Casa Rural Madera y Sal Hotel

Momentos mágicos y hermosos.

Estuvimos un fin de semana visitando la zona y nos encantó, las salinas, el entorno verde. La habitación de la casa era preciosa, con todo detalle y el desayuno ni te cuento… gracias por atendernos y hacernos sentir tan bien. Repetiremos el año que viene.

Perfecta para grupos. A primeros de agosto fuimos un grupo de 19 personas, 10 adultos y 9 niños, y estuvimos de maravilla. Zuriñe, la dueña, es un encanto y se preocupó en preguntarnos cómo queríamos la distribución a la hora de dormir mucho antes de nuestra llegada para que todo fuera lo más cómodo posible, y así fue. La casa está genial, limpia y cuidada al detalle, con todo lo necesario. Además teníamos el acceso gratuito a las piscinas de Salinas de Añana por estar alojados en Madera y Sal, y como hizo muchísimo calor nos vino estupendamente. Sin duda, una de las mejores casas en las que hemos estado. Esperamos poder volver.

Muy cuca, limpia y con estilo.

Cara rural totalmente recomendable tanto por sus instalaciones como por su limpieza y atención. Envimos un fin de semana tres familias y disfrutamos mucho. Seguro que volvereremos.

Zuriñe la dueña muy simpática y agradable un encanto de hotel super bonito y limpio. Lo recomiendo al 100%. Volvere sin duda!

Zuriñe la dueña muy simpática y agradable un encanto de hotel super bonito y limpio. Lo recomiendo al 100%. Volvere sin duda!

La verdad la casa extraordinaria la chica estupenda limpieza absolutamente genial hemos estado encantados el menaje todo lo referente a cocina y demás magnífico un 10

Madera y sal es de esos lugares con encanto. Hemos pasado un finde genial en grupo. La casa está preparada para ello. Con el añadido que Zuriñe se vuelca con la gente. Es un lugar al que quieres volver.

Excelente ubicación para conocer el valle salado y sus alrededores, y muy buena atención por parte Zuri, nos explicó como disfrutar al máximo de la zona.

Tengo cierta experiencia en Casas Rurales, puedo decir que me ha sorprendido de una manera muy grata… Está muy bien "amueblada" en la cocina, habitaciones, cuartos de baño… ; bien cuidada y puesta al detalle… "Zuri", la dueña, en cuanto entras te da una amplia información de lo que puedes hacer y ver por los alrededores, de gran ayuda… Si encuentras "algo" que no esté bien, inmediatamente lo tratan de solucionar… Para repetir… Única! De 10…!

Hemos estado tan agusto q repetimos en abril y más días.
Nos quedamos con ganas de más, hemos estado dos noches
Fuimos a descansar y lo conseguimos por q el apartamento con la estufa es muy acogedor pero para nuestra sorpresa Zuriñe nos informo de todo lo q había en la zona para ver y hacer y por supuesto no queremos perdernoslo.
Hemos llevado también a nuestros dos perros y Zuriñe les preparo de todo cama cuencos toallas y unas golosinas y como no todo su cariño.
Limpieza estupenda, desayuno riquísimo y Zuriñe encantadora.

Atención excepcional. Muy acogedor.

Zurine es súper atenta. Hay de todo para cocinar y hacer reuniones de empresa. Apartamentos muy agradables y espaciosos. La casa es excelente, fantástica!

Casa perfecta para grupos. Estuvimos un grupo de 16 personas con niños de diversas edades y desde el principio Zuriñe nos puso todas las facilidades para adaptar la distribución a nuestras necesidades, cosa muy de agradecer y destacable de valorar. Recibimos mucha información de la zona y además en muchas actividades te hacen descuento por estar alojado en la casa. La casa tiene un gran txoko en la planta baja, ideal para grupos, en el cual encontramos todo lo necesario, no falta un detalle. Casa súper limpia, decorada con mucho gusto, las camas son muy cómodas. En definitiva un lugar perfecto para disfrutar en grupo, en un zona con mucha vida donde los peques disfrutarán, gestionado por Zuriñe, la dueña, persona amable y dispuesta que se le nota le gusta lo que hace y que le encanta su pueblo y eso se transforma en una estancia muy placentera.

Super casa de lujo en un emplazamiento inmejorable y gran equipamiento.

Buena atención muy bonito trato muy agradable.

