Landa

Hotel

El mejor lugar para comer "de paso " en la A1. Magnificos jardines y zona de barra interior que siempre está muy concurrida. Comida informal (no en el restaurante) y servicio inmejorable. La calidad de la comida es muy buena aunque los precios son un poquito elevados. Pero, sin duda, merece la pena.

Nos detuvimos en nuestra manera de Madrid. Por lo tanto, para nosotros no era lo que los guías dicen acerca de él, como lo vimos como una parada en la carretera. Tuvimos un bocado rápido en la cafetería. El diseño interior es realmente increíble, pero los camareros están sobrecargados de trabajo y ver como la están mal pagados. En cuanto a la comida, la calidad es buena, pero es demasiado caro.

La decepción ha sido enorme. Tras llevar más de 30 minutos sentados al sol con un niño pequeño, nadie nos atendió siendo el servicio pésimo. La contestación de un camarero a nuestra queja, "lo siento somos pocos". A los propietarios, esto hay que mejorarlo. Nosotros no volveremos a parar y por supuesto, tampoco os recomendaremos. Hasta siempre.

La decoración del restaurante un poco recargada para mí gusto, aunque hay que decir que no desentona. Los exteriores preciosos! La morcilla de burgos espectacular! Y el cochinillo también muy rico. Los precios aceptables. Desde luego merece la pena!

Landa es un muy bonito lugar en el medio de mi ruta habitual de Madrid — Donosti. Es un hotel de Burgos basado en un castillo medieval, por lo que el lugar es impresionante, relajado y muy bonito. El único problema es que los precios son muy altos, por lo que será una manera más caro dejar que cualquier otro que usted podría hacer en la ruta.

Un lugar precioso y elegante. La decoración de las diferentes zonas, comedor, pasillos, bar, baños, etc se cautivará por la cantidad de adornos y utensilios. La comida es exquisita y el servicio atento y profesional. Suele estar abarrotado de gente por lo que es necesario reservar. A pesar de ello es posible que toque esperar. Dispone además de varios comedores de mesas en la terraza don se sirven platos más sencillos y raciones.

Sitio muy bonito para parar a comer. Servicio muy bueno y eficiente. Los huevos con morcilla buenísimo. Si el restaurante es así, el hotel tiene que ser espectacular. Volveremos!

Bonito espacio, hotel y restaurante con un cómodo bar/terraza. En las afueras de Burgos, en dirección a Madrid. Acceso fácil desde la carretera A1. Todo esta preparado para discapacitados. Excelente comida y un sitio para parar en mitad del camino hacia Madrid. Se pueden comprar productos de Landa como dulces y sus excelentes morcillad. Muy recomendable, … algo caro!

La comida es simplemente OK… Buen precio para la comida, un poco caro para las bebidas. El servicio es horrible! No es la Landa que solía ser.

El mejor sitio para parar camino del norte de España. Camareros atentos y profesionales, tiene hotel, restaurante y bar para comer algo de paso, aunque lo más famoso son los huevos con morcilla hay una extensa carta tanto en el restaurante como en el bar. Bastante concurrido a horas punta pero merece la pena la espera.

Terraza y barra con una carta. Restaurante con otra. Clásica parada de viaje por su comodidad y calidad. Servicio atento (aunque tienen que atender muchas mesas y mucha rotación y no son todo lo rápidos que a veces se requiere, sí lo hacen con una sonrisa siempre). Recomendadísimos los huevos con morcilla.

Muy bonito. Muy especial. Comida buena. Servicio muy curioso porque ellas van vestidas de época. Pero les hace falta sonreír un poco más y ser un poco más profesionales.

Ayer día 1 de Mayo, estuvimos mi mujer y yo a celebrar nuestro aniversario. El sitio precioso, la comida estuvo muy bien y la atención también de los camareros rápida y muy buena. (excepto el borde del camarero sr. MARIO, QUE DEBÍA DE TENER UN MAL DÍA, Y ESTUVO BASTANTE DESAFORTUNADO CON NOSOTROS), si esta quemado, que lo pague con el mismo, a unos clientes, que se desplazan casi 300 km. Para comer allí, no se les puede tratar como animales. de todas formas, sitio recomendable.

