Hotel Rural La Raposera

Hotel

Excelente hotel. Preciosa casa, bien ubicada y gran servicio.

Excelente hotelito ubicado en un edificio histórico donde se cuida al detalle la estancia. Ambiente tranquilo y agradable, silencioso, con un jardín precioso donde poder relajarse. El desayuno servido por Paloma e Inés, la propietaria, sorprende por el cariño y el mimo. Que te sirvan en la mesa con vistas al jardin, los hermosos árboles y el mar en el horizonte es una forma de comenzar muy bien el día.

Genial en una sola palabra merece mucho la pena y el trato de más te hace sentir como si estuvieras en su propia casa. Para repetir.

Genial en una sola palabra merece mucho la pena y el trato de más te hace sentir como si estuvieras en su propia casa. Para repetir.

Precioso lugar perfectamente cuidado para pasar unos días de tranquilidad y descanso. Desayunos caseros increíbles! Totalmente recomendable! Muchas gracias por atenderlos tan bien!

Todavía no he tenido la gran suerte de hospedarme. Hemos pasado por casualidad delante y nos ha impresionado el buen gusto de su decoración exterior e interior. Al acercarnos nos ha recibido su dueña y ha tenido la amabilidad de enseñarnos la casa y algunas habitaciones. Una joya. Volveremos este verano.

Casona de indianos espectacular en un paraje inimaginable, sus dueños encantadores, totalmente recomendable.

Es difícil encontrar un lugar tan agradable y un trato más exquisito.

Es un hotel con encanto. El trato de su dueña.

Un sitio excepcional en un enclave único. La casa está cuidada y decorada hasta el último detalle con un gusto y cuidado exquisitos. Las habitaciones amplias, cómodas y acogedoras. El desayuno inigualable, casero y delicioso. La música de fondo y la tranquilidad que hay hacen de él un sitio del que da pena irse. Y la dueña lo mejor: amable, educada y con estupenda conversación!

Nosotros hemos repetido, excelente trato, estupendas habitaciones y emplazamiento. En cuanto al desayuno con productos de la tierra y elaboraciones caseras de dulces y mermeladas, Inés la anfitriona, se sigue superando. Totalmente recomendable.

Muy bonita casa. Excelente en todo sentido. Muy bien el desayuno.

Hemos estado este fin de semana y nos ha sabido a poco, todo son detalles llenos de gusto y armonía, el descanso inmejorable y ahora imagínate un desayuno estupendo en un corredor lleno de luz y escuchando a Vivaldi. Así es El Hotel Rural La Raposera un lujo, como Inés Morís que hace que su casa parezca la tuya. Te lo recomendamos de todo corazón.

Espectacular enclave. Tienes que venir.

Sitio d ellos que. O debes dejar de conocer. Trato exquisito y situación y vistas privilegiadas.

Todo un lujo. Ya no sólo por su privilegiada ubicación, elegante entrada y cuidado aspecto externo. Mires para donde mires, cada rincón está elegantemente decorado, lleno de detalles de gusto exquisito. La tranquilidad del lugar, el silencio que le rodea a todo él y la bonita música de ambiente es lo primero que hace sentirte bien, relajado, con ganas de sentarte en uno de sus buenos sofás o cómodas butacas, perderte y no querer irte de allí.
Las habitaciones son muy amplias, cuidadas hasta el último detalle y decoradas con mucho gusto también, donde puedes dormir como un niño. Tiene además un amplio baño con materiales de primera calidad.
Los desayunos muy abundantes, con productos caseros acompañados de frutas, embutido y un rico café, francamente buenos, puestos en un comedor que es una galería acristalada con unas vistas preciosas.
A todo ello le acompaña Inés, su dueña, un verdadero encanto de persona que con su buen saber hacer, atención, amabilidad y cordialidad hacen que te sientas más en tu propia casa que en un hotel en sí. Su gusto y arte en la decoración está plasmado en todos los sitios del hotel y ha conseguido un lugar de ensueño para gozar de uno de los mejores sitios en los que te puedas hospedar.
Francamente maravilloso y fascinante. Felicidades Inés por haber logrado ese lugar tan especial.

Hotel excelente ubicación fantástica. Bellamente renovado con la atención al detalle. Nos hicieron la mayoría de la recepción.

Hemos pasado una maravillosa semana en La Raposera que nunca olvidaremos. Inés, su dueña, lo ha decorado con muchísimo gusto, consiguiendo un ambiente acogedor, hogareño y elegante a la vez. Las habitaciones son preciosas y amplias.
La zona donde está ubicado es tranquila, sin ruidos de ningún tipo.
Los desayunos son muy abundantes y relajantes porque la vista que tienen al jardin es realmente increíble.
Inés, ya te lo dijimos en persona… tienen un hotel precioso y ustedes son encantadores, muchísimas gracias por hacernos sentir como en casa, sin duda, nuestra estancia en el hotel ha sido inolvidable, ojalá podamos regresar pronto. Un beso para ti y Deme.

Excepcional hotel donde nos han tratado como en casa. Gran localización con vistas increíbles tanto de los picos de Europa como del mar, desayuno fantástico y tranquilidad asegurada. Más que recomendable.

Un edificio precioso y singular, decorado con mucho gusto. Estamos disfrutando de un fin de semana muy agradable. Inés te hace sentirte como en tu casa.
Muy recomendable.