Comentario del Barcelona House 3*

El lugar tiene aspecto de nuevo, con acabados baratos y un diseño pensado para la continua ocupación. La habitación para empezar nos la han apañado como han podido, nos parece exagerado el precio por unas condiciones tan espartanas. El baño muy bonito con líneas rectas y sencillas pero que no tiene una simple mampara para evitar ponerlo todo perdido con la consecuente posibilidad de perder la vida al finalizar la sesión de aseo. Intimidad? La puedes moderar desde defecar mirando a los ojos al vecino del balcón de enfrente hasta escuchar solo los sutiles ruidos nocturnos tan poco halagüeños. Si piensas en hacerlo soltando la melena a más no poder, buscad otro sitio o cobrad por el espectáculo sonoro al menos. De todas formas os va a costar porque las camas son dos individuales, cada una con sus sábanas, están limpias, las colchas del año de la catapulta desgastadas hasta no tener efecto. Y si pides una habitación doble te puede tocar una triple en función de cualquier razón aleatoria, lo que no implica que el resto de elementos tengan que venir de tres en tres. Ni si quiera de dos en dos. El aire acondicionado lo controlan desde la recepción aunque haya pantalla en la habitación y tarde unos veinte minutos en ponerse en marcha, solo con los ventanales cerrados. El televisor tiene un piloto de luz azul que os iluminará toda la noche, os guste o no. La iluminación de los pasillos recuerda al de un burdel, me sentí barata por un momento y todo. No olvidéis revisar la habitación por si se os olvida algo, aunque me parece difícil teniendo en cuenta que no hay un solo cajón entre todo el mobiliario. Tampoco se os olvidará salir a la hora prescrita porque os llaman de recepción para recordároslo. En fin, caro para las características que tiene pero la ubicación es fantástica.