Hotel Dato

Hotel

Pequeño y acogedor. Buena atención. Situación inmejorable en el centro de Vitoria.

Excelente ubicación en la zona peatonal a pocos minutos a pie del casco antiguo.
Estilo de la libertad a la máxima potencia, puede parecer excesivo, pero para mí fue un buen resultado. Habitación pequeña con ventanas con arco y baño adecuado. Limpieza en la norma.

Lugar extraño sacado de otra época, pero muy limpio y con un personal encantador. Merece la pena estar en otra época.

Un hotel con encanto. Nos gustó mucho como estaba decorado. Está en un sitio privilegiado, una calle peatonal en el centro de Vitoria. El trato recibido fue exquisito. Si vuelvo a Vitoria seguro que repetiré.

Hotel curioso dispuesto muy cerca de la estación de tren lo que lo hace muy práctico y muy bien comunicado al estar en la zona céntrica de la ciudad. A mi gusto encuentro ciertas carencias para ser catalogado como hotel, la primera de ellas el que no disponga de un ascensor. La habitación carece de un mínimo de practicidad, ya que no tiene luz pequeña de lectura, carece de mesita de noche, y respecto al baño, la puerta al ser de cristal cada vez que enciendes la luz del baño en plena noche la persona que está descansando al lado de esa puerta le truncas el sueño. Tampoco tiene ninguna repisa donde dejar ni tan siquiera el cepillo dental. Una bañera excesivamente alta que hace que sea realmente incómodo entrar en ella. Por lo demás el servicio es correcto…

La decoración es. Increíble, el baño de los 60. Limpio estaba.

Céntrico, curiosa decoración. Cama y baño bien. Escalera entrada.

Hotel acogedor, limpio y muy bien ubicado para recorrer la ciudad a pie. Trato del personal muy amable.

Muy bien ubicado. Si vienes en coche tienes que saber que es una calle peatonal, aunque en el hotel puede contratar una tarifa de parking, que está justo al lado. El único punto negativo, por decir algo, es que no tiene ascensor.

El Hotel Dato es un hotel bonito y acogedor, con una decoración clásica, pero a mí opinión bonita. La habitación bien equipada con cuarto de baño incluido, la cama muy cómoda, y hay calefacción, en invierno aquí uno/a no pasa nada de frío, buena ubicación en lo más céntrico de Vitoria, al día siguiente, cuando no estás ponen a punto la habitación, como si fuera tu primer día de disfrutar la habitación, buena atención al cliente, recomendado hospedarse por vacaciones o trabajo.

Habitación bien, lo malo que tienes que subir por las escaleras con las maletas no hay ascensor, pero el hotel está en un sitio muy bueno.

Muy buen trato y un espacio acogedor. Aúnque la cama de matrimonio era algo pequeña, pudimos dormir bien y tener nuestras noches de.

Un hermoso lugar en el centro con una hermosa vista hay un lado todo tipo de tren de transporte, tranvía, taxi además todas las tiendas de discotecas y bares realmente rodean está bien situado.

Hotel situado en pleno centro y con un buen precio. Al estar en una calle peatonal no se puede aparcar en la misma calle, pero tiene un acuerdo con un parking muy cercano y te hacen descuento por hospedarte. El hotel tiene una decoración tipo rococó y tal que a algunas personas les gustará y a otras no, a mí personalmente me gusta. Habitaciones medianas, con ducha, todo muy limpio y correcto. Lo peor, que hay que subir un piso hasta la recepción, y que no tiene ascensor. El personal muy simpático y agradable. Yo casi siempre que voy a Vitoria me alojo aquí, me parece un valor seguro.

Excelente localización. Trato amable. Curiosa decoración. Buen precio. Estupendas almohadas.

Es un bellisimo pequeño hotel en el que me alojo una o dos veces por año siempre por mas de diez dias, en la ultima decada. Es exquisita la ambientacion llena de antiguedades increibles (que a veces dan un curioso toque surrealista a escaleras, pasillos y habitaciones). Ademas de bello, de agradable, es muy comodo. Es atendido muy profesionalmemte (con calidez y cortesia) y con una ubicacion excepcional en el corazon de Vitoria. Se merece todas las estrellas! Ignacio Velez.

Muy buena ubicación y precio, habitaciones sencillas.

Muy amables, cómodo. Bueno para pasar una noche y en pleno centro.

Un lugar acogedor muy cerca de la estación de tren y de la ciudad vieja y muy barato! Excelente servicio!

Para mi estupendo. Calidad precio muy buenos. Muy limpio y personal estupendo. Las habitaciones se podrían mejorar, pero no se si el hotel perdería encanto. Recomendable.

Habitación de buen tamaño, tranquilo, baño para una persona esta de 10 y con un pequeño armario. Aconsejo muy mucho este hotel.

Satisfecho. Todo limpio, buena atencion y en pleno centro de Vitoria. Si incluyera desayuno o fuera algo mas barato le daba 5 estrellas.

Gente amable, una gran cama, suaves sábanas y una almohada de espuma de memoria. ¿Qué más puede desear? Cerca de todo lo que pueda desear. Mucho más acogedor de los hoteles más de lujo que me he alojado en. Muy recomendable.

Mi larga estancia en el Hotel Dato es un gran placer. No sólo era todo el mundo, sin excepción, amable y servicial, pero yo sentía que había encontrado muy buena gente en una nueva tierra!
La habitación estaba bien equipada con todo lo que uno puede ser que necesite para estar cómodo y en contacto con el mundo a través de la conexión Wi-Fi. El jardín afuera de mi ventana fue una delicia.
Estar en el centro había acceso casi inmediato al sistema de transporte público de toda la ciudad, estación de tren, restaurantes, teatro y casa de la cultura.

Muy céntrico, buena atención al cliente y buenos precios, habitaciones cómodas y buen servicio. Me encanta su decoración al más puro estilo Art Nouveau.

Siempre voy a este hotel. Céntrico.

Muy céntrico. Relacion precio/calidad:aceptable. Muy pequeño (creo que dos habitaciones por planta). Hotel sin ascensor. Pide la 1ª planta. Decoración y equipamiento muy retro y kitsch.

Creo que el hotel es precioso y está muy bien situado, pero tuvimos la mala suerte de que nos dieran la habitación de arriba de todo, que no tiene persiana y entra muchísima luz de las calles con lo que es imposible dormir bien. Supongo que las otras estan mucho mejor.

El confort del que se presume en las habitaciones, es nulo. Las camas antiguas, viejas, hacen ruido, sin ascensor. No lo recomiendo, además de cobrar demasiado (57€) no merece la pena, aunque esté en una calle céntrica.