Un lugar perfecto para hacer una parada en Burgos mientras se está de viaje hacia el norte. Sirven comida de la zona. Especialmente recomendable la morcilla de Burgos y el cordero. Los niños tienen mucho sitio para correr y que los padres estén tranquilos comiendo.

Precioso hotel, con personal atento y una extraordinaria piscina.

Muy bueno en un hermoso lugar con carácter y ambiente… ha existido para siempre y sigue siendo un lugar muy valioso para parar!

Hermoso hotel. Recepción, decoración, ropa de cama, servicio impecable. Vale la pena una visita.

Siempre que paso por este lugar para a comer. Acogedor, tranquilo… Una gastronomía sencilla muy cuidada. En invierno el olor a leña te transporta a tradicion!

Un buen lugar donde parar para descansar del viaje, situado a la salida de Burgos hacia Madrid. Solo conozco el bar y el restaurante. En ambos lugares el personal es amable y abundante. Servicio rápido. La decoración rústica tiene piezas muy interesantes. Los aseos están límpios.

Impresionante lugar para descansar un rato en la ruta. Gran restaurante y servicio de barra con surtido de tapas. La morcilla es inolvidable.

Hemos parado a comer a las 15.15, nos han atendido súper rápido y muy amablemente. Había mucho personal y enseguida te servían los platos. Hemos pedido una ración de huevos (2u), una de pimientos rojos, una de patatas panaderas al horno con cebolla y una “la otra ensalada” de endivia. Todo para compartir. Estaba todo delicioso, con 2 aguas y un café por 28.55€ a unos 15€ persona pero muy buena comida. En el restaurante la comida es diferente y más cara, de más clase, como un plato de foie por 25€.

Del hotel Landa, solo puedo hablar de su restaurante. Para mí su restaurante en general tiene una comida muy bien realizada, y me gustaría por ejemplo destacar el cochinillo que ponen al horno que está realmente bueno. Aquí he probado desde el cochinillo a platos como pimientos rellenos de rabo de buey, cómo diferentes ensaladas y platos variados cómo jamón serrano y así, por lo que puedo valorar qué algunos platos podrían ser mejorables pero en general cómo muy bien aquí. El precio no es barato, eso hay que tenerlo presente antes de entrar en este restaurante, que por ejemplo los 8, 65 euros que valen los canutillos a la crema no merecen nada la pena, en general aquí con los postres no estoy nada contento. Por otro lado, valoro muy positivamente el pan que tienen que no se si es hecho por ellos o no, pero está realmente bueno. La atención es magnífica y son muy serviciales y el local está muy que muy decorado con un ambiente elegante.

Uno de mis lugares favoritos en todo el mundo buena comida, ambiente chic y personal educado!

Un magnífico lugar al lado de la nacional 1 y adonde el sonido del tráfico llega amortiguado. Una parada obligada y para los que vivimos en Burgos un apacible lugar para visitarlo en otoño. Su Torreón y el templete siempre con detalles como el fuego en una especie de cesto de metal al lado de las mesas. Un auténtico lujo.

Después de haber ido más de 10 veces a tomar un café sólo he conseguido que me atiendan como Dios manda en 2 de ellas. Unas veces tardan media hora de reloj estando 8 clientes en toda la cafetería, las otras no te lo sirven como lo has pedido (taza normal en lugar de vaso grande, sin traer el bollo que has pedido…). Ya la última: pido que me lo pongan muy caliente y cuando me han servido desde la jarra la mitad de mi vaso veo que está templado, le pido que el resto me lo sirvan el doble de caliente. En vez de ir a calentar más la jarra me dice que ya está caliente y me echa el resto. Cualquier cafetería de barrio te sirve el café como cada uno lo pida, siendo 3 veces más barato, no me creo que en un sitio de 5 estrellas pase esto, para colmo casi por costumbre. Los camareros veteranos correctos, pero fichan a cada aprendiz… Alguien debería decirles que al cliente se le atiende y luego ya se le cobrará lo que corresponda, eso último si que lo hacen sin contemplaciones.

