La Casona de Doña Petra

Hotel

Sitio muy agradable y muy bien atendido las habitaciones sencillas pero cómodas el personal muy amable pues nos llamaron cuando dejamos olvidado una chaqueta tiene una pequeña piscina y zona para desayunos también puedes tomar cenas o comidas.

Un lugar muy tranquilo y agradable, se esta casi como en casa.

Trankilo acojedor trato formidable con el dueño.

Un lugar muy tranquilo y agradsble, se esta casi como en casa.

Excelente hotel de alta calidad después de un día de caminata en el camino.

Muy nuevo y limpio. Los dueños encantadores. Desayuno completo. Recomendable. "Pide por la habitacion del fantasma 224".

Para desconectar totalmente. En pleno centro de la ruta del Románico, camino de santiago.

Estuvimos 2 noches en agosto con un bebé de 6 meses y una niña de 3 años y sólo tenemos buenas palabras para Elsy, la persona que nos atendió, cuidó y ayudó con la infraestructura para los enanos. Muchas gracias! Las instalaciones muy bonitas, limpias, los desayunos muy ricos. Ni una pega! sólo que por el tiempo no pudimos disfrutar de la piscina! : (

Magnifica atencion, tranquilidad y comodidad. El dueño nos conto la historia de la casa, y disfrutamos mucho con la charla amena y nos aconsejo sitios para visitar y restaurantes por los alrededores.

Buen sitio para estar tranquilo en medio de la inmensa y despoblada Castilla. Limpio y acogedor.

Un sitio aceptable. Precio asequible, limpieza normal, servicio educado. Comida normal. El menú para cenar era cerrado, no se podía elegir, pero estaba aceptable. De entrante nos pudieron un queso curado muy rico. De primero un gazpacho muy rico, y de segundo muslo de pollo frito (nada del otro mundo) y patatas fritas que estaban bien ricas. El desayuno, lo de todos, tostadas con mantequilla y mermelada, café con leche y zumo de naranja de polvos. En resumen un sitio para pasar una noche cuando vas de paso.

El lugar está anunciado en el camino de Santiago para que los peregrinos paren y repongan fuerzas. Nada más alejado de lo que nos encontramos. Como si no nos esperaran, sólo ofreció unas tristes tostadas de pan de molde con mermelada, café a granel, y sin muchas ganas. Nos cobró 7€. Inexplicablemente seguían llegando más peregrinos. Tampoco hay más oferta en el pueblo. Así no se trata a los peregrinos, ni aunque sea un negocio. Qué triste!

Casa tranquila, habitaciones limpias y modernas resto amable y… piscina para el calor del verano.

Recomendable, todo bien.!

La casa esta bastante bien, es como te enseñan en las fotos, es un pueblo bastante tranquilo, pero la atención del personal deja mucho que desear, información nula, simpatía cero, lo considera un lugar para pasar una noche y poco mas, la comida que ofrecen no merece la pena, lo que mas destacaria es el albergue de enfrente con su chiringuito al aire libre,

La casa muy bonita y las habitaciones estan bien, otra cosa es el trato nefasto que ofrecen, pasan completamente de informarte de nada relacionado con tu estancia, ni horarios, ni sitios donde poder visitar. Las cenas sopas y cremas de tetra brik y chorizos o salchichas con la misma salsa tras un postre suculento de yogur marca dia o naranja o manzana pasada. No lo recomiendo.

Habitación agradable y ducha estupenda. El personal muy accesible y familiar. La restauración está muy bien conseguida, y, en verano, seguro que será un lujo la piscina. Alto grado de satisfacción, tanto para mí mujer como para mi.

Un trato familiar muy agradable. //.

La casa muy bonita y bien restaurada con mucho gusto, el trato amable pero. No te pueden cobrar 15 euros por una cena consistente en sopas de sobre, filetes de pollo al microondas sin aliño ninguno y un postre a elegir entre fruta pasadilla o un yogur, eso si tampoco tienes otras occiones no puedes elegir menu y no existe otro establecimiento pues esta casa se encuentra situado en un sistio bastante aislado. Recomendaria ir cenados.

Es una antigua casona, restaurada con mucho gusto. Pegas: nos alojaron en una habitación con camas separadas y de cena no te preguntan. Te dan lo que hay y el precio: 15€. El desayuno tampoco mata. Para lo que cobran (5€), tienen que mejorarlo.

La atención, espléndida por parte de los señores que atendían la recepción y el comedor. Ni un ruido del exterior. Muy limpias la habitación y las zonas comunes. El agua caliente y la calefacción, muy buenas en un día de mucho frío. Las instalaciones muy coquetonas, con detalles sin recargar el ambiente. Pero, se oían los ronquidos de los vecinos y los cabeceros de las camas cuando se movían. Creo que la puedo recomendar a los amigos.