Casa Grande de Rosende

Casa o chalet

Grandes manjares, mejor trato.

Ambiente tranquilo, muy bien atendido. Entorno maravilloso. Un diez!

Un lugar histórico y pintoresco… una preciosidad. La atención, la comida, el paisaje, la casa en si es un regalo para los sentidos.

Impresionante desde que entra por la puerta, la atencion el alojamiento y todo.

Un Pazo muy bonito. Buen desayuno pero la cena excesivamente fuerte. Buena atención por parte de los trabajadores.

No le pongo más estrellas porque no hay mas. Es preciosa y con un ambiente tranquilo y agradable. El chico que nos atendió fue muy servicial, entiende mucho de la zona y nos explicó todo lo que podíamos hacer en los alrededores. La comida increíble y los licores que tienen son de cosecha propia. Si puedo ir volveré sin pensármelo.

El lugar no es precioso lo siguiente y para comer todo comida casera y buena materia prima. Espectacular.

Ubicación perfecta para visitar la Ribera Sacra. Y encima en una casa con historia, que se palpa en cada rincón de la misma. Trato excepcional por toda la gente de la Casa.

El trato recibido exquisito, la casa espectacular, Muy recomendable la estancia, las cenas y desayunos. Los alrededores, en especial los cañones del Sil, tanto desde los miradores, como el paseo en barco por el río, preciosos.

Recomendable. Casona espectacular. Buenas habitaciones. Muy buen menú. RECOMENDABLE para celebraciones.

Increíble el trato de Miguel. Nos atendió genial y nos contó toda la historia de la casa y la zona. Muy cerca de los miradores del Minó y de los cañones del Sil. La habitación muy cómoda y caliente (hay que tener en cuenta que fuimos en invierno y con mucha lluvia). Pendiente volver en primavera u otoño.

Tiene un gran numero de habitaciones para estar donde esta, el servicio es encantador y todo el pazo es como un museo. Al principio de la estancia te enseñan la casa mas que nada para que no te pierdas, una comida fantástica. Yo que he ido en invierno me ha encantado pero en verano tendrá que ser una gozada.

Hemos estado ya varias veces y todas, ha sido espectacular ; no hay mas estrellas para dar si no, mas llevaria por mi parte.

Un lugar para encontrarse uno a simismo No me extraña que se escriban libros o tesis alli Cocina impresionante Los dueños se desviven en atenciones Los alrededores con sitios a recorrer en meses.

Bien en el trato. Pero la sorpresa viene a la hora de irnos. Tratare de explicarlo. Recibo de regalo una caja de smartbox, elijo a casa grande de rosende se hacen los trámites y allá nos vamos. La sorpresa es que en el paso nos dicen que no tenemos la reserva, dormimos, cenamos, desayunamos y cuando nos vamos nos pasan la cuenta de todo, que lo del regalo ya estaba pagado. Es decir pagamos dos veces No hubo ni cena gratis, ni visita a bodega, ni visita a la alfarería ni por supuesto botella deaguardiente A QUIEN corresponda ahora las dos partes se niegan a devolver el dinero OJO A LOS INCAUTOS COMO NOSOTROS PASO UNA SEMANA Y NO DEVOLVIERON EL DINERO Y todavía no sabemos quién es el culpable si los de la casa grande de rosende o los de las cajas regalo de smartbox UN AUTÉNTICO TIMO.

Manuel, Miguel y el resto del personal nos trataron de maravilla. La casa es estupenda, con sabor, y la comida con más sabor aún! Cenamos todas las noches aquí para no perdernos ningún plato… si coincidís con algún escabeche os recomendamos probarlo. Gracias por estos días de descanso.

Tienen claro que el cliente es lo importante! está dicho todo! bueno, añado más, espectacular casa, tranquilidad y comida de mucha calidad! ah si, relación calidad-precio de 10

Increíble lugar y personas. Todo genial, con mucho alma… superando lo esperado.

La casa es preciosa, el trato inmejorable, la comida, la zona todo es genial! La recomiendo una y mil veces ^_^

Pazo del sXVI reformado con las comodidades propias del sXXI pero con una esencia muy especial. Ideal para conocer la Ribeira Sacra y disfrutar de un ambiente familiar. Tanto la cena como el desayuno buffet se notaba la buena cocina casera. El trato del personal, estupendo.

Una casa estupenda y con una buena atención por parte de los dueños. Fuimos a una boda y fue maravillosa.

Lugar idílico e inolvidable para grandes celebraciones y para escapadas puntuales. En plena naturaleza y en un pazo gallego que te transporta al siglo XVI.

Muy bonito el lugar. Apenas lo conocía pero me quede muy sorprendido del lugar.

Interiores auténticos. Maestro Ozyvchivyj. Buen vino.

Un lugar ideal, en plena ribera sacra está ubicado este Pazo del siglo dieciséis, con una larga historia.
Solo por estar dentro, merece la pena visitarlo, el trato es excelente y el entorno inmejorable. Muy recomendable.

Por encima de todo nos gustaria destacar el trato fabuloso recibido, sin igual, Maria Luisa nos has tenido como princesas en un entorno de cuento de adas. La casa espectacular repleta de detalles que por mucho que quisieras nunca acababas, el porche y los jardines rincones de verdadera paz, bellos y frescos. Las habitaciones presentadas con cariño y donde descansar era un gusto. La gastronomia inmejorable. Queda la estancia en la casa como un recuerdo de calidad y buen gusto. Esto si que han sido unas buenas vacaciones.

Fui a una boda organizada e Casa Grande De Rosende. Impresiónate sitio y organización.

Un placer haber conocido este sitio, realmente es un lugar lleno de energía… la comida excelente, el trato inmejorable y el lugar mágico… amazing. Gracias por despertar los sentido.

Una maravillosa experiencia, excelentemente bien tratados en todos los aspectos. Un estupendo sitio donde perderse unos días.

Una experiencia maravillosa. Decorado de forma espectacular, el entorno maravilloso.

Imposible de describir, hay que vivirlo. Cada día una experiencia mágica.

Es como sentirse reina medieval por un día. Pero con Wifi ;-).

La casa una pasada, con un sinfin de rincones con encanto, habitación amplia, limpieza total, atencion excelente, los comedores y salones con todo tipo de detalle, el patio y jardín para relajarse, bueno nos parecio simplemente maravillosa. Gracias a Manuel por los consejos para recorrer la zona, y a Paulova por el trato siempre cercano y atento. De la zona "Ribera Sacra" que nos pateamos por ambas vertientes del Sil, viendo todos los miradores, los sitios o lugares de interés, no perderse el monasterio-parador de San Estevo, una pasada, San Pedro de Rocas, igual y que entornos. Lo peor las carreteras, por algunas no se cruzan dos carretillos, y luego nos quejamos por aquí, el paseo en catamaran, bueno despues de ver desde todos los puntos pues nos sorprendió menos, paro hay que verlos.