Maravilloso hotel en las afueras de Burgos. Perfectamente decorado de acuerdo al edificio que ocupa, una antigua casa solariega con torre del homenaje. Sabor tradicional con total exquisitez. Muy buen restaurante, con buena cocina y atención. Este lugar es un clásico para descansar tomando algo entre los viajeros de la A-1.

Excelente restaurante, el cordero es perfecto, pequeño piso en el precio y la cantidad.

Increíble café y resto cerca de la carretera principal que es perfecto para una parada de boxes. Ambiente antiguo y tradicional con una sensación de refugio de caza.

Fuimos a comer por recomendación de un familiar y la verdad que no decepciono, al contrario. Un ambiente ideal, una decoración de época super cuidado y lujoso y una comida de 10. Vale la pena pagar su precio, nosotros volveremos. Recomiendo: milhojas caramelizado, el cochinillo al horno de leña y el arroz con bogavante ;)

Un gran lugar para comer en el restaurante o bar, un almuerzo completo o un simple aperitivo sobre la marcha. De una manera clásica y con comida de alta calidad.

Una parada relajante cuando vas camino del Norte. Un entorno acogedor donde por un momento se para el mundo… Salvo al mediodía, los fines de semana y sobre todo si es verano o puente… entonces es un agobio y mejor no parar. Pero si paras en un día tranquilo, tomate tranquilo unos huevos con morcilla y disfruta de la vida.

Un gran lugar para parar a comer mientras viaja. Impresionante paisaje y buena comida. El milhojas es magnífico.

Un auténtico relax. No es para ir con prisas. Llega, pide lo que quieras (pide lo que quieras) y disfruta de la decoración del entorno… No es una cafetería de una estación de servicio para parar rápido y seguir. Tomate tu tiempo y disfruta.

Espectacular! No entiendo las reseñas negativas por el precio me parece demasiado barato para lo increíble del lugar y lo bueno del café y la comida. Espero volver pronto a probar la piscina.

El Hotel Landa está situado en los alrededores de Burgos, a sólo 15 minutos de la Catedral. Cuenta con un impresionante patio donde se sirven bebidas y se encuentra una tienda. En el interior, todo está decorado como en los siglos antiguos. El precio de las habitaciones es bastante alto (entre 120-300 € más o menos) pero el edificio y el servicio es increíble. Tiene una estación de carga de Tesla en el aparcamiento.

Demasiadas mesas, puedes compartir con los vecinos de lo juntas que están. La comida es muy buena pidas lo que pidas. Los camareros muy profesionales, pero nada agradables. Y por último los aseos son excepcionales, cuidados y limpios, que en un sitio tan concurrido ya es raro Tiene parking.

El sitio super bonito. Paramos para tomar un desayuno en el bar restaurante. Pero cuidado con el precio. No apto para todos. Yo creo que es más barato tomar café en la plaza de San Marcos de Venecia. Dos cafés y dos rodajas de pan con tomate 12, 90. Eso si nos pusieron mantel de papel y cubiertos de metal. Fueron bastante rápidos. Tampoco destacar la simpatía. En el baño de hombres entraba la mujer, supongo que de limpieza, sin ningún problema. Se paseó por allí y se fue. Eso sí ataviada con un curioso traje.

Me encanta! El servicio del camarero de la chaquetilla roja (uno de ellos) fatal ;anotó los café mal y los helados en vez de chocolate ;de vainilla! Y en la mesa de al lado hizo lo mismo! No me gustó! Pero el resto me encanta! El hotel precioso! Siempre partimos las vacaciones de una noche y partimos al destino al día siguiente.

