Parador de Siguenza

Hotel

Me casé hace 20 años en este Parador. Volvió a celebrarlo con toda tu familia. Tan bueno como siempre ha sido. Una gran experiencia.
Marcos en la recepción nos dio un tour bc le dijimos que nos casamos aquí y nuestros chicos querían ver los pasillos y todo el resto. Este tipo conocía toda la historia del castillo. Imprescindible si vienes a este Parador.
Luego encontramos una botella de champán relajándose en nuestra habitación. Marcos, eres el mejor.

Había ido con la familia a tomar unos tragos. El lugar es absolutamente increíble, muy bonito, vale la pena la unidad. Con las bebidas que nos dio algunos de los cacahuetes.

La unidad de una pequeña carretera a la derecha hasta el castillo, donde se encuentra el aparcamiento. El parador NO es accesible para discapacitados. Usted tendrá que llevar su equipaje hasta un corto vuelo de pasos. El personal es absoluta encantadora. Restaurante en el interior. Las habitaciones son grandes y cómodas (moderno). Recomendaría totalmente.

Un lugar con encanto coronando la ciudad de Sigüenza. Sus salones invitan a tomar algo después de visitar la ciudad. Se respira historia cuando entras. Es una lástima que haya obras por todos lados que deslucen el sitio, pero supongo que algún día se terminarán. Anuncian eventos culturales tales como cenas con escritores de renombre. Totalmente recomendable visitar el Parador… y la ciudad histórica de Sigüenza!

Es uno de los castillos principales de la geografía española. A pesar de encontrarse muy transformado por su condición de parador Nacional. Se podría decir que su estado de conservación es muy bueno. Visita como tal no se realiza por ser utilizado en la actualidad como complejo hotelero y de restauración. Se puede estar en el patio, aunque su interés tampoco es muy grande. En este caso la Camisa o Antepuerta que precede al castillo no es una Barbacana por encontrarse en contacto con el edificio principal, que es un error muy común que se comete con este castillo.

Gran exterior, las paredes de la habitación eran un poco finas.

¿A quién no le gustaría sentirse como el "señor del castillo" durante una noche? Alójate en un auténtico castillo medieval con la calidad y atención característica de Paradores. Tranquilos y amplios salones señoriales, excelente servicio y cocina. Desayuna como un rey y aprovecha para visitar Sigüenza y los alrededores. No te olvides de hacer una excursión por el barranco del Río Dulce.

Una experiencia para recordar. Las habitaciones cuidadas y acogedoras, así como su cocina. Aunque el desayuno es caro, merece la pena aunque sea sólo por un día. En la parte baja hay salón enorme pero muy acogedor. Los empleados hacen un pequeño tour por el edificio y la muralla, preguntarlo al llegar.

Un precioso castillo restaurado por Paradores y convertido en un Hotel de 4 estrellas. Me encantó mi estancia en este parador dado que el sitio es histórico y precioso. De los paradores es uno de mis preferidos por la belleza del sitio. Me gustó mucho la habitación (muy limpia). El personal como siempre en Paradores muy amable y servicial.

Gran lugar merece una visita.

Estuvimos de celebración familiar. Buena comida, tanto en calidad como en cantidad, todos quedamos muy satisfechos. El personal fue bastante amable, lo cual es de agradecer. En el aspecto negativo, me parece poco elegante que las bebidas no estén incluidas en el precio del menú.

El parador se encuentra en la zona más alta de Sigüenza, la manera más fácil de llegar es ir a la plaza mayor y subir por la catedral mayor. La atención es buena por parte de los empleados. Buena limpieza de la habitación y baño. Equipada con aire acondicionado / calefacción, mini-bar, televisión, libros. Las camas son cómodas, quizás la pega es que las almohadas son algo bajas. Recomendado.

Lugar mágico y siempre estará en nuestro corazón. Increíble y magnífico hotel para pasar una estancia inolvidable. El director es un gran profesional, se portaron estupendamente en el favor que les pedí. Me ayudaron a realizar la pedida de mi boda. Todo fueron facilidades y la cena y los detalles fueron espectaculares. Muchísimas gracias.

