Parador de Vilalba

Hotel

Es para repetir sin duda. Un trato especial desde el primer empleado hasta el último. Buena comida y buen precio.

Muy bonito, limpio acogedor. Y con todos los servicios necesarios. GrZCias a todo el personal.

Las habitaciones son bonitas, esspecially en el antiguo towerof el Castillo.

Un hermoso lugar con un excelente servicio y una agradable ciudad. Especialmente atractiva para los ciclistas y hay cargadores para Teslas así.

Es bueno para la estancia de dos días!

El Hotel es estupendo y el personal es muy agradable. Vilalba no es tan interesante. La señora de la recepción fue muy servicial y me sugirió que tomar un corto trayecto en autobús a Lugo para visitar esa ciudad. Fue una excelente sugerencia. También estaban muy dispuestos a empacar me un almuerzo para el día siguiente en el camino.

Bonito, comodo. Limpio. Recomendado.

Un hotel muy bonito con un excelente restaurante, el restaurante está situado en la parte inferior de la torre del siglo 15 es un ambiente muy agradable con un gran ambiente y deliciosa comida y camarera amable, las habitaciones son agradables y cómodas, con un tamaño decente y agradable y el personal es muy amable, el desayuno es muy bueno, muy recomendable.

El parasor es precioso. Personal muy amable. Tranquilo. Muy bien situado para vsistar Galicia. Muy recomendable.

Un hotel muy bonito con un excelente restaurante, el restaurante está situado en la parte inferior de la torre del siglo 15 es un ambiente muy agradable con un gran ambiente y deliciosa comida y camarera amable, las habitaciones son agradables y cómodas, con un tamaño decente y agradable y el personal es muy amable, el desayuno es muy bueno, muy recomendable.

Cómo la mayoría de Paradores decoración anticuada pero es uno de sus encantos. Personal muy amable y edificio histórico con torreón impresionante.

Hotel muy bonito y pintoresco. Las habitaciones son muy grandes, aunque algo anticuadas. Las camas muy cómodas. No dejéis de echar un vistazo al torreón medieval.

Excelente, muy buena atención.

El parador es dentro de estos alojamientos uno de los más normalitos, un buen hotel sin más. Lo único histórico es la torre de los Andrade que de su pasado conserva solo las paredes, el resto del edificio es una construcción moderna que se adapta al estilo constructivo de la torre. Las habitaciones son amplias y bien decoradas, los baños correctos. La atención y limpieza buena.

Solo estuvimos en régimen de alojamiento y desayuno. Ubicación centro ciudad con parking privado. Todo perfecto tanto en atención y limpieza. Desayuno completo. Gusto exquisito en todo el Parador principalmente en la Torre. Vale la pena si te viene de paso hacer una parada.

El edificio en sí es bonito. Para mi opinión deja mucho que desear la amabilidad de la mayoría del personal así como la limpieza. A mediodía cuando estábamos descansando en la habitación y sin llamar se nos presento en la habitación la limpiadora. Veníamos haciendo una ruta de cinco noches y era el tercero y por supuesto el peor.

La directora Doña Laura muy eficiente y amable. Buen servicio de Restaurante.

El parador en si está muy bien. El personal es encantador. (He notado falta de personal sobre todo a la hora del desayuno). Pero en una mañana te puedes recorrer Vilalba y su paseo fluvial, y ya no queda más que hacer aquí. Puedes usarlo como base para visitar Lugo, o Santiago… Pero seguro que hay sitios mejores y mejor situados para usarlos para ese fin.

Un buen Parador. La Torre medieval, muy bonita y muy bien conservada. El resto del Parador, edificio de principios de siglo, pero muy bien hecho respetando la arquitectura tradicional y dando ese toque de histórico al Parador. Reservamos una doble superior y es una pasada de grande y de cómoda. El desayuno muy rico, con zumo de naranja natural y productos de muy buena calidad, por no hablar de la tarta de queso que está buenísima. El personal muy amable y servicial, en especial Laura Sánchez, la recepcionista, muy educada y siempre con una sonrisa. Todo el conjunto hace que tenga una gran calificación. Se puede aparcar gratis en las inmediaciones del Parador sin problema.

La habitación era triple y enorme de tamaño. La cama supletoria era buena, igual q la de matrimonio. El baño muy bien, la limpieza buena, la caja fuerte genial con el sistema de apertura con tarjeta de crédito pero gratuita. La puerta de la habitación parece segura con cerradura real. Negativo, se oyen las campanadas de la iglesia próxima, el suelo de madera hace ruido cuando andas, el servicio de camareros un poco despistados aunque de trato agradable. Hay aparcamiento cerca si no hay feria durante la estancia. El buffet de desayuno completo y variado.

Por donde empezar… la habitación enorme y con todo lo necesario además de tranquila. El personal simpatiquísimo y amable. Lugar perfecto para pasar unos días por estas tierras.

Bonito Parador, con el único inconveniente de que sólo se puede cenar en la taberna.

Estancia económica. Es muy acogedor y se come bien y barato en su restaurante.

Parador muy familiar con un personal excelente que tratan al cliente con sincera amabilidad. Todo el personal, desde la limpieza de las habitaciones, pasando por restauración y recepción merecen un sobresaliente alto. Es un Parador al que pensamos volver por el sitio, por el lugar donde se encuentra y sobre todo por el personal. Ha merecido la pena.

Muy cómodo y limpio en el centro del pueblo.

La habitación del Torreón, espectacular. El menú degustación buenisimo y abundante.

Restaurante estupendo y a buen precio.

Situado en el castillo de los condes de Vilalba (familia De Andrade), del edificio original sólo queda la torre del homenaje que ha sido ampliada con un edificio adyacente y aparcamiento. Estancia agradable y buen restaurante.

Nunca he visto bien el que con dinero público se cree una red de hoteles "exclusivos" a los que al menos yo no puedo ir. Pese a que a la fuerza colaboro en sus gastos (vía impuestos). Nada más injusto. Para solucionarlo, creo que la política de descuentos de los Paradores debería ser mucho más amplia (dentro de unos límites, ya que entiendo que quieren un público de cierto. Nivel cultural). Pero desgraciadamente las ofertas para cuarentañeros con algo de cultura pero poca renta. Escasean en Paradores Nacionales. Para mi sorpresa, el Parador de Villalba tenía (2010) habitaciones dobles en agosto a 70 euros la noche. Incluso para cuarentañeros, algo desgraciadamente poco habitual. Así que, aunque es dinero, 70 euros son menos que 140 y pude ir a un Parador. Las habitaciones y el lavabo son muy amplias y todo limpísimo. Excepto un kit de afeitado, el lavabo tiene muchos detalles (champús, etc). Camas amplias y limpias, almohadas cómodas y sábanas más que limpias. El edificio (salvo las habitaciones de la Torre) simplemente correcto (sin el encanto de ser edificio histórico). Para mi sorpresa, las habitaciones estaban mal insonorizadas, como pasa en el 95% de los hoteles de España: se oyen las voces y el crujir del suelo de la habitación de al lado. Un fallo importante, dados los precios y la calidad teórica del lugar. La política de desayunos más bien demencial: buffet. A 15 euros (para los que desayunamos poco. Una opción muy rígida o directamente imposible).

Fantastica ubicación y restaurante.

El restaurante es perfecto.