Nos encantó nuestra estancia en Aria — fotos hacer justicia en la zona de bar/ restaurante de la azotea y nos sentimos afortunados en la habitación 505 para ver el encantador jardín de la UNESCO por nuestra ventana. Nos pidieron una habitación tranquila y fueron más allá para acomodar. Si aún así lo hacía, teníamos wiFi seguro. El desayuno estaba incluido en nuestra tarifa y era realmente genial — huevos Benedict entre varios artículos de hacer bajo petición y bebidas espresso y prosecco estaba incluido, además de un buen desayuno continental! El equipo del restaurante con estrella Michelin brilló en aquellos que se hicieron a pedido y la mejor hamburguesa que he tenido en Europa hasta la fecha a través del servicio de habitaciones — estoy seguro de que hay oferta completa es genial, pero estaban llenos cuando llegamos. El personal era cálido e hizo todo lo posible para complacer, aunque algunos eran más cómodos en inglés que otros, que es totalmente aceptable para mí! Conserje un día no estaba dispuesto a ayudar con preguntas en el tren a Austria, que era un poco decepcionante, pero su colega en una ubicación diferente escogió un gran restaurante para nosotros. La ubicación se sentía perfecta en una calle tan linda y a 5 minutos a pie del puente de Charles.
La cama era cómoda, aunque las almohadas eran un poco endebles. La ducha era un reto con sólo una boquilla de mano, el suelo era super resbaladizo, así que tuvimos que usar el tipo de colchón bruto y la temperatura del agua estaba por todas partes. Los inconvenientes no me haría elegir de manera diferente me encantó nuestro lugar en Aria!
La cama era cómoda, aunque las almohadas eran un poco endebles. La ducha era un reto con sólo una boquilla de mano, el suelo era super resbaladizo, así que tuvimos que usar el tipo de colchón bruto y la temperatura del agua estaba por todas partes. Los inconvenientes no me haría elegir de manera diferente me encantó nuestro lugar en Aria!