Herbert Samuel Jerusalem

Hotel

Gran ubicación. Limpia y agradable, hotel boutique.

Pasé 2 noches en este hotel, me esforzaré por ser lo más justo posible porque hay bastantes puntos negativos.
Es importante saber que el Hotel Hébert Samuel sólo ha abierto durante un año y medio.
Es de 5 estrellas (tengo curiosidad por saber quién les dio…) y se encuentra en el centro de la ciudad de Jerusalén.
Para empezar, su ubicación es el número 1 1 puede caminar hasta el casco antiguo, al mercado de Mahané Yéouda, al centro de la ciudad, en los barrios ortodoxos de Mea Shearim… y muchos otros.
Otro punto positivo es que el Hotel ofrece acceso gratuito a bicicletas (con cerraduras proporcionadas bajo petición). La zona del hotel es peatonal y el tranvía pasa a 1 minuto a pie.
La recepción del hotel es de 5 estrellas, las azafatas están sonriendo y hacer su placer para ayudar.
Una vez en la sala, el engaño comienza… esto no es un 5 estrellas, los acabados no se hacen, los productos para el cuerpo (gel, champú, demela y la loción del cuerpo muere) son de calidad media.
El asiento de la ropa de cama es firme (no me importa) pero los primos son demasiado duras y desagradable.
Las habitaciones son muy pequeñas y especialmente muy mal aisladas.
Yo estaba frío (noches de 21 y 23 de diciembre, sin duda, pero fuera de la temperatura de 17 grados), no había edredón adicional, pero en su mayoría oí ruido en los pasillos y en la calle (7º piso).

Perfecta ubicación y gran nivel.

Hermoso hotel! Gran servicio. Habitaciones preciosas. Muy recomendable.

¡Me encanta! el mejor momento en esta zona, el Hotel es fantástico y tiene todo que necesitas para unas vacaciones abundantes.

¿18 y piscina de natación?
Soy un Youtuber
¡ pero sigue siendo bastante bueno!

El renovado hotel está en una ubicación privilegiada (no aparcamiento-sabio, pero en el centro) y está bien diseñado.
Aunque la habitación era bastante pequeña, era espaciosa y de clase alta.
El personal estaba bien y las instalaciones son bastante buenas.
El piso de la salud incluye un hermoso Hamam-como la piscina con un diseño hermoso y decore agradable. Hay un pequeño gimnasio y un gran vestuario/zona de ducha.
Las desventajas eran: el masaje-el massuse no prestar atención a mis peticiones y gustos y también no masaje tan fuerte como le pedí.
Y el desayuno, que para un hotel israelí es muy extraño y extraño. No había una gran elección, las diferentes secciones estaban demasiado extendido y los camareros eran muy lento o simplemente no pagar la atención que se espera. Tienes que ir y conseguir su propia bebida caliente y parada en la cola como si no hay comida caliente esperando en su mesa.
Aparte de eso, nos encantó el Hotel y lo recomiendo.

El personal era muy amable. El desayuno es delicioso y sirve en el tejado.
El lado de este hotel es que no hay aparcamiento en el lugar, y las habitaciones son bastante pequeñas, pero en general fue una gran experiencia.

Buena ubicación, habitaciones y desayuno.

Qué hermosa joya de un hotel en el corazón de Jerusalén. ¡ las habitaciones están bien equipadas, la ducha es fantástica y hermosa, el personal servicial, las bicicletas gratis tan divertido, el desayuno delicioso! Y lo más destacado — un fantástico masaje (¡ gracias Avital)!