña, alejado de todo. El acceso es por un camino de una sola vía, con precipicio a un lado. Es intransitable de noche, y peligroso de dia. No hay más que árboles. En la publicación dicen que está a 3 millas de la ciudad, pero realmente está a 14 kilómetros. Definitivamente no es recomendable si lo que deseas es visitar la ciudad. Nosotros deseábamos disfrutar las actividades festivas de Bilbao, pero por lo peligroso del camino ya no pudimos bajar a la ciudad sino hasta el día siguiente. Además, por estar totalmente aislado y no existir otras opciones, cobran por todo.

Un local precioso y tranquilo con vistas muy bonitas.

CasaRural enclavada en el monte, pero Muy cerca del pueblo. Se come Genial. Los dueños encantadores.

El entorno hermoso, comida regular, el mantenimiento malo, y si tienen que irse directamente al aeropuerto, el dueño te contesta me olvide de despertarlos, y agrega además todos tienen celular,, muy mala actitud general hacia los huéspedes la del Sr José Luis, no lo recomiendo.

Excelente ambiente familiar en casa de montaña. Atención cordial. Exquisita comida casera.

Si buscas desconectar es un sitio genial. Los que lo regentan soy muy atentos. Habitación amplia y a media hora de Bilbao. Rutas chulísimas.

Bonito paisaje tranquilidad paz aire puro buena comida amabilidad una gozada Ubicación.

Es la tercera vez que vamos. Como siempre muy bien. Limpio y entorno perfecto. Un 10.

Magnífica casa con variedad de servicios para sus clientes, en un entorno espectacular, muy buenos anfitriones. Muchas gracias!

Encantados de haber estado en este hermoso lugar y tan bien acogidos por los propietarios. Tiene unas visitas envidiables, toda rodeada de montañas llenas de abetos, pinos, chopos, etc… Cuenta también con animales como corzos, jabalíes, aves rapaces, etc…, en plena libertad, aunque es difícil verlos. Ideal para quien le guste la naturaleza y el calor de sus gentes. Muchas gracias por todo Jose Luis. Seguir así. Abrazos desde Valencia.

Un lugar espectacular en la montaña. Un lugar idoneo para descansar y relajarte a tan solo 15 minutos de Bilbao. 100 % recomendable. Muy amables y hospitalarios.

Agradable ambiente y buena atención. Precioso sitio para desconectar.

Si te gusta el relax. Este es un buen sitio retiro espiritual totalmente. A tres km del pueblo mas cercano. en plena naturaleza, buena comida y buen servicio. Por mi parte muy recomendable.

Bonito sitio y buen​ servicio, el dueño está muy atento de sus huéspedes, buen precio, pero faltan muchos detalles para lograr ser un buen hostal. Seguramente volveremos por qué nos gusta mucho la tranquilidad, pero nos llevaremos cosas.

Establecimiento aislado pero bien comunicado. A unos 20 minutos del centro de Bilbao, con los 4 últimos kilómetros de pista bien asfaltada. Perfectamente indicado. Relación calidad precio aceptable. Pagamos 70 euros por noche en una habitación triple que estaba bien. Personal amable, especialmente el propietario, que es el alma del asunto. Proporcionan información sobre la zona y abundante documentación. Con cocina propia, hicimos allí una cena y fue posible cubrir nuestra opción vegetariana sin problemas. Con una excelente sidra, por cierto. Sorprende, de entrada, que se encuadre como "Agroturismo". Seguro que cumplirá legalmente tal condición, pero no es un caserío ni tampoco se intuye relación alguna con la agricultura, mas allá de que, ciertamente, está en el monte. Algunos aspectos negativos que requieren la atención urgente de la propiedad son: — Habitación con iluminación muy tenue. Prácticamente sólo se puede leer en el baño. — Los olores de la cocina invaden otras estancias. — Y lo peor, con diferencia. El desayuno (incluido en el precio de la habitación) se salva por las tostadas y las tres piezas de fruta fresca, pero el resto (zumo y bollería industrial) es de muy baja calidad, y el café es del día anterior recalentado. Solicitado un café en condiciones se nos dijo que no era posible por estar la cafetera apagada (¿? ). En definitiva, sensación agridulce.

