Volví a este hotel donde ya me había alojado en 2015 y puedo decir con gran satisfacción que hice bien para poner de nuevo confianza en el Hotel empresarial: la vez anterior me había dado cuenta de algunos pequeños "brechas" llamar, las colinas de Botella más que cualquier otra cosa (también se destaca aquí en TripAdvisor) que en esta circunstancia, por otro lado, no se presentan en absoluto. Hecho.
El vestíbulo del hotel es grande y espacioso, el escritorio ' usual ' ya no existe y el check-in y salida tuvo lugar alrededor de una mesa redonda, al lado de los gerentes de conserjería. Amueblado con un gusto indudable con mobiliario moderno y sabor oriental. Debo admitir que me quedé gratamente impresionado; Así como el mobiliario de la habitación (esta vez sin duda espacioso y cómodo, así como equipado con todas las comodidades y agua gratis. La limpieza era aceptable y la iluminación de la habitación también. Cuarto de baño con productos gratuitos y atención al cliente si faltan algunos artículos de primera necesidad como cepillo de dientes o rasuradora.
El personal siempre se mostró sonriente, servicial y amable; Tanto el conserje y especialmente en el comedor donde desayunamos. Esta vez realmente perfecto con una calidad y una cantidad de productos de todo tipo realmente interesante (todo bien, incluso si era humanamente imposible probar todo en dos días solamente).
La relación calidad-precio es indudablemente adecuada tanto para el tipo de Hotel como para el ZNA, en Corso Sempione. En este punto, dada también la cercanía del hotel a la casa de algunos parientes, sin duda volveremos: hicimos bien en poner la confianza.
El vestíbulo del hotel es grande y espacioso, el escritorio ' usual ' ya no existe y el check-in y salida tuvo lugar alrededor de una mesa redonda, al lado de los gerentes de conserjería. Amueblado con un gusto indudable con mobiliario moderno y sabor oriental. Debo admitir que me quedé gratamente impresionado; Así como el mobiliario de la habitación (esta vez sin duda espacioso y cómodo, así como equipado con todas las comodidades y agua gratis. La limpieza era aceptable y la iluminación de la habitación también. Cuarto de baño con productos gratuitos y atención al cliente si faltan algunos artículos de primera necesidad como cepillo de dientes o rasuradora.
El personal siempre se mostró sonriente, servicial y amable; Tanto el conserje y especialmente en el comedor donde desayunamos. Esta vez realmente perfecto con una calidad y una cantidad de productos de todo tipo realmente interesante (todo bien, incluso si era humanamente imposible probar todo en dos días solamente).
La relación calidad-precio es indudablemente adecuada tanto para el tipo de Hotel como para el ZNA, en Corso Sempione. En este punto, dada también la cercanía del hotel a la casa de algunos parientes, sin duda volveremos: hicimos bien en poner la confianza.