Hotel Rural La Pista Hotel

Estuvimos 3 noches, y tanto el trato de los dueños como el alojamiento fueron estupendos. Ademas cenamos un dia en el restaurante, y los platos totalmente caseros, riquisimos a muy buen precio! Salimos encantados y con ganas de volver!

Sitio encantador, muy limpio y tranquilo los dueños muy amables la cocina casera buenisima y muy económico 10€ el menú, volveremos. Sitio 100% Recomendable. Lo mejorcito de la zona Calidad/Precio.

Trato familiar y muy cercano, entorno inmejorable, facil acceso y aparcamiento. La comida casera resulta un lujo para el paladar. El proximo viaje a Asturias, seguro que volvemos.

Buen trato, habitación limpia, muy tranquilo, cerca de la ruta de los puertos lo más bonito que he visto nunca.

Propietarios muí atentos y serviciales Alojamiento limpio y cómodo al lado de un río, se puede escuchar la cascada con la ventana abierta. La comida tiene buena pinta y el desayuno es abundante y económico.

Teníamos reservada una habitación con dos camas, pero la señora nos enseñó las tres habitaciones que tenía libres para que cojieramos la que mas nos gustase, al final nos decantamos por una con cama de matrimonio, lojicamente esto no incremento ningun coste. Tomamos una sidra en la terraza al fresco, la cena tenía una pinta de 10! Aunque nosotros ya estábamos cenados. El desayuno casero abundante y barato. Todo esto en medio de un fabuloso paraje pegado a un río, desde la habitación con el belux abierto se escucha el relajante sonido de una cascada… sin duda un sitio para repetir.

El hotel rural está en un paraje encantador, un pueblito muy bonito y con vecinos muy majos. El hotel está muy bien es rústico y te sientes como en casa, los dueños son muy amables y la comida tiene una pinta esquisita todo casero. La verdad que un buen lugar para descansar.

El alojamiento no lo conozco. Restaurante de comida casera, cenamos estupendamente, costillas adobadas buenísimas y un cachopo también muy bueno, la propietaria muy agradable.

Acogedor y en un lugar encantador para ir a la nieve. La dueña muy amable y desayunos muy copiosos. Volveremos…, las niñas lo pasaron genial!

La primera vez que subí para Asturias, mí primera parada fue precisamente un ése lugar, buena acogida por parte del propietario, y la abuela una señora entrañable.

Se come muy bien, comida casera y sobretodo el picadillo y las costillas adobadas elaborado todo por ellos mismos una velada muy acogedora.

Estuvimos de vacaciones en agosto en asturias. Un lugar muy cómodo para estar y el trato inmejorable! Nina, la propietaria, encantadora, por no hablar de su excelente comida. Nos quedó un recuerdo estupendo.

Hoy comi en la pista. El personal es muy amable y educado. Y la comida casera de un sabor inmejorable. Recomendable 100%

La dueña es muy amable y la comida casera … todo muy bueno.

Trato cercano, súper amable y familiar. Limpieza perfecta y un entorno fantástico.

Personas muy atentas. Sitio muy familiar. Encantador. Comida excelente.

Un pote riquísimo y unos huevos caseros con patatas y chorizo superior. Nina nos trató de maravilla y su marido nos ayudó a arreglar una avería del coche. Recomendado!

Buena relación calidad-precio. Nos alojamos en la habitación pequeña abuhardillada, que aunque es más pequeña, es más barata y sólo nos alojamos una noche. La dueña es muy atenta, y no ayudó con lo que necesitamos. Nos hizo unos bocadillos de huevos y chorizo casero muy ricos para llevar a la ruta de Muniellos. Sitio recomendable si vas a pasar 1 o 2 noches. Para más tiempo, echo en falta una zona común más amplia.

Sitio familiar y muy acogedor. Habitaciones limpias, comodas y calentitas. La hospitalidad es impresionante y el entorno maravilloso. 100% recomendable.

Muy buena elección para degustar un menú del día de 10€ con productos de la tierra bien cocinados. Buena ensalada con ingredientes básicos pero de buena calidad, excelente menestra de verduras y buenos platos de carne como el lomo o las costillas. Si estas por la zona, pruébalo.

El hotel está situado en pleno Parque Natural de Fuentes de Narcea, Degaña e Ibias y a sólo 7 km. De la Reserva Integral de Muniellos. Las habitaciones son muy tranquilas y acogedoras, todas con baño completo y perfectas para descansar bien y reponer fuerzas si te gusta la naturaleza. Los desayunos son buenísimos, a base de productos hechos por ellos mismos (mermeladas, miel…) y en cantidad. Tanto si estás hospedado como si estás de paso y quieres disfrutar de la mejor gastronomía de la zona, debes probar su restaurante. Cocina hecha con cariño y tradición, como te cocina tu madre o tu abuela y con buena digestión. No en vano, tienen varios premios de cocina. Como le dijimos que cenaríamos y comeríamos, nos preparó varios platos típicos de la zona con productos de su huerta, sus gallinas… Un lujo. Destacar por último el buen trato recibido por parte de Nina, su marido, etc. Haciéndote sentir uno más de la familia. Por desgracia, van desapareciendo los sitios así. Casi acabamos de volver de allí de pasar dos noches y ya estamos deseando volver.