La Posada del Moro

Hotel

No hemos podido estar mejor! La comida de 10! un trato inmejorable, sitio tranquilo y precioso… Lo recomiendo 100%. Volveremos!?

Trato exquisito, maravilloso negocio familiar. Hemos pasado un fin de semana maravilloso. Volveremos seguro. Recomendable 100 por 100. La cocina es un espectáculo.

Perfecto, maravilloso, humano, cercano, excelente, agradable, calidad, …, mas y mas.

Por recomendar, diría que todo, el amor por su casa, nuestra casa, porque así es como te hacen sentir, te acojen como si te conocieran de toda la vida, todo muy limpio y ordenado, muchos besos chicas y nos vemos pronto. Pd. Espero la próxima vez estar más más tiempo con vosotras besos.

Hotel espectacular, todo cuidado al mínimo detalle. Personal muy amable que te hacen sentir como en casa. Siempre vengo en Semana Santa y repito año tras otro.

Un ambiente familiar y personas encantadoras.

E l sitio la famila que lo lleva super encantadores la comida buenísima la oficina de agua de mar sus instalaciones y estás como en cas.

Impresionante, parada obligada. Servicio y atención inmejorable. Me encanta.

Establecimiento bien situado y con mucho encanto, tanto en su arquitectura como en las instalaciones. Lamentablemente el desayuno buffet era mediocre, se abusa de la pastelería industrial y se cobran 5 euros por dos huevos fritos. La habitación en planta baja tenía como vistas hamacas acumuladas y cajas de bebidas vacías. Al baño le hacía falta un ajuste de la grifería, ducha y cisterna. Wifi inexistente.

Es jenial es mui familia y sobre todo encantadores y buen servicio espectacular cuando se conoce te atrae como un imán.

Acabo de llegar de la posada del moro, es la tercera vez ke voy y espero poder seguir disfrutando de este mi paraiso particular. Gracias a Julia, Lucia, Sandra, Juan, Juan Carlos y a Maria José, esperó no dejarme a nadie atrás. Gracias por tantos momentos y tanto cariño y por esos manjares ke salen de la cocina con cuarto y mitad de cariño como dice Lucia.

Excelente todo, a nivel personal inigualables, todos los premios recibidos han sido largamente merecidos.

Un lugar maravilloso, decorado con mucho gusto. Todo limpísimo, personal entrañable, piscina, césped y jardines perfectos. Restaurante de 10. Volveremos sin duda.

Un lugar único y tranquilo, con paisajes naturales y un patio hermoso. Piscina enorme y tranquila. Habitaciones limpias y amplias. Dueños atentísimos. Al ser entre semana nuestra estancia, el desayuno no fue tipo buffet, pero abudante y rico igualmente. Repetiremos.

No es un mal lugar (estado en peor), pero no una buena cualquiera, en primer lugar no hay nada alrededor para hacer, (a solo un parque para niños sin tareas de mantenimiento) o restaurantes, eso es todo, luego en el interior: piscina no limpiar a menudo (lleno de insectos), sala llena de Ants en todas partes (incluyendo cama) y lo que considero lo peor, cabezal de ducha roto, pidió reemplazarlo o cambiarme de habitación, sin éxito, y por el amor de Dios, cuando son hoteles/albergues/B&B aprender una cortina no ayuda en una pequeña ducha, para poner una puerta de vidrio es barato y hace una diferencia!

Muy bueno como siempre. Buen servicio y mejor cocina.

Un lugar para desconectar del día a día. El Wi-Fi no llega a todas las habitaciones. Por contra la tranquilidad de la zona es de agradecer. Para las estrellas que tiene esta bastante bien. La decoración un poco caótica. La cocina del restaurante si lo que buscas es algo diferente es espectacular con productos de primera calidad. La mejor época para visitar Otoño con la berrea.

Es un hotel que ya deberían de aprender de él las grandes cadenas españolas. Tiene 2 estrellas pero su equiparacion según mi criterio es para cuatro. Hemos ido a hoteles de 4 estrellas de la cadena Meliá por ejemplo, que ya quisieran tener el servicio la amabilidad y el sentir que él cliente percibe cómo de estar en un lugar muy especial.

Un hotel encantador, relajante, familiar. Las dueñas amables y serviciales. La comida exquisita.

Lugar con mucho encanto y la comida muy buena. El servicio a pesar de haber una comunión fue bueno y ligero. Recomendable 100%

Habitaciones bonitas y renovadas, buena ubicación, se puede aparcar el coche fuera y el centro de la ciudad está a sólo 5-10 minutos de distancia. Los desayunos eran geniales (me encantó el pan).

