EcoHotel L’Aubier

Hotel

Super super me gusta mucho comer en L'aubier. Es muy de sabor.

Bonito concepto de orgánico y de vuelta a lo básico. Personal extremadamente amable y amable. Pequeño inconveniente, las camas son muy duras porque el colchón es delgado. Ese es su concepto. Para muchos aparentemente es cómodo. (Preferencias de ropa de cama ;) )
Algunas habitaciones disponen de una vista magnífica al lago Neuchátel. Muy limpio y ventilado.
El lugar es tranquilo y relajante.
Una estancia muy agradable para esta desconexión del estrés.

Básicamente hermoso, limpio, amoroso, etc. Lo que molesta es que un no conocedor imagina algo más bajo orgánico, natural, etc. Y no una filosofía Steinerschul. La comida está bien, pero muy especial — más que orgánico y de la región. Debido a las tarjetas ocultas 2 estrellas menos.

Excelente bienvenida y personal amable y sonriente.
El hotel está muy bien cuidado, la habitación era agradable con lo esencial disponible, vistas al lago y ropa de cama cómoda.
La calidad de los desayunos y las comidas es muy buena. ¡Una delicia en cada comida!
La tienda del hotel también le permite descubrir buenos productos orgánicos.
¡Nada que decir, era perfecto!
Excelente concepto!

Todavía tengo hambre. Un lugar que quiere ser orgánico y respetuoso del medio ambiente, que practica los precios exageró para una calidad que no lo es. Sin duda el lugar es agradable gente agradable, pero carece de un elemento para sentirse cómodo. Un tártaro a medio hornear, la carne es marrón, pan casero pero secar un buffet de ensaladas minimalista. En Resumen, no será una memoria imperecedera.

Muy bonito restaurante biodinámico con un magnífico panorama en el lago de Neuchâtel. Producen algunos de sus alimentos que se pueden comprar en su tienda.

Gran lugar para el tiempo de un fin de semana. El personal es muy amable y amable. Celebró un cumpleaños y todo estaba bien. Productos locales y orgánicos con una tienda de comestibles. Buenos productos de queso en el lugar. Las habitaciones son tranquilas y espaciosas, con una decoración sencilla y original. Cómodas camas. Buen desayuno Muy agradables paseos para hacer en la zona.

Gracias por su cálida bienvenida este sábado.
Nuestro taller "Lo que aprendiste en el camino" fue un gran éxito. Los participantes también disfrutaron de este lugar tranquilo, que estaba particularmente bien preparado para las reflexiones sobre el curso de la vida.

Siempre es bueno venir a probar o tener una comida de albura. Buena comida Mi sueño: estancia allí 2 o 3 días!

Gran desayuno Entre los mejores jamás probados. Vale la pena quedarse solo. Bonito camino, corto, en el bosque. Habitaciones y cena bien.

Estamos muy contentos con el Bio-Hotel, especialmente porque le damos gran importancia a la agricultura ecológica. La habitación era absolutamente tranquila, limpia y con maravillosas vistas!
También apreciamos la posibilidad de ir de compras en el Hotel, especialmente porque había un montón de posibilidades para la dieta vegana!
La oferta de menús para veganos es pobre. Sólo había un menú vegano que no podía ser considerado como de pleno derecho, ya que no contenía ninguna fuente de proteína vegetal. Un plato con legumbres sería ideal para esto, ya que también se podría ofrecer como un plato de ensalada en el buffet de ensaladas.

Este es un restaurante que me encanta. Le aconsejo encarecidamente. El entorno es precioso… tanto como los platos sus productos son principalmente su producción. O Sina local.
¡Bravo!

Servicio limpio, amable, buena comida.

Bonito lugar tranquilo con magníficas vistas por la mañana llegando hasta el lago. Buen desayuno y buena cena. Todos los alimentos se originan lo más localmente posible con la mentalidad ecológica. Ensalada mixta era genial. Nos alojamos en los pabellones exteriores, pero también hay habitaciones en la casa que son un poco más espaciosas. Sin embargo, no es necesario. Wi-Fi es estable en los pabellones pero ha demostrado ser más squeeky en las habitaciones del hotel.

