CANDIL SUITE Comares Suite Comares Bed & breakfast

Perfecto! Situado en el Albaicín, y sin embargo, en una ubicación tranquila. La vista desde la terraza es espectacular… Nuestra habitación en la planta baja estaba tranquilo, amplio y decorado con buen gusto. El personal es muy amable y servicial con valiosos consejos. Uno tiene la sensación de bienvenida y nos sentimos muy cómodos. El Desayuno era "español" — sabroso, abundante y de buena calidad. Puedo recomendar esta casa 100%

Las vistas son increíbles, limpio y los recepcionista agradable.

Hotel precioso con encanto muy especial y la atención maravillosa.

Es un sitio espectacular.
Y el trato maravilloso, tuvimos algun incidente en el baño el primer día, pero no sólo lo solucionaron si no que además nos cobraron como una habitación normal y estabamos en la suite.
Tanto Jose María como Rosa son super amables y están muy pendientes de que todo vaya bien.
El desayuno también super bien, siendo un sitio pequeñito había de todo, el zumo de naranja recién exprimido (no de polvos) y que decir de la tarta de queso.
Para mí a cumplido todas mis expectativas con creces, ha sido un fin de semana inolvidable.
Muchas gracias, y sin dudarlo volveré.

Pésimo, cuando arreglen sus instalaciones
Se podrá decir que es maravilloso mientras tanto sus instalaciones dejan mucho que desear.

Una casa preciosa las habitaciones increíbles con un cuarto de baño espectacular con bañera de hidromasaje y de mármol verde precioso y las puertas antiguas indias que merecen una rato contemplación. El desayuno muy completo no le falta detalle incluyendo recetas típicas de la zona. El trato inmejorable información todas la que quieras y no duden en llamar a José María para cualquier consulta por qué el se lo resuelve enseguida y sin duda alguna nosotros repetimos.

José María es un pozo de información. Encantador. Habitación muy agradable. Cuarto de baño con ducha de lluvia y chorros y suelo de piedra. Desayuno abundante, variado y casero. Probad el pastel cordobés. Y las mejores vistas de La Alhambra para tí solo. Un lujo.

Casa muy bonita en mitad del albayzin, habitaciones preciosas y muy grandes y muy cómodas, con desayunos.

Habitaciones geniales, con una terrada que ds de pleno a la alhambra, una verdadera pasada de sitio. Tienes un monton de bares y tiendas cerca.

Excelente lugar, yo fui hace un año. Le pongo 5 estrellas porque no se puede ponerle 6. Saludos desde la Ciudad de México y espero volver a ir a Granada y a hospedarme con ustedes. Saludos.

Buen sitio, un poco pequeño pero muy bien situado, los dueños son muy majos y resuelven todas las dudas, pero no recomiendo la habitación de la planta baja, por el ruido.

Nos dieron una habitación con balcón, muy hermoso! La habitación era grande, muy limpia, especialmente también, ducha de hidromasaje, sala, se puede dejar que los pasajeros relajarse!

Trato casi tan exquisito como las vistas y situación. Inmejorable y muy recomendable.

Trato exquisito, sitio romántico y tranquilo, pero lo mejor de todo sus vistas a la Alhambra. Muy recomendable, calidad precio fantástico. Volveré.

Maravilloso lugar y magnifica atención. Lo recomiendo.

Excelente lugar con unas vistas impresionantes. La mejor atención. Muy cálida visita a Granada!

Depende de la habitación que usted consigue. Tenemos el uno a la derecha al lado de la recepción. Pequeña habitación con un montón de ruido de la puerta. Si usted consigue las habitaciones con vistas a la Alhambra supongo que puede ser mucho mejor la experiencia. Excelente cuarto de baño. Desayuno OK.

Hemos estado alojados este fin de semana en la habitación Alhambra, y sólo puedo decir que es una maravilla poder disfrutar del gran jacuzzi y de las inigualables vistas que desde la habitación teníamos de la Alhambra. Por cierto, tanto la cama como las almohadas son comodísimas!
Puedes dejar el coche en un parking cercano y José María, que es el marido de Rosa, (propietarios de la villa), te recoge amablemente y te lleva hasta la casa en su coche.
El desayuno es muy abundante con todo tipo de productos y de una calidad suprema, algunos incluso hechos artesanalmente por Rosa.
El alojamiento es inmejorable, con una decoración que denotan un gusto exquisito, pero el mayor valor no se lo dan las habitaciones, ni las vistas ni nada material. Quienes realmente le dan sentido y te hacen sentir en un ambiente inigualable son Rosa y José María, unas personas excepciones que hacen que te sientas como en casa desde el primer momento.
Desde aquí, les damos las gracias por el fin de semana que hemos pasado allí y recomendamos encarecidamente que todo aquel que quiera vivir una experiencia muy satisfactoria no dude al escoger dónde hospedarse, el Rosa de Comares superará con creces todas las espectativas que pueda crease.
Les ponemos un 20 sobre 10! ;) Siempre os recordaremos con cariño!
Un saludo de Javier y Verónica.