Un lugar encantador y el personal muy humano y la comida buena no! Lo siguiente! un 10

La comida está buena pero el servicio muy regular. Hubo que insistir para que nos sirvieran bebidas y no repusieron el servicio de pan. Pedimos un revuelto de setas de la carta y nos traen un plato de setas de temporada de fuera de carta y lo quisieron cobrar como tal. No se llevaron los platos vacíos de la mesa durante la comida. El plato de ciervo está buenísimo al igual que el Caldero de ternera. La tarta de queso muy buena pero la de manzana es horrible y escasísima.

Un hotel de dos estrellas con mucho encanto. Habitaciones espaciosas, un precioso patio y desayuno continental suficiente para tomar una rica tostada, unos cereales o algún dulce.

Fuimos allí por un evento profesional. Desde fuera no te puedes imaginar lo que alberga en su interior. Tiene personalidad propia, con una decoración magnífica. Las habitaciones son amplias y cómodas al igual que las camas. El baño estupendamente equipado con dos lavabos y secador. Nuestra habitación daba directamente a través de una cristalera a un precioso patio. La comida bastante bien (sólo hicimos el desayuno). Por buscarle alguna pega, había una humedad enorme en la pared del dormitorio.

Leí muy buenas referencias hemos estado mi pareja y yo este fin de semana primeramente esperamos mucho rato en recepción solos hasta que nos atendieron pagamos y nos dio la llave una señora amable y pero sin más explicaciones mi ni nada nada y entrabas y salías sin nunca ver a nadie en recepción en los tres días, y la habitación número 005 es del año de la polca limpieza pero muy antigua con dosel del año 30 y muy pequeña… Y a la hora de marcharnos pedimos la factura y nos dio un papel pequeño como de recibo a mano escrito, y la cafetería no abren antes de las 10 y pico de la mañana poco personal y muy seco… Es bonita las instalaciones pero generales… habitaciones muy antigüas.

La recepción y las zonas comunes nos causaron buena impresión, si bien la habitación que nos asignaron no nos gusto. Habitación pequeña, mobiliario antiguo. Estaba bajo el nivel del suelo y las ventanas daban a un muro por lo que la luminosidad era nula. Lo peor los sanitarios con fugas. La señora que nos atendió durante el desayuno bastante borde.

Hotel muy agradable y muy buen servicio de cafeteria y restaurante personal muy atento y amable volvere al mismo hotel de cazalla de la sierra puntuacin un 9

La cena fantástica. El personal maravilloso nos aconsejaron el menú y calidad — precio sin competencia. Para ir sin pensarselo.

La Posada estupenda, buen sitio de relajación, distintos tipos de habitaciones y piscina de agua salada estupenda. Buena relación Calidad Precio, atención muy buena.

La HISTORIA del … La POSADA del MORO Cazalla de la Sierra. La AMISTAD y el buen SABOR siempre perdura en el TIEMPO Grácias marcel.

Comimos como siempre buenisimo todo con tranquilidad y mucho relax nos sentimos como en familia.

No pudimos quedarnos en la Posada porque no había sitio, pero cenamos los dos días en el restaurante. Muchas gracias por el trato, la amabilidad, por portarse tan bien con mi celiaquia y por esa comida que aparte de estar que te mueres te daba hasta besitos en el estómago de lo rica que está. Obvio, hay palabra de volver y a ver si la próxima vez hay sitio en la posada y lo conocemos por dentro. … Un saludo a Sandra, Juan, María, Carmelo y a Julia y Lucía que espero la próxima vez conoceros.

Es un sitio donde se come muy bien. Hay que llegar pronto para poder comer lo que desees, porque la comida se acaba pronto. Pero tienes unos postres muy buenos.

¡¡Nos han fastidiado nuestro fin de semana! Teniendo la reserva hecha, llegamos al hotel y nos dicen q no tienen habitaciones, q han tenido un problema con las tuberías y no encuentran fontanero pk es feria (no lo creemos), nos mandan a otro hotel q no cumple con las características de nuestra reserva por lo q nos negamos a pasar allí la noche. Tras un gran sofocon y decirle q vamos a ponerlo todo por redes sociales ya q los clientes no merecemos esto, la dueña nos consigue una habitación según ella se la ha quitado a otro cliente q va más veces al hotel, (no me lo creo), dicha habitación no es la superior q nosotros reservamos y pagamos pero nos quedamos por no fastidiar más nuestro fin de semana. El desayuno pésimo, poca variedad.

El hotel muy bonito la chica de la recepción super simpática. Tengo que decir que me falto el jamon en el desayuno creo q nadie come salami en la tostada y y deverian avisar cuando tienen eventos en el hotel como (bodas) que dificultan el bien estar y descanso del cliente que va buscando el descanso. Comer en la terraza es espectacular la carme de la barbacoa buenisima y los postres igual un saludo.

