Pertschy se encuentra muy céntrico con un encanto del viejo mundo. Está en un antiguo Palacio y nuestra habitación doble era enorme. Había una entrada-manera con los estantes que son grandes para las cosas del montaje. Esto condujo a una habitación grande a la izquierda que era una zona de estar y dormitorio con techos altos. La zona de estar a la izquierda, que era una gran zona de lectura. La zona de estar estaba situado en el espacio de la habitación por una pared. En el lado de la habitación había una amplia cama doble, escritorio, mesa, nevera, TV. Etc. Los techos altos estaban decorados con candelabros y filigranas. Había un pequeño WC con mini-fregadero, y un cuarto de baño más grande con bañera, ducha y espejos de aumento. ¡ Hay una luz del espejo pero está dentro del gabinete del espejo! Aunque no había un café/té zona en la habitación, el vestíbulo sirve bebidas calientes en una máquina moderna dispensación espresso, cafés, té, chocolate caliente, etc gratis. El vestíbulo también cuenta con un ordenador para comprobar eventos, confirmar reservas e imprimir pases de embarque, etc.
Hay ascensor en el patio, así que puede ser un poco frío en invierno, pero las escaleras son un retroceso a los días del Palacio; parece que estábamos caminando donde príncipes y princesas pisaban. El desayuno buffet era excepcional. La gran variedad de pasteles frescos, carnes, huevos, bollos, pan, mermeladas, etc eran excelentes. El personal de recepción muy amable, servicial, y tenía un buen sentido del humor. UN gran lugar si lo que quieres es un hotel céntrico, a sólo 1/2 una cuadra de la Graben, a 2 cuadras de San Esteban, y un encanto de bienvenida que siempre está ausente en los hoteles de la cadena. Todo esto a un precio razonable.
Hay ascensor en el patio, así que puede ser un poco frío en invierno, pero las escaleras son un retroceso a los días del Palacio; parece que estábamos caminando donde príncipes y princesas pisaban. El desayuno buffet era excepcional. La gran variedad de pasteles frescos, carnes, huevos, bollos, pan, mermeladas, etc eran excelentes. El personal de recepción muy amable, servicial, y tenía un buen sentido del humor. UN gran lugar si lo que quieres es un hotel céntrico, a sólo 1/2 una cuadra de la Graben, a 2 cuadras de San Esteban, y un encanto de bienvenida que siempre está ausente en los hoteles de la cadena. Todo esto a un precio razonable.