La ubicación y la cláusula era agradable y muy amable… por desgracia la comida no estaba preparado correctamente. Con un poco más de amor para cocinar este será un Consejo privilegiado para la cocina simple y fina.

Gran lugar. Excelente comida ofrecida con menú à la carte. Ubicación con un carácter familiar que prefiere el uso de materiales naturales. Personal amable y profesional. Sin duda lo recomiendo para unas vacaciones de descanso y relajación.

Me decepcionó la comida y afortunadamente no tienen que pagar por mí.

Buena comida — ecológica. Personal amable. Maravilloso paisaje.

Hermoso lugar tranquilo. Gente muy amable para darle la bienvenida. Todo es orgánico en este maravilloso lugar.

Un lugar de seminario muy agradable que permite detener el tiempo de una reflexión. ¡ una vista excepcional del lago! Cocina local sencilla pero muy bien ejecutada. Las habitaciones son un poco espartanas pero este concepto minimalista (no hay televisión, etc…) tiene sus ventajas. Al final es un hermoso lugar para descubrir en un grupo o solo en el corazón de una hermosa región.

Gran servicio, bonitas habitaciones con vista al lago, excelente comida, barato e Alquiler de bicicletas, incl. Tarjeta de huésped también autobús y Bahnbilett, aparcamiento gratuito, todo limpio y amueblado con gusto!

Silencio, no música de fondo fe. Personal agradable.

Hermoso lugar. Los productos son locales, orgánicos y muy buenos. Paraíso para explicar al niño que los productos no crecen en los estantes de centros comerciales.

Desde la vista hasta el plato, todo es perfecto en este Un ambiente acogedor, un buen servicio y buenos clientes. La comida no sólo es increíblemente buena, sino también orgánica y local, la mayor parte proviene de la granja de demetros biodinámicos que se encuentra en Montzillon. Junto al Eco-hotel. Allí, el agua y la energía se ahorran y reutilizan siempre que sea posible, trabajando en estrecha colaboración con la comunidad local. Cristo de se tomó el tiempo para responder a todas nuestras preguntas y nos lo pasamos muy bien!
El Kombi Hotel-Restaurant-Café-Shop, situado en el centro y en las colinas de Neuchatel, tiene sentido porque todo se utiliza y recicla localmente de la forma más local posible.

La ubicación era muy buena
Cómodas habitaciones con espléndidas vistas al lago de Neuchatel.
Un poco caro, especialmente el restaurante.

Empleados muy sympathic y comprometidos. Comidas frescas y diversas.
No hay Wi-Fi en la mayoría de las habitaciones, pero el puerto LAN. Así que trae tu propio punto de acceso.
No hay televisión en las habitaciones, sólo radio. Pero una gran selección de libros gratuitos disponibles.
Fantástica vista sobre el lago de Neuchatel.
No hay aire acondicionado y algo minimalista/equipo esencial de la habitación.

Acaba de pasar nuestro primer aniversario allí y seguro que regresará. Rápido para llegar (de Berna) por transporte público, gran vista, buena ubicación, buen aire pero sobre todo el rollo y el clima en la casa son especiales: calma, natural, Pacífico rico!
también es ideal para saber que está rodeado por productos orgánicos, no sólo la comida sino toallas, jabón, detergentes. Tenía una linda caminata hasta mont racine, demasiado.

Me alojé allí por cuatro noches en febrero. La vista desde la habitación y el restaurante es grande (si el tiempo es bueno que no era el caso). Mi habitación era tranquila. Hay no hay televisión en la habitación pero encuentras libros todo alrededor de la casa. Si necesita Internet puede tener una rápida conexión por cable gratis. También adaptadores de alimentación suizo pueden ser libremente prestados. El desayuno también era bueno para mí con gastronomía (quesos, yogures y huevos).

Excelente restaurante, posibilidad de comer vegetariano… o no, según su gusto. Frescos de la región, productos orgánicos de temporada. ¡Siempre es un placer!