Hermoso lugar y un encantador salón para sentarse en un café. No estábamos alojados allí, pero fue una delicia para parar allí para tomar una copa.

Un lugar excepcional en cuanto al entorno y el edificio en sí. Tengo que decir que llevaba todo el día con el antojo de cenar una sopa castellana, en un sitio como Sigüenza. El caso es que hemos pasado la noche del lunes y en el pueblo estaba todo cerrado, así que nos hemos dicho, pues vamos al parador ya que en un restaurante así, tiene que ser buena (craso error! ) yo soy cocinero profesional y os aseguro que no es difícil hacer una sopa castellana en condiciones. Pues he de deciros que no he tomado una sopa castellana tan mala jamás en mi vida, no habían usado ni un caldo, era agua con un huevo escalfado frío y el pan totalmente desecho, ya no voy a deciros nada del resto de platos que tomamos, unos huevos rotos que básicamente era un revuelto seco con chorizo chambuscado que no sabía a nada y una coliflor garantizada con jamón que ni fu ni fa. En mi opinión un desastre absoluto y con esos precios que tienen no sé cómo no se les cae la cara de vergüenza, me hubiera gustado tomar algo de postre pero después de la agradable velada no me he atrevido. Sinceramente creo que deberían ponerse con la cocina en serio por que no recuerdo la ultima vez que he comido tan mal.

Alojarse en un carro la castillo, gran aventura con 3 críos! El personal es muy amable y atento, las instalaciones son buenas, aunque deberían dedicar tiempo al mantenimiento: baños sin silicona, alguna ventana con vidrios rotos… Desayuno muy bueno aunque menú parador algo escaso y no a la altura del lugar. El pueblo es muy bonito para pasar y vivir una aventura medieval.

Este es un hotel increíble dentro de un castillo. El personal es muy amable y la comida es increíble. Además, el Hotel ofrece varias opciones para sentarse y relajarse. El Internet es muy bueno si lo necesitas. Las habitaciones son amplias y limpias. Una cosa que mencionar es, las almohadas son bastante duras que puede hacer que la noche un poco incómodo. Pero aparte de eso, una estancia estupenda.

Uno de los preciosos de la cadena. Las bodas y otros eventos a menudo se celebran aquí, por lo que no es tan contemplativo.

Desde lejos el castillo que ocupa el parador presenta una vista monumental. Por dentro el parador es muy acogedor. La atención al público es muy esmerada. Por cierto, en vuestra visita no os olvidéis de hacer una visita guiada a la Catedral. Impresionante.

A modo de Castillo está muy bien cuidado y conservado. Puedes pasar dentro y visitarlo aunque no te alojes. Tiene restaurante y se puede celebrar eventos como bodas, comuniones, comidas de empresa… Yo solo lo he visitado y por eso las tres estrellas.

En nuestro caso pasamos simplemente a tomar algo en el bar después de una larga jornada. La atención fue muy buena y el servicio rápido, también es cierto que lo que pedimos fueron cosas sencillas, pero también íbamos muchos y había bastante gente. La decoración y el entorno en general es precioso, es como volver varios siglos atrás, muy recomendable entrar aunque sólo sea por verlo.

Buena experiencia. Contratamos una habitación superior que recomiendo. Habitación muy espaciosa con espacio para sofás lo quede le da un espacio extra. Nos ofrecieron una habitación con terraza y bonitas vistas. Desayunamos en el Parador. Bufet muy variado. Se puede aparcar gratuitamente en la entrada del Parador, hay bastante sitio.

Acogedor hotel en una antigua fortaleza. El desayuno buffet es muy sabroso y ofrece una gran variedad.

Lugar de ensueño. Hace 24 años lo elegí para pasar mi primer aniversario de boda. Hoy hemos vuelto y la Edad Media sigue por sus murallas, torreones y pasillos. 4 estrellas porque lo que falla es el precio, sobre todo de la comida. Creo que, por muy histórico que sea, no es motivo para pegar unos sablazos impresionantes en ese aspecto. Por lo demás, cinco estrellas.

