Comentario del Hotel María Cristina 2*

Cuando me planteo a quien dedicar esta dedicatoria ha aparecido en mi pensamiento muchas personas a las que tengo que agradecerles el disfrutar de unas vacaciones Culturales por Ávila Toledo. Se lo dedico a la propia vida, porque vivir es maravilloso. No sería justo olvidarnos la atención y el trato personal recibido por el personal de recepción, como el personal de servicio de comedor (comida y cena). Un hotel no es tener buena ubicación, es tener buen servicio y amabilidad. Quiero hacer las siguientes observaciones: La habitación y cuarto de baño nada tenía que ver con las fotos de la página, están pidiendo a gritos reformas. Elementos que pueden mejorarse colchones sobre todo almohadas que parecen a un papel de fumar, grifos de ducha y lavabo sueltos, goteaban. Lo que más me llamo la atención quien fue la cabeza pensante de poner camas que se muevan por ruedas. La habitación que me designaron no tenía sillón, tenía un banco de madera. Los muebles son peor, pero peor que los que venden en Ikea, marco interior de la puerta estaba suelto. Segundo día de mi instancia, no pusieron gel, ni champú, informe en recepción y Srta. (No me acuerdo de su nombre) muy amablemente me los facilito. Me llamo la atención, que el salón estuviera en el sótano, al entrar en el deprime el ánimo, no tiene servicio de cafetería. La única cafetería que existía es estrecha y está separada de la calle por una cristalera cierra sus servicios a las 21:00horas ya que el sr encargado de la misma empieza a prestar sus servicios en el restaurante. También me extraño porque el desayuno no se hacía en donde comíamos en vez de hacerlo en la cafetería, lugar muy pequeño para las personas que se alojan en el hotel.