Me ha gustado muchísimo. Precioso lugar. Hemos comido en el bar. Muy bonita la decoración y precioso sitio. Solo una pega: hay una mesa corrida en el bar q tiene los taburetes fijos en el suelo. El asiento es súper pequeño, resulta incómodo para comer y estás muy pegado al de al lado. Por lo demás estupendo. La comida muy buena.

Muy bonitos alojamientos exclusivos y espacios públicos con un personal amable. Parking gratuito y buen aire acondicionado. Situado cerca de la autopista de intercambio a las afueras de Burgos. No comimos en restaursnt, pero el bar era agradable.

Un buen lugar para comer, el servicio es muy rápido y elegante. Lamentablemente no hay muchas guarniciones para acompañar a la reunión (3 pequeñas patatas para un gran trozo de cerdo sabroso). También vale la pena notar que el menú no es muy claro, con entradas y platos principales mezclado. También hay una amplia selección de pan.

Ese lugar era muy agradable, muy encantador. La comida estaba bien también, pero me esperaba un poco más. El servicio era Cortés y atento. Pero seamos honestos, sólo por el ambiente del lugar es un restaurante interesante para ir.

Paré a desayunar el domingo porque me habian hablado muy bien del hotel. La verdad que es muy bonito y está bien cuidado. Pedí un café con leche (2, 5€) y un croisant, que aparte de ser pequeño, como la mitad de un croisant normal, me pareció carísimo (3, 7 €). Desde luego que ya no volverá a ser una parada en mi camino.

Gran comida, lugar muy chulo.

En concreto no conozco el hotel, pero si el restaurante y la cafetería de éste. Es típico lugar de paso por carretera para la gente que va a Madrid desde el norte, pasando por Burgos. Comida tradicional y exquisita. Los precios algo elevados, pero totalmente comprensible por la calidad de los alimentos. En la cafetería imprescindible probar la morcilla de Burgos con Huevos frito. También muy interesante las Mini hamburguesas de carne de buey, riquísimas.

Si pasas por Burgos no te lo puedes perder, es un restaurante con mucho encanto, toda la comida esta riquisima, los huevos con morcilla no se pueden perdonar, ademas de los asados que son espectaculares. El el entorno es precioso.

A prepararse para una copa rápida. Gran lugar, muy elegante y un poco en el lado costoso pero vale la pena.

Está situado en las afueras de Burgos (dirección Madrid), y aunque está bastante mal indicado, bien merece una parada. El sitio tiene una terraza muy grande y por dentro también es amplio. Decorado en plan antiguo y con un buen servicio. Pedimos unas raciones para compartir y un plato cada uno (entre panes que los llaman) y salió a unos 13 euros por persona. Todo muy rico y con una excelente atención.

Decoración increíble, buen gusto y con aire antiguo. Todo muy bien pensado. Nos han atendido muy bien y hemos probado las reinosas que estaban muy riquísimas.

Paramos en el Landa cada vez que pasamos por Burgos para comer si podemos, y sino, para al menos tomar un cafe y unas Reinosas que siempre estan espectaculares. La verdad es que en el hotel como tal no me he hospedado nunca, pero si algún día tengo la oportunidad lo haré. Respecto al restaurante, le pongo un 8, porque la comida es muy buena pero el servicio algo lento yde precio algo caro.

Ideal para hacer una parada en el trayecto Madrid — Norte. El lugar y la comida merecen la pena. Imprescindible probar los huevos fritos con morcilla. El precio quizá es elevado y posiblemente en el centro de la ciudad habra opciones mucho mas económicas, pero al fin y al cabo tiene fama y no requiere desviarse ni perder el tiempo en la carretera.

Hotel-restaurante en torre de defensa del s. XIV reconstruida. Diseño de lujo sobrio, jardines y piscina. Un clásico tanto para burgaleses como para viajeros para hacer un alto en el camino. Imprescindible pedir los huevos con morcilla y probar sus postres. El servicio es inmejorable, excelente trato al cliente. Relación calidad-precio: buena Un lugar al que siempre volver.