El personal es muy amable, el edificio es magnífico (aunque esté casi todo reconstruido), la habitación es grande, la cama cómoda, y lo mejor… tienen menú de almohadas! Los puntos a mejorar son que el agua de la ducha cambiaba sola de caliente a fría, que la Wi-Fi no funcionaba en la habitación y que se fue la luz un montón de veces (en recepción dijeron que era normal cada vez que había tormenta) … pero tuvo su gracia tomar una copa de vino a oscuras en el bar del castillo :-)

Tengo que reconocer que salimos ambos muy contentos de nuestra estancia en el Parador de Sigüenza. Todos estos aspectos positivos facilitaron nuestra estancia. + Actitud del personal del hotel antes de la llegada al hotel, informándonos de cómo teníamos que hacer si queríamos tener una habitación con cama de matrimonio, así como del buen trato profesional a la llegada. + La espectacularidad del castillo, tanto visto desde lejos dominando Sigüenza como visto desde cerca. Simplemente espectacular… ¡¡dormimos en un trozo de historia! + La facilidad para llegar hasta el Parador, ya que hay indicaciones por todo Sigüenza. + La decoración medieval del hotel y sobre todo sus zonas comunes, pequeños rinconcitos distribuidos por todo el hotel y que ayudan a hacer la estancia más especial. La capilla y el Salón del Trono son dignos de ver. + La habitación es muy acogedora, con una decoración acorde al estilo de este edificio histórico… ¡¡pero cuidado! Muebles de estilo tradicional o clásico no quiere decir viejo, en nuestro caso todo estaba en perfectísimo estado. + A ello hay que sumar la limpieza que observamos tanto en las zonas comunes como en la habitación. — Tan solo un aspecto negativo, la mampara de la bañera es demasiado pequeña, lo que hace que se pueda salir mucho agua a la hora de ducharnos.

Situado en el mejor lugar de Sigüenza, con vistas privilegiadas. Comí en el restaurante y el menú degustación que probé fue magnífico y por un precio muy razonable. El trato, como siempre en Paradores, inmejorable.

Muy bonito y encantador. Fuimos al bar a tomar algo. Además de ponerte aperitivo a buen precio, una caña y un vino 5.50 euros, el trato del personal es muy bueno y el lugar es precioso.

Estuvimos este verano y la verdad que nos decepcionó mucho. Había solamente una toalla de baño (éramos dos personas), al entregar las llaves de la habitación — por cierto muy sobria y muy pequeña — me dijeron que se podían pedir más. Una de las recepcionistas se mostró desagradable al mostrar nuestra reserva desde el movil. Hemos pernoctado en bastantes Paradores Nacionales y este es sin duda el peor-

Es un castillo impresionante, muy grande las zonas comunes y están muy bien decoradas. El ambiente es perfecto pero las habitaciones necesitan una puesta a punto, moderlizalas. El personal muy amable y atento.

Bonito, agradable, habitaciones bien decoradas y amplias. La única pega es que el personal de recepción y cafetería que nos atendió parecían estar enfadados. La camarera de habitación muy amable y limpieza excelente.

El lugar elegido para el Parador es inmejorable, por el edificio, las vistas y la localidad medieval. El servicio es muy agradable y atento. Un acierto, la visita guiada por el castillo. Podría mejorarse la decoración de las habitaciones (un espejo en la habitación, no solo en el baño; más útiles de aseo, en particular si es una habitación triple) y del Salón del Trono (es un lugar frío que quita las ganas a uno de estar ahí; no hay luces indirectas, lámparas de pie, …), la insonorización de las habitaciones (se oía el trotar de los niños de la habitación superior, reiterativo pese a haber protestado por ello) y algunos alimentos del desayuno (el minivasito de frutas del bosque, pues están demasiado ácidas).