Sin duda, repetiremos.
En plena naturaleza a la vez que estás al lado del mismo centro de Bilbao.
Un trato fabuloso de su personal, de hecho era como si estuvieras en tu propia casa.
La comida no hay cómo describirla salvo diciendo que es deliciosa.
100% recomendable.

El lugar es ideal para disfrutar del monte y la naturaleza y estar a tu aire. Están realizando mejoras en las instalaciones, que están algo "trotadas" (al menos la parte del Txoko), pero son suficientes para estar a gusto.

Lugar con encanto en mitad de la naturaleza, comida deliciosa y casera. Trato inmejorable. No se puede pedir más, hemos estado en dos ocasiones y espero volver. Gracias.

Desastrosa caótica desagradable indescriptible. Estubimos el día de noche vieja y año nuevo toda la familia esperando pasar un fin de año especial pues hera la primera vez que lo celebramos fuera de casa, nos dejamos llevar por el jefe Jose Luis qué nos prometió una cena y una comida de año nuevo exquisita sin lujos pero exquisita comida casera y bien cocinada a continuación paso a transcribir el menú de la noche. Entremeses. Para 12 personas. Tres platos de paleta de recebo salada, tres platos de tartaletas de las que se compran en makro para rellenarlas de txaca con mahonesa, tres platos de gambones de los de granel llenos de arena que no sirven ni para hacer fume, un consome qué lo tomamos porque estaba caliente, y el plató principal cordero que se suponía que sería asado pero estaba como cocido nadando en agua soso y asqueroso con ensaladas (tres rabaneras de las que se usan para poner rabas) sin aliñar en las tres ensaladas no abia ni media lechuga postres cutres a más no poder turrones de los posicionados a granel de lo más barato y uvas de bote porsupuesto por toda está bazofia y más de lo mismo al día siguiente pagamos 2400 euros qué no es mucho para una noche de fin de año, si por lo menos abriamos comido algo decente estoy seguro que cenaron mucho mejor en el albergue municipal de elejabarri y todo esto cenando y desayunando con los abrigos puestos, sin contar la temperatura siberiana que tuvimos toda la noche.

Un hotel precioso, limpio, camas cómodas y súper acogedor, el personal muy amable y tanto la cena como el desayuno muy rico. Además el paisaje es una maravilla, ideal para desacansar, ya que solo se escucha la naturaleza. Volvería sin duda.

Tuve que pasar una noche hospedado aquí por tema de trabajo y solo me arrepiento de no haberme quedado más tiempo, un trato excelente, unas buenas instalaciones, vistas maravillosas, todo correcto y limpio. Como consejo personal no dejéis pasar la oportunidad de probar su cocina, la gran mayoría artesano con productos de la zona, desde la carne pasando por el queso fresco de cabra, membrillo, miel etc hasta el poleo menta. Sin duda una suerte haber dado con este sitio. Para repetir.

Fue en octubre del de 2012 que yo me alojé aquí por una noche antes de mover hacia atrás en el Reino Unido.
Me encantó su estancia aquí. Los propietarios hablaban nada de inglés pero esto no fue un problema para mí a medida que hablaba a español. Los propietarios muy amable y también llamaron a mí para actuar como traductor cuando algunas personas inglés llegaron que no hablaba ningún español. El entorno es muy bonito pero la única pega (para mí) era el hecho de que fue por un camino escarpado de la montaña con un desnivel al lado y estaba un poco de miedo. Sin embargo, no dejará de me va otra vez, al menos ahora sé qué esperar en el camino hasta el alojamiento rural. Muchisimas gracias y espero puedo volver algun dia.