Caro y viejo. El restaurante es ni el mejor de Burgos : (
No vale la pena la parada.

Landa es un lugar maravilloso. Su restaurante con típica comida española es una fiesta para la boca.

Tiene una ambientación preciosa y un entorno precioso. A demás tiene un servicio muy bueno!

Buen ambiente y excelente decoración por lo demas desproporionado la relacion calidad precio, el servicio lento y muy borde.

Huevos con morcilla. Parada imprescindible! Las ensaimadas también están riquísimas! Y además muy bien de precio.

No lo dudes: huevos fritos con morcilla.

Servicio fatal con malas contestaciones.

El alojamiento eran grandes habitaciones lo suficientemente grande como para Queen o King size en vez de dos, 3/4 que tienen en cada habitación. El personal no era amable o servicial con consejos sobre la zona de los viñedos, etc. Amigos, trató de obtener el servicio de habitaciones o para llevar en el restaurante y se negaron.

Situado en el Km 235 de la A-I, tiene acceso desde los dos sentidos. El sitio es precioso, con un torreón convertido en hotel y diferentes salones en los que puedes comer, de picoteo o sentarte para comer tranquilamente. Merece la pena sólo por el entorno, la comida muy rica, un poco cara para mi gusto, pero seguramente necesario para sostener tanto personal, vestido con ropa de epoca, librea roja para ellos, vestidos de raya para las camareras y delantales de cuadros para los recogeplatos. Una agradable sorpresa.

La comida y el lugar muy bien como siempre. El servicio se ha deteriorado, muy lento y más si es para hacer una parada en el camino.

Mi padre en nuestras vacaciones familiares desde Bilbao siempre paraba en el "Landa" para tomar un café. Un ritual que ahora yo misma sigo manteniendo. Este pasado sábado, día 20 de junio, a las 10 de mañana, después de pedir por dos veces el café, tardaron más de 20 minutos en servirnos, atendían a otras personas que habían llegado más tarde, y todavía me tuve que levantar una tercera vez para que por favor nos trajeran servilletas. Espero que corrijan este mal servicio que no corresponde a un establecimiento de esa categoría. Reciban un cordial saludo. Maite Mínguez.

Para mi el hotel más bonito de Burgos sin dudarlo. El unico problema el precio pero como cualquier hotel de estas estrellas.

El alojamiento es muy acogedor, con habitaciones amplias, y el entorno y edificio son magníficos. La comida (boda) fue muy buena y bastante copiosa, pero no puedo hablar de los precios, que imagino tirando a caros.

Un clásico si pasas por Burgos. Un hotel precioso donde se come de miedo. Recomiendo huevos con morcilla y patatas, y croquetas. El servicio generalmente lento, sobre todo en los fines de semana. Echo de menos un cambiador de bebes en los aseos.

A pesar de haber sido lugar de parada obligatoria por su bonito ambiente. Estamos muy disgustados con el servicio por ser muy poco atento y al servirnos la morcilla y las croquetas frias.

Visito con bastante asiduidad este fantástico hotel y rest pero el servicio deja cada vez es peor, lento y dejando mucho que desear. Deberían tomar medidas antes de que sea demasiado tarde.

Merece la pena. No deja indiferente. Espíritu castellano en estado puro.

El sitio perfecto para hacer una parada. No es barato pero todo esta cuidadisimo. Lo más típico son los huevos fritos con chorizo pero yo recomiendo también la tortilla y los postres.

A pesar de la buena calidad de los productos y del buen ambiente, el nefasto servicio de mesas tanto en el interior como en la terraza, hace que la parada supoga un estado de desesperacion e indignacion superlativo. Decepcionante por su la falta de atencion, antipatia e interminables esperas.

La construcción y la decoración es perfecta. Es bastante caro.