El lugar es inolvidable, pero las habitaciones con camas para niños… en mi experiencia, parece que es volver a los años 70. La cama para el matrimonio es dura, dista mucho de ser la mejor en la que he dormido. El desayuno es muy bueno y el recuerdo es precioso… sino tendría 3 estrellas, El pueblo es precioso, aconsejo visitarlo con las guias de turismo y también ver la catedral guiada. I love Siguenza.

Hemos pasado un día estupendo. La atención el personal muy buena. El castillo muy bonito y valoramos muy positivamente la visita guiada que nos ofreció uno de los empleados Nuestra valoración es de 9

Es un castillo digno de visitar y recorrer. Con posibilidad de visitas guiadas que comienzan en el Patio de Armas. Dispone de un salón comedor con los mejores platos de la Alcarria. El menú son 30€ por persona sin bebidas. El castillo-parador se encuentra al final de la calle Mayor, en línea recta desde la Catedral. Es una visita obligada si se viaja a Sigüenza.

Estructura encantadora, ambiente refinado.
En algunos aspectos podría mejorarse.

Precioso castillo medieval mirador de toda la maravillosa ciudad de Sigüenza. El trato del personal exquisito y muy amables que hacen que la estancia sea especial para recordar y volver. Su restaurante con sus platos típicos exquisitos. Me tiene encantada este parador al igual que la ciudad. Lo recomiendo a todo el mundo.

Él parador de Sigüenza se encuentra en el interior de su castillo medieval en el punto mal elevado del municipio. Es uno de los paradores con más encanto que he visitado. El desayuno se disfruta en un salón espectacular. No menos imponente es el salón de tapices donde se pueden observar piezas de colección es una sala que impresiona por sus altos techos y por su enorme chimenea. La comodidad de la habitación es elevada debido a su gran amplitud. El trato en paradores como siempre de 10.

Lugar fantástico con zambullida en la historia. Espacios amplios y acogedores. Gran cena y tanto desayuno.

El Parador es precioso. … ya sea para tomar un café o para dormir.
aconsejable!

Genial parador… recomendable por todo… buenas habitaciones, buena comida, buen servicio…

Uno de los mejores Paradores al que hemos ido y la visita a la ciudad de Siguenza es una muy grata experiencia. Y está a un paso de Masrid.

El Parador esta ubicado en un castillo de los de verdad, en lo alto del pueblo, y dispone de muy buenos servicios, con un restaurante espectacular y unos salones acordes a la historia del castillo, así como todo el recito amurallado. Las habitaciones, normales, si buen hay que decir que todos los Paradores, o casi todos, tienen tres tipos de habitaciones, las standard, que son las normales, por decirlo asi, las superiores y las suites, por lo que cada cliente, en función de su presupuesto puede elegir su nivel de confort. Desde Madrid, se puede ir y venir en el día, sin necesidad de pernoctar, ya que hay poco más de 100 km. De distancia. Se aparca en el exterior del castillo, al aire libre.

Nos encanto el Parador. Impresionantes habitaciones. El restaurante es perfecto. La ciudad es maravillosa.

Precioso castillo medieval restaurado.

Mi único interés era visitar el castillo, me daba igual que fuera un parador y no usé sus instalaciones. Me gustó la restauración del patio y el conjunto de la fortificación.

Castillo remodelado y adaptado para ser un parador, cuenta con un restaurante de buena calidad, aunque el precio no lo acompaña tanto. El emplazamiento es una chulada, tanto el titánico castillo el cual se puede visitar parcialmente por dentro si no eres huesped, como las vistas exteriores.

Una maravilla. Antiguo castillo muy bien acondicionado en Parador. Recorrerlo y disfrutar por la noche de una bebida en la antigua plaza de armas, es una delicia. Para los "Amigos de Paradores" ofrecen un tour rápido con una breve historia del castillo y se pueden ver algunos de sus salones. La atención del personal es muy buena, son muy serviciales. El restaurante correcto, nada del otro mundo (me esperaba algo más).

Precioso castillo medieval, excepcional y excelente cada cosa.