En general el hotel está bien equipado y las habitaciones son grandes. Pero mi experiencia no ha sido del todo satisfactoria. Fui con mi pareja en una escapada relax con spa y cena. Nomas entrar, en recepción no tenían muchas ganas de hablar, si no preguntas no te dicen ni donde se sirve el desayuno, ni si el Wi-Fi tiene contraseña, ni nada más que subas a tal piso para que llegues a la habitación. La habitación que nos dieron era de discapacitados, por lo tanto el baño no tenía mampara ni bidet, la ducha tenía una cortina que al ducharte se aproximaba a tu cuerpo de forma siniestra. El suelo de la habitación estaba pegajoso, dando una sensación bastante desagradable. La habitación ruidosa, entraban ruidos raros de fuera y se oían conversaciones y risas por la noche. La cama muy bien, muy cómoda y amplia. Creo que si no somos discapacitados, no deberían de habernos asigando dicha habitación.
El SPA está bien equipado, pero mal mantenido. Interruptores que no funcionan, luces fundidas, chorros que no van, una cabina de contraste que tampoco funciona. Los relojes no funcionan, no hay temporizador en las termas romanas y turcas, menos mal que en el sauna había un reloj de arena, pero al salir no había hielo, y la piscina de agua helada tampoco iba. El personal de masajes, muy atentas las chicas, lo hicieron fenomenal La cena tenía un menú apetitoso, pero el pescado que pedí, la merluza, reseca. No la pude comer. A cambio tuvieron una atención que fue de agradecer. La camarera muy amable. Lo mejor de todo el desayuno buffet. Variedad y calidad. Zumo de naranja natural y café recién molido ¡Hurra! En fin, 1 de 3. Una pena. Espero mejoren, porque si no cuidas los detalles, todo lo bueno se va al traste.
Fui con mi pareja en una escapada relax con spa y cena.
Nomas entrar, en recepción no tenían muchas ganas de hablar, si no preguntas no te dicen ni donde se sirve el desayuno, ni si el Wi-Fi tiene contraseña, ni nada más que subas a tal piso para que llegues a la habitación.
La habitación que nos dieron era de discapacitados, por lo tanto el baño no tenía mampara ni bidet, la ducha tenía una cortina que al ducharte se aproximaba a tu cuerpo de forma siniestra. El suelo de la habitación estaba pegajoso, dando una sensación bastante desagradable. La habitación ruidosa, entraban ruidos raros de fuera y se oían conversaciones y risas por la noche. La cama muy bien, muy cómoda y amplia. Creo que si no somos discapacitados, no deberían de habernos asigando dicha habitación. El SPA está bien equipado, pero mal mantenido. Interruptores que no funcionan, luces fundidas, chorros que no van, una cabina de contraste que tampoco funciona. Los relojes no funcionan, no hay temporizador en las termas romanas y turcas, menos mal que en el sauna había un reloj de arena, pero al salir no había hielo, y la piscina de agua helada tampoco iba.
El personal de masajes, muy atentas las chicas, lo hicieron fenomenal
La cena tenía un menú apetitoso, pero el pescado que pedí, la merluza, reseca. No la pude comer. A cambio tuvieron una atención que fue de agradecer. La camarera muy amable.
Lo mejor de todo el desayuno buffet. Variedad y calidad. Zumo de naranja natural y café recién molido ¡Hurra!
En fin, 1 de 3.
Una pena. Espero mejoren, porque si no cuidas los detalles, todo lo bueno se va al traste.