Can Carbó de Peralada

Hotel

IMPRESENTABLE EXPERIENCIA ALEATORIA QUE PUEDE ACABAR MAL Después de varios emails y llamadas, pago bancario por anticipado (solicitando tres veces la cuenta bancaria) para solicitar una de las habitaciones decentes de ese establecimiento (las primera solicitud con meses de antelación y la última con dos días como vigésimo recordtorior). El propietario (porque empresario está claro que no y menos profesional) decidió que, o bien odia a sus PADRES y… a los de los demás o bien, tiene problemas de memoria y/o de conciencia (la última llamada me insinuó que le molestaba que le llamara ya que estaba disfrutando de un MOJITO …). Pues bien, después de solicitar la habitación para nuestros padres (que disfrutaban de una celebración de 50años de matrimonio) este impresentable proyecto de empresario decidió decirles a la cara que no le daba la gana ofrecerles la habitación deseada ya que había un "mejor" postor. Parece ser que el resto del personal (espero que contratado legalmente) carecía también de una cierta disposición y profesionalidad. Está claro por otros comentarios que este chiringuito con aires 'especiales" es un juego aleatorio que podría salirte bien o provocarte una SORPRESA DESAGRADABLE en tus deseadas vacaciones. Solo apto para masoquistas desde mi punto de vista.

Bonita casa antigua restaurada con buen gusto. Dispone de 8 habitaciones decoradas con detalles de calidad. La ubicación es buena en lo que respecta a la cercanía de Peralada y a la proximidad a Rosas y Figueres. Pero la pena es que colinda con una granja de cerdos y a pocos metros otra con vacas lo cual hace que permanentemente se note un desagradable hedor. A destacar la zona de desayuno, con diferentes ambientes acogedores y con una calidad de producto digna de destacar.

Si quieres encontrarte con la naturaleza y escuchar solo el canto del los pájaros, y rodearte de un ambiente rústico de muy buen gusto, este es el lugar. Las habitaciones son más que eso, espaciosas, con cama doble grande y cómoda. Paredes de piedra y muebles elegantes, nevera, aire acondicionado y calefacción. Un encanto de lugar, tendré que volver.

Estuve unos días con mi pareja en el hotel y me encantado el ambiente de la naturaleza. El desayuno excelente Y atendido por el dueño Michel. El trato es muy agradable.

He estado esta semana santa con mi pareja, y la estancia ha sido fabulosa… la habitacion super amplia… todo al mas minino detalle. Y el desayuno espectacular… Maicon el propietatio de la casa. Una persona genial… todo espectacular.