Me alojé por más de dos semanas en el Eurhotel de Miramare Rimini en agosto de 2018 en una "habitación clásica" en el quinto piso con tratamiento todo incluido. Quería unas vacaciones divertidas en el estilo de Romaña con unas noches de baile y Miramare con la cercana Rivazzurra son definitivamente los centros turísticos más adecuados.
El Eurhotel Superior de 3 estrellas está situado a unos 40 metros de la playa, en buena posición porque en la avenida Regina Margherita pasa el autobús no 11 que lleva a Riccione y Marina Centro.
En cuanto a las comodidades, la relación calidad-precio es buena: tiene una bonita piscina y zonas comunes muy amplias, las acogedoras habitaciones con aire acondicionado, muy bien amuebladas con televisores, caja fuerte y limpia, amplio balcón, baño con ducha y Wi-Fi gratuito; dispone de plazas de aparcamiento independientes de entrada/salida en el hotel. Sombrillas y tumbonas en la playa (baño 134) y en una excelente ubicación. La comida es buena con una amplia selección de 3 menús, siempre uno de mar y uno de tierra. Agua y vino a voluntad con elección entre vino blanco y tinto. Cada semana hay una cena de la Romaña con platos típicos y para seguir la noche de baile con un artista conocido siendo un miembro del famoso grupo "Homo sapiens" en boga en los años 70 a 90. Diversión asegurada con bailes de pareja (valzer, mazurka, polka y tango) y bailes grupales estándar desde el hall: ullygully, cumbia, mambo, beguine, etc. Por la noche, el hotel ofrece el "Sangria". El personal es muy acogedor y servicial, todo sin distinción: desde la recepción, al personal de la habitación, para terminar en los limpiadores de las habitaciones; todo siempre cortés y sonriente y listo para resolver cualquier situación para hacer las vacaciones agradables a la clientela. Una mención especial en el Eurobar donde se puede disfrutar de grandes aperitivos con música a todas horas. Mi opinión es positiva, comí bien y me divertí, tal vez los que aman los atracones en la mesa no lo pensarán así porque algunos platos eran modestos como cantidad (ver el pescado frito) y en el buffet por lo general sólo había verduras, pero la calidad era grande Volveré el año que viene.
El Eurhotel Superior de 3 estrellas está situado a unos 40 metros de la playa, en buena posición porque en la avenida Regina Margherita pasa el autobús no 11 que lleva a Riccione y Marina Centro.
En cuanto a las comodidades, la relación calidad-precio es buena: tiene una bonita piscina y zonas comunes muy amplias, las acogedoras habitaciones con aire acondicionado, muy bien amuebladas con televisores, caja fuerte y limpia, amplio balcón, baño con ducha y Wi-Fi gratuito; dispone de plazas de aparcamiento independientes de entrada/salida en el hotel. Sombrillas y tumbonas en la playa (baño 134) y en una excelente ubicación. La comida es buena con una amplia selección de 3 menús, siempre uno de mar y uno de tierra. Agua y vino a voluntad con elección entre vino blanco y tinto. Cada semana hay una cena de la Romaña con platos típicos y para seguir la noche de baile con un artista conocido siendo un miembro del famoso grupo "Homo sapiens" en boga en los años 70 a 90. Diversión asegurada con bailes de pareja (valzer, mazurka, polka y tango) y bailes grupales estándar desde el hall: ullygully, cumbia, mambo, beguine, etc. Por la noche, el hotel ofrece el "Sangria". El personal es muy acogedor y servicial, todo sin distinción: desde la recepción, al personal de la habitación, para terminar en los limpiadores de las habitaciones; todo siempre cortés y sonriente y listo para resolver cualquier situación para hacer las vacaciones agradables a la clientela. Una mención especial en el Eurobar donde se puede disfrutar de grandes aperitivos con música a todas horas. Mi opinión es positiva, comí bien y me divertí, tal vez los que aman los atracones en la mesa no lo pensarán así porque algunos platos eran modestos como cantidad (ver el pescado frito) y en el buffet por lo general sólo había verduras, pero la calidad era grande Volveré el año que viene.