Incomparable e impresionante Posada en el bello pueblo de Cazalla de la Sierra. Personal familiar, amable y muy atento. Te ayudan a conocer los lugares de más interés en la Sierra norte de Sevilla. Vintage, limpio y con un estilo propio digno del mejor hotel de 5*. Un gran placer para todos los sentidos. Cocina y productos elaborados por ellos mismos. Las instalaciones exteriores con sus jardines y sus fuentes de estilo arabesco, te crean una sensación de paz y armonía. Los olores de sus jazmines y la frescura del hotel, te hacen viajar a otros tiempos de esplendor. Maravilloso.

Todavía estoy aquí. Me marcho esta tarde. OS aconsejo ke vengáis OS integréis y OS dejéis dar de comer por lucía y Julia, sin pedir, lo ke ellas quieran. Una semana maravillosa. Ah y no dejéis de probar las tartas de juan.

Inmejorable experiencia. Buenísima comida, buen servicio, excelente trato. Totalmente recomendable.

Fantástico lugar, impecable y con un personal muy amable. Las habitaciones espaciosas y bien equipadas. El pueblo es precioso y el hotel cuenta con unos bonitos jardines y piscina.

Hoy he estado comiendo en el restaurante de este hotel. Muy buena cocina pato a la naranja lomo de venado con salsa de frambuesa pate de Perdiz. Etc muy buen servicio. El hotel es precioso merece la pena.

Un caserón barroco y muy íntimo. Con muchísimo encanto y personalidad propia. Los jardines son preciosos, y en el otoño revientan de color. La habitación muy acogedora y elegante, pero muy pocas con cama de matrimonio. Dos camas aunque sean juntas… Son dos camas. El buffet libre para el desayuno muy bueno y completo. El restaurante… Menos bueno. Comida rica, pero escasa y cara. Puntos negativos? No hay Wi-Fi en las habitaciones y pocas habitaciones tienen cama de matrimonio.

Magnífica estancia en un oasis de tranquilidad, donde se despierta con el canto de los pájaros, entre el rumor del agua. Son atentos y el trato es muy familiar, cocina casera con productos de la tierra. La habitación amplia y la cama muy cómoda. Las instalaciones son acogedoras. Un lugar ideal para el descanso.

Ha sido una experiencia encantadora. Es un lugar tranquilo, con un jardín muy cuidado y el sonido del agua y de la naturaleza te lleva a relajarte y a disfrutar de la estancia. Quiero desde aquí dar las gracias a Julia, que en todo momento ha estado en la recepción y su ayuda nos ha permitido conocer todo el pueblo y sus gentes. El trato ha sido tan familiar y cercano que merece volver. Las instalaciones son grandes. Hay espacio para trabajar, para leer, para pasear. Las habitaciones algunas son más antiguas que otras pero se nota la inversión en aquellas que tienen más años. Están decoradas con mucho gusto. La limpieza es absoluta, el personal encargado de ella es encantador. Da gusto entrar en las habitaciones recién arregladas. Desde aquí recomendar el sitio si buscáis estar tranquilos y conectar con la naturaleza, con la tranquilidad y la buena gente.

Debo decir que me han sorprendido bastante las críticas tan positivas de este Hotel. No se si nuestro caso ha sido una excepción, pero yo comento mi experiencia. El Hotel es bastante tranquilo y no muy grande, lo cual nos gustó; aunque la decoración que tanto destacan en otros comentarios nos pareció bastante hortera (pero eso va en función de los gustos). Desde luego no nos pareció demasiado elegante. Lo más agradable, sin duda, el patio y el jardín con piscina. Supongo que en otra época del año lo hubiéramos disfrutado más. En cuanto a la habitación, en mi opinión fue bastante cutre. Ya nada más entrar, la puerta daba sensación de estar en Cuéntame. Las cortinas, cuadros y mantas, sinceramente eran horribles. Se veía todo bastante antiguo, aunque limpio. El único detalle respecto a la limpieza fue encontrarnos un par de pelos dentro de la cama. Las sábanas tenían bolitas del desgaste, y lo peor sin duda la almohada, muy alta y dura que te dejaba el cuello roto. En mi opinón, y por mi experiencia previa, la estancia era un cara para el confort de la habitación (escogimos la doble standar).

Soy ANDALUZ asta el hueso y he recorrido, tela marinera por profesión y como este rinconcillo no hay na de na un olee por la gente de mi tierra. Solo decir del hotel, dadas las circunstancias, me hubiese quedado mas tiempo. Pues se queda uno con la miel entre los labios.

Hemos ido con un Plab B, por lo pronto media hora en la recepción, no atendía nadie, la habitación numero 5 de la planta baja, antigua, simple y con malos olores en el baño, como positivo que daba al jardín. No esperen detalle de bienvenida, se les olvida, con lo cual indican la profesionalidad, el desayuno, corto pero correcto. Las instalaciones comunes están bien y dan una nula información sobre rutas de senderismo y no tienen información turistica de ningún tipo.