Estupendas vacaciones las que hemos pasado en casa de Zuri y Edu. La habitación preciosa, decorada con muy buen gusto y muy limpia. El txoco y el jardín muy acogedores. Y que decir de Zuri? Excelente persona, atenta en todo momento, todos los días nos sugería rutas y actividades para hacer por la zona. Por último… su tortilla de patata la mejor de todo el País Vasco! Gracias Zuri, vales un montón!

Todo genial, la atención, amabilidad, y la casa preciosa. Además nos ha recomendado lugares y visitas espectaculares. Gracias, Zuri.

Es un sitio muy agradable, acogedor y donde no te falta nada.

Todo genial. Lo mejor, la atención de los anfitriones de la casa rural, en especial de Zuriñe con quien hemos estado mas tiempo, para hacerte sentir mejor q en tu propia casa. Es además de una guia turistica excepcional, una persona increíble. Quizá sea la magia de Salinas de Añana, que invade a sus gentes… Es un sitio imperdible. Con un buen parking en la parte superior del pueblo al que se accede a mano derecha por carretera tras pasar el pueblo y que te deja al ladito de la casa rural Madera y Sal. Más que recomendable!

La casa muy bien montada. Hemos estado 6 parejas con 8 niños. Por poner alguna pega diría que le falta una cocina industrial para grupo grande pero tiene tres muy bien equipadas.

No he tenido la oportunidad de ir todavía, pero la atención ha sido excelente. Espero poder ir pronto. Mil gracias!

Extremadamente amables y dedicados. Si vas con perros (admitidos), los tratan con la misma amabilidad y cariño con que tratan a las personas que allí se hospedan.

Un trato exquisito y el alojamiento muy bien.

La casa es preciosa, y zuriñe nos ha tratado estupendamente. Volveremos!

No se puede ser mejor anfitriona. Gracias por las charlas matutinas y esa tortilla tan rica. La casa preciosa y hasta el ultimo detalle por duplicado. La mejor opción para pasar unos días en familia.

Acabamos de salir y sabemos que volveremos! Son una pareja de currantes que se les ve que lo viven lo dan todo para que tu estes agusto. Todo perfecto y muy limpio! Agurrrrrrrrrrr.

Realmente disfrutamos de nuestra estancia con Zuri! Ella nos hizo sentir muy bienvenido y todo lo que estaba cómodo. Las habitaciones eran bonitas, limpias y acogedoras. Se sentía como estar en someones casa de campo. Las camas eran fantásticos. Salinas de Anana fue un gran regalo para toparse con y Madera y Sal es el lugar perfecto para su estancia.

La casa rural está situada es un lugar muy especial, empezando por las propias salinas que sin duda merecen una visita. Pero hay muchas más alternativas que no conocíamos y Zuriñe nos ha enseñado. Ese trocito de GR de Pinedo a Valpuesta que hicimos con cuevas incluidas estuvo muy bien, en especia para los niños. Y todo lo que nos queda por conocer! La estancia en la casa inmejorable. El txoko además de acogedor te hace sentirte como en casa, chimenea, sillones perfectos para una buena siesta, proyector. Todo lo que necesitábamos para pasar una buena velada. La barbacoa también fue todo un éxito! Las habitaciones muy confortables y luminosas, los veluxes le daban un encanto especial. Se nota que todo está dispuesto con mucha atención y cariño.

La casa y el entorno son ideales para desconectar de las prisas y el stress cotidiano. Aunque también tienen una sala habilitada con pantalla de proyección, proyector y ordenador, para reuniones de trabajo o familiares. Zuriñe y Eduardo son gente acogedora y encantadora. Te contarán con pasión cómo han construido la casa con sus manos. Y cientos de anécdotas y experiencias que han vivido en este proceso. Puedes alojarte en habitaciones con derecho a cocina. O en apartamentos. Para desconectar, paseos y rutas por el Valle Salado, piscina y terracita de bar en verano. Seguro que disfrutas. Y si te gustan las mascotas, puedes venir con ellas, o adoptar durante tu estancia a Fiby y Berni, galga y galgo que ¡siempre están deseando salir de marcha.

Un lugar acogedor en donde pasar una jornada de descanso. Zuriñe encantadora. No lo ha hecho todo tan fácil.

Un trato amable y directo de Zuriñe. Hecho todo con cariño y amabilidad extrema. La barbacoa al aire libre, un lujo. El Txoko excelente para una reunión informal de empresa, con Wi-Fi, Videoproyector.

Casa hecha de manera artesana, cuidando cada detalle. Te sentirás como en casa (o mejor), en un lugar para desconectar, cargar las pilas y disfrutar de un paisaje incomparable: el valle salado de añana!