Pazo Revel Hotel & Resort

Resort

Lugar mágico, súper tranquilo y perfecto para descansar y desconectar del estrés y del caos de la ciudad.
Su staff gente sencilla y muy agradable. Ya estais tardando en visitarlos! :)

El lugar es idílico, emana paz, tranquilidad e invita al descanso y ala desconexión. El personal que nos atendió inmejorable y súper atento. Me encantaría repetir.

Lugar para la tranquilidad, con personal muy amable, desayunos muy completos y piscina para disfrutar del buen tiempo.

El lugar es impresionante. Emana tranquilidad. Tiene unos preciosos jardines por los que poder pasear tranquilamente disfrutando de su belleza. Todo está muy bien cuidado. Dispone de piscina. El desayuno es muy variado y esta riquísimo. Y la atención de su personal es inmejorable. Nosotras quedamos encantadas, y los perretes también. Lo recomiendo 100%.

Excelente ubicación, a escasos minutos de las mejores playas de la zona y a apenas una hora de Santiago de Compostela. La atención del personal inmejorable y el Pazo tranquilo y con encanto, en especial la zona de la piscina.

Un lugar Precioso, el entorno supervisado, tranquilo. La atención y el personal de 10 Muy muy recomendable. Volveremos.

El balance ha sido positivo. Antes de ir allí, habíamos consultado diferentes opiniones e íbamos en sobre aviso porque varias de ellas tenían carácter negativo. Una vez allí, por más que le dimos vueltas a esas opiniones negativas, no les encontramos ningún sentido. Estamos de acuerdo con que la decoración y la habitación es austera, pero muy limpia (que en nuestra opinión es lo más importante), eso sí, la cama de matrimonio es algo pequeña +/-1.20m. Por lo demás, el trato personal, fabuloso, gracias a Jorge desde la entrada ya que su atención siempre fue muy personalizada, también a Julia que te hacía sentir como de la familia (enhorabuena por esa cocina), del mismo modo, es de agradecer la cercanía de Alejandro. El desayuno está muy bien, un comedor espacioso, un surtido completo, variado… etc. El Pazo es impresionante con buenas instalaciones que incluyen cuidados jardines, una piscina estupenda (buen tamaño, limpia e instalaciones). Destacar también el parking de en frente del Pazo, el cual resulta cómodo para los desplazamientos y constituye un plus de seguridad para el coche. No queremos acabar esta opinión, sin destacar el restaurante, con pocos platos pero muy elaborados, están muy bien. Desde nuestro punto de vista, primar la calidad a la cantidad está muy acertado. Ánimo con el proyecto, adelante. Estamos seguros de que tarde o temprano, volveremos.

He pasado con mi chica 9 días en este encantador y tranquilo hotel… Todo perfecto, el sitio genial el personal 10. Sitio estratégico para visitar las Rías Bajas y descansar en un palacete botánico.

Mi experiencia en este pazo ha sido desastrosa. Las toallas viejas, de un material tan malo que ni secaban. Las sábanas llenas de bollos que rascaban para dormir. En nuestra reserva teníamos asignada una habitación con balcón y nos encontramos con la sorpresa de que nos habían alojado en un cuarto situado en la planta baja y sin el balcón señalado. Del desayuno todo fueron sorpresas. El primer día nos encontramos sin tazas y vasos. Tuvimos que esperar un buen rato hasta que repusieron todo. Esa mañana nos informaron de la posibilidad de desayunar en el jardín. Así lo hicimos. El segundo día el método había cambiado. El zumo había sido sustituído por jarras repletas de agua, los cereales ya no estaban, en su lugar las camareras los llevaban en un cuenco a aquellos que lo solicitasen. Y qué decir del pan. Mientras el primer día cada persona lo podía coger, a la mañana siguiente descubrimos que las camareras lo colocaban sin orden ni control en cada mesa. Cuando descubrimos esa novedad referente al pan y nos dimos cuenta que el desorden era tal que a nosotras no llegaba la esperada cesta, hablamos con una de las camareras. Con mucha educación nos indicó que iría en breve. Sin embargo eso nunca sucedió. Acabado el café me dirigí a pedirle si sería posible que nos hiciese llegar el pan y mi sorpresa fue enorme con la respuesta tanto de la primera camarera como de la segunda que llevó a nuestra mesa la cesta.

Un lugar hermoso para disfrutar de un día especial. Recomendado.

Un lugar tranquilo e idílico para disfrutar de unas vacaciones cerca de la playa y en un entorno maravilloso.

Un pazo rústico con jardines muy cuidados, piscina y un trato amable. Ideal para desconectar.

Hemos estado a mediados de agosto de 2017 y todo muy bien. Lugar muy bonito. Preciosos jardines, todo muy bien cuidado. El trato del personal es inmejorable.

Maravillosa localización, el hotel es precioso con habitaciones muy cómodas y unos jardines con piscina geniales. Me hicieron sentir como en casa desde el minuto uno. No se puede dejar pasar la oportunidad de relajarse unos cuantos días aquí.

El sitio es precioso quien quiera buscar tranquilidad es perfecto, limpieza y atención muy buena. El desayuno tampoco ninguna queja. La piscina y sus alrededores muy bien cuidado. Está bastante bien situado ya que movièndose en coche llegas en nada a, sitios como el Grove, Sanxenxo centro, Portonovo etc. Volvería a repetir.

Nuestra estancia en este hotel ha sido muy agradable. Aunque el servicio de habitaciones ha sido bastante escaso. Desayuno sencillo, pero el camarero ha sido muy atento en todo momento.

Increíble lugar para descansar y desconectar. Rodeado de unos jardines de ensueño y un trato excelente. Situado en el corazón de las Rías Bajas donde encontrarás playas preciosas y rutas gastronómicas y del vino donde disfrutar de los mejores productos de las costas gallegas.