Cal Gabriel

Hotel

Un lugar con encanto, donde cuidan cada detalle y encontraras gente maravillosa. Estuvimos un fin de semana y nos sorprendió el trato, la cocina de Toni, las presentaciones de Mario. Un destino perfecto para una escapada de fin de semana en familia o en pareja.

Un restaurante muy bonito y acogedor. La comida exquisita y el personal muy amable.

Si quieres desconectar en un sitio precioso, tranquilo, que te cuiden al detalle y con una comida fantástica! este es sin duda uno de esos lugares! Gracias Mario y Toni repetiremos seguro!

Un sitio excepcional, un trato cercano e impecable, buena comida las habitaciones monisimas y un sitio con un encanto increíble.

Espectacular comida. Precio barato para la inmensa calidad de los platos. Imprescindible visitarlo una vez en la vida.

De las mejores experiencias. El servicio espectacular. Seguro que volveremos.

Somos un grupo de 12 personas, que hemos pasado 3 dias, 2 noches, incluido fin de año. No tengo mas palabras que FELICITAR a los dueños de la casa, Mario y Toni, por su amable acogida, a esta Casa Rural, perfectamente cuidada, con el mas minimo detalle, hemos disfrutado de una extraordinaria cocina con todos los productos naturales de la zona, y un servicio admirable. Nos ha encantado, sin duda que volveremos a repetir. Un abrazo. Nuria & Company.

Buscas paz y tranquilidad? Ideal sitio para encontarte a ti misimo, reflexionar y relajarse. Me encanto.

Hemos estado como en casa, el personal es muy atento y la habitación tiene todo lo necesario para pasar unos días tranquilos. Lo mejor, el restaurante! Comida de calidad, bastante cantidad y a un precio razonable; el cordero estaba ESPECTACULAR. Totamente recomendable!

Cal Gabriel es un restaurante de montaña. Encontrareis hospitalitad, buen trato, un excelente servicio, rápido y atento y una cocina impecable del Urgell. En el menú encontraréis platos ecológicos, como la ternera y platos del Urgel como la Pata de cabrito deshuesada que está espectacular. Si tenéis alguna intolerancia, la carta está debidamente señalizada y si necesitáis algo especial, son tan amables que os harán lo que necesitéis. Perfecto para niños. Tiene una muy buena relación calidad — precio y es pequeño en un pueblo muy bonito que merece muy mucho la pena conocerlo. Si os gusta el conejo lo hacen fantástico y la carta de vino está muy bien escogida. Con vino de la zona y ajustado en precio. Si queréis de otras zonas también encontraréis. Vale la pena la escapada. Aprovechar y visitar e museo de las Trementinaires. Un oficio perdido y un museo que es una delicia. Indispensable si vais por la zona.

Pueblo típico de la zona muy bonito, comedor del hostal en consonancia con el lugar, hasta hay todo bien… la mala experiencia empieza con la comida, y digo por adelantado que no soy persona delicada con La Cocina, empezamos con un menú un poco escueto para mi gusto, superado en gran mayoría por muchos bares de carretera en cuanto a cantidad y calidad, falta de platos dedicados para niños por ejemplo lomo con patatas lo más común del mundo, ya no decir que el menú para niños es al mismo precio que de los adultos, nunca había visto esta política, pasemos a lo que comida, ensalada de queso de cabra, lechugas y demás floresta con alguna nuez y un pedazito de rulo de cabra de unos 2 cm de grosor y 4 cm de diámetro, de segundo conejo, bien, nada que aportar, pasable, postre un flan de turrón de la casa parecido a un postre de la marca Royal, agua servida en jarra nada de aguas embotelladas, por cierto muy mala. Precio por menú muy caro, es una crítica constructiva, espero os sirva para corregir la calidad cantidad y precio.

Escogimos este restaurante por las reseñas que tenía… bastante alejadas de la realidad… el menú escaso y la mitad del menú (bastante caro) con suplementos de dinero. La ensalada sería recomendable que no sirvieran las hojas de lechuga que no están en condiciones. Y el pollo del segundo plato a parte de cantidad escasa para ser un segundo, estaba bastante seco. El postre Han servido un dedo literal de helado… ni para empezar y 17€ de menú… vamos que sales con hambre. El problema es que te sirvan agua en jarra sin saber de dónde procede ese agua… por obligación sanitaria deberían servir agua embotellada y cerrada, ya que el gusto del agua dejaba mucho que desear. Nada recomendable.

Menú caro para lo que sirven. En el primero segundo y postre tienen 3 platos y los demás con suplementos, así que si te salen un poco de lo que ellos ponen te dejas el doble de dinero. Creo que es un fallo al no tener menú infantil y tener que pagar 17€ para una niña de 5 años que no se come tres platos (y si fuera que llevan cantidad pero bastante escasa las raciones)

Restaurante carísimo para lo que ofrecen, fuimos por la puntuación que tenía, pero han debido reseñar familiares o personas allegadas porque para nada concuerda con la realidad, no hay menú infantil con lo que e cobran 17€ por una niña que no come ni un plato, menú súper escueto, no creemos que sea pollo lo que hemos comido más bien parecéis gallina, todo con suplemento, para nada recomendable, NO SE FÍEN DE SU PUNTUACIÓN, debería estar sobre 2.5

Nos hemos encantado! Ubicación genial con muchas caminatas muy bonitas. Las habitaciones muy acogidas y con mucho carácter. Hemos disfrutado de una cena y desayuno buenísimo, con productos ecológicos y embutidos hecho al local. Muy recomendable! Muchas gracias Mario y Toni!

Donen el que prometen, amb senzillesa, cordialitat, bon gust I saber fer.

Buen precio y mejor servicio. Un pueblo muy pintoresco que vale la pena visitar si pasas cerca.

Un pueblo precioso y una casa rural altamente recomendable. Nos sentimos como en casa en todo momento. A destacar el desayuno con embutidos de la zona y la cena casera. Volveremos seguro.