Casa Grande da Ferreria de Rugando

Hotel

Una casa rehabilitada con muy buen gusto y materiales de calidad que le dan un aspecto antiguo o vintage. Hay mezcla de cosas modernas con auténticas antigüedades muy bien conjuntadas. La ubicación es aislada e ideal para el relax en pareja y para senderismo o bici de montaña. Los desayunos son abundantes y con variedad de dulces y salados. Las cenas se eligen entre varios primeros y segundos, diferentes todos los días. Buen trato del personal, vale la pena. Las suites muy bonitas, aunque en la nuestra no funcionaba bien el hidromasaje. Las filloas rellenas de grelos, espectaculares.

Sitio alucinante para ir a descansar y desconectar.

La casa es preciosa y la ubicación mucho más pero echamos en falta la amabilidad y el mimo con el que nos suelen tratar en otras casas rurales… La comida muy normalita. Lo peor de todo: la piscina no es climatizada!

Una casa preciosa, unos paisajes maravillosos y un trato exquisito.

Recomiendo ir a este sitio relajación total y para desconectar del mundo me encanta y más si vas con el amor de tu vida.

Excelente, ideal para aislarse o empezar diversas rutas de senderismo.

Servicio muy amable, comida extraordinaria, paisaje precioso, tranquilo, sitio ideal para desconectar. Unica pega es que no tiene mas actividades solo piscina cubierta y juegos de mesa y pin pon, para parejas jovenes no hay actividades para hacer ya que esta muy aislado y es una pena porque con el rio al lado podria aber canoas, bicicletas, y muchas otras opciones. Aun asi para el que le guste tranquilidad, senderismo y un bonito. Ambiente sitio perfecto.

El sitio es increíble y la casa es preciosa, especialmente la suit. La comida estaba deliciosa y el trato fue magnífico. El fallo es que estaba más caliente el hall que nuestra habitación, teníamos Wi-Fi fuera pero no en la habitación y no teníamos cobertura; de los dos televisores uno no cogía nada y el otro la primera ; el sonido del río se hace muy bonito pero lo escuchábamos con la ventana cerrada y durante toda la noche. Las mantas del armario tenían mucho polvo y sólo había café de máquina. Cuento las deficiencias porque lo bueno ya es esperable en una suit de una casa con tan buena puntuación.

Espectacular el sitio donde esta situado y muy bien rehabilitado el local… y si a eso le sumas trato y comida exquisitos con precios muy razonables… la unica pega es lo descuidados de los senderos proximos espero que el concello de quiroga tome nota pronto.

Para perderse, aislado del mundanal ruido. Habitaciones muy cómodas, restaurante, lareira, ping-pong, billar americano, piscina natural en el río Soldón, piscina climatizada, y una atención esmerada. Perfecto para la práctica de senderismo o sólo descansar.