Selina Atitlan

Albergue

El hotel cuenta con un hermoso jardín y una piscina infinita con vistas a los volcanes. El personal es muy servicial y servicial.

Un hotel acogedor con una hermosa vista, excelente servicio, buena comida y todo un gran hotel.

Muy buen hotel, estilo colonial. Las habitaciones son muy bonitas y el servicio muy bueno.

Excelente hotel. Muy confortable y con vistas y servicios espectaculares. El personal es muy amable y su jardín botánico invita a recorrerlo.

Lugar inigualable, es una vista unica.

Tiene unos bellos jardines con vista al volcán, el hotel es muy acogedor, puede venir a pasar unos días y tomar el café viendo la bella vista de las montañas.

Encantador hotel, con buen servicio, un maravilloso jardin, muy buen cuidado y unas vistas preciosas. Las habitaciones muy cuidadas.

Fantásticos hotel Atitlán. Decoración tradicional folklórica. Respetuoso del medio ambiente. Jardín de flora tropical y autóctona. Reserva de aves. Atención muy cuidada. Buena comida a precios razonables.

Los jardines más bellos y vistas del lago Atitlán.
La comida y el servicio eran excelentes.

Hotel con vistas y jardin espectaculares. Muy amables, habitaciones confortables y comida muy rica y tipica. Me gusto mucho!

Un lugar muy agradable y romántico, excelentes vistas del Lago Atitlan, jardines tranquilos y relajantes. La zona de la piscina es hermosa, perfecta para disfrutar de amaneceres y puestas de sol, especialmente en noviembre. La comida está bien… nada para morir, pero el resto del lugar totalmente vale la pena.

Un lugar increíblemente encantador. No nos alojamos, sólo tuvimos el desayuno buffet. La comida y la vista están muy por encima de la media! Los precios son altos, pero razonable para lo que obtienes: todo lo que puedes comer, gran vista, y un buen servicio sin prisa. Vale la pena;-)

Lugar Encantado para bodas de destino, frente al lago más profundo del mundo, entre volcanes. Una experiencia maravillosa.

Excelente comida, paisaje, jardines. Todo maravilloso.

Hermoso encuentro con la naturaleza… quedé enamorada!

Bellísimo hotel es un orgullo chapín frente al lago más bello del mundo.

Nuestra estancia fue muy placentera, las habitaciones bastante cómodas y acogedoras, la comida excelente, buen Buffet de desayuno. El área de la piscina y la piscina muy buenas, tanto como el servicio. Volvería a hospedarme con ellos sin duda ni titubeos.

Maravillosamente personal, habitaciones tranquilas, duchas de agua caliente excelente ubicación.

Para empezar, nuestra habitación no estaba la habitación que habíamos reservado, y no puede ser movido ni se le proporcionó un reembolso por la diferencia en los precios. Aparte de que hemos recibido un mal servicio (ellos estaban más preocupados por los grandes grupos que se alojan allí), sub-par la comida para el precio, y la ineficiente gestión. Todavía estoy esperando un reembolso de más de 6 semanas después de cancelado el resto de nuestra reserva, a pesar de varios correos y llamadas. A pesar de que una buena vista y la piscina, yo recomendaría alojarse en otro lugar.

Gracias a Dios tuvimos la oportunidad de compartir el fin de semana pasado con mi esposo César y mis hijos Julián y Linda en este bello hotel, fue una buena experiencia, las instalaciones son excelentes, acogedoras, realmente logramos descansar, los jardines del Hotel son lo máximo al igual que la bella vista al lago, desde tu habitación. La comida es muy rica. La verdad tengo que felicitar al personal del Hotel todos muy amables y atentos. Gracias brindarnos estadía en sus instalaciones. Espero poder hospedarme en una próxima oportunidad.

Mi familia y yo nos alojamos aquí por mis hijos boda Feb de 2014 y fue perfecto. Yo no pude haber deseado para una mejor ubicación, comida, cuidado y atención al detalle. Muchas gracias por lo que es un día para recordar.

Excelente ubicación junto al lago.

Además de hotel podríamos decir que es un jardín botánico con hermosos y cuidados jardines para pasear. También podríamos decir que es un museo pues tiene incontables piezas de arte sacro y de arte típico de Guatemala, distribuidos en los pasillos, habitaciones, salas, etc. El comedor tiene una magnífica ambientación, y el Wi-Fi funciona perfectamente. Enfrente a la recepción hay una tienda con muchos productos, pero no compramos nada pues sus precisos son superiores a los de la calle en Panajachel. Se dispone de cofre en la recepción que no cobran. Disfrutamos de un desayuno chapín, como llaman a lo guatemalteco: Salsa ranchera, salsa de frijoles, tortillas, dos huevos fritos, plátanos fritos, nachos, queso, guacamole… y café con leche… por supuesto. El personal con vestimenta regional es muy amable. Las habitaciones tienen vista al lago y a los volcanes, un lujo.

Hermosos jardines, que se mantienen muy bien, el hotel ocupa un gran lugar para alojarse en el lago. El personal es muy amable y servicial, las instalaciones son buenas, y es sólo un paseo corto de tuctuc a la ciudad (cuesta 10Qz por persona ~ $1.5 o £1 cuando nos alojamos)
Merece la pena teniendo en cuenta, al menos en la suite que nos quedamos en, no tiene aire acondicionado. El lago está en ~1500m/~5000ft así que ac no era esencial cuando me alojé, pero sería bueno si la temperatura era mucho más alta. También cabe destacar que las paredes son un poco finas, nuestros vecinos ronquidos se escuchó muy claramente.

Tan así, los alimentos no son tan buenos. Y un poco lejos de la ciudad.