No es mi primera estancia en el Hotel Greifenstein (Guesthouse con desayuno probablemente lo describiría mejor) pero esta vez desafortunadamente tan cargada de defectos que era una necesidad para mí escribir esta revisión sin duda muy subjetiva.
La habitación muy pequeña situada en la planta baja, calentito cálido y musty oler. (Tal vez fue debido al buen tiempo) Gran ventanal, de los cuales, desafortunadamente, sólo un ala de 40 cm de ancho se puede abrir. Justo en frente de la ventana se encuentra la terraza y una entrada trasera. Directamente, es necesario entender como se entiende. La terraza es, por supuesto, utilizado por los huéspedes como un rincón para fumadores, por lo que es imposible obtener aire fresco en la habitación a través de la pequeña abertura de la ventana. Además del volumen de conversaciones que tienen lugar frente a la ventana, también se puede ver desde el exterior en la habitación. Todos los que se sientan en la terraza o utiliza la entrada allí tiene la oportunidad de ver en la ventana. Asegúrese de que no todo el mundo, pero usted no deshacerse de la sensación. A quien le gusta, no me gusta.
Desafortunadamente, no hay baño real en o en esta habitación, pero sólo una habitación pequeña, como un armario que tiene una puerta de 50 cm de ancho con una puerta del armario defectuoso-imán-enlazado que usted tiene que sostener desde el interior si se coloca valor en una puerta de inodoro cerrada. En este Kabuff hay un inodoro desvenciado: un tazón con una tapa de asiento incongruble y una ducha con cortina y un cabezal de ducha defectuoso. Desafortunadamente, no se pudo ajustar un flujo uniformemente templado de agua. Por supuesto, también había un fregadero, pero no en el "armario de baño, " pero en la habitación en sí sin protección visual o al igual.
La mano, y toallas de baño en los bordes completamente frafted y oler fuertemente de detergente y/o suavizante. Probablemente no tiene alergias. Camas superiores y almohadas con plumas-abajo sería el término equivocado-lleno aquí. Las plumas, sin embargo, están completamente agrupadas y distribuidas de manera desigual.
La cama tan baja y suave sin el óxido de lamas que pensé en el primer intento de sentarse en la cama me caido hacia atrás. Vino a mí como una caja de saltar cama donde el colchón superior está perdiendo para equipar otra cama. Sentado en el borde de la cama = rodillas a la altura del oído, no muy cómodo como se puede pensar.
La habitación con alfombra, a la que no quiero decir nada más. En cualquier caso, siempre he usado zapatos o escoria.
Yo no uso el vestuario.
No sé si mis descripciones también se aplican a otras habitaciones o habitaciones en la casa de Greifenstein. De lo contrario, la casa de huéspedes hace una buena impresión. Tal vez un artesano sólo tiene que mirar.
Amigable y de diseño brillante. Las damas de la casa son muy amables y serviciales.
La oferta de desayuno era buena. Salchichas, queso, huevos, cereales, fruta, jugos de tomate, leche, té, etc. Todo allí. El café estaba delicioso.
Casi inmejorable, por supuesto, es la ubicación central de la casa justo detrás del dique. Un máximo de 5 minutos a pie de la playa y unos 10 minutos cada uno. Al centro, la estación Seal, Promenade, etc. Todo muy fácil de lograr. El precio es muy hospitalario, pero no justifica todo. Incluso algunas cosas pequeñas modificadas podrían hacer la estancia más agradable.
La habitación muy pequeña situada en la planta baja, calentito cálido y musty oler. (Tal vez fue debido al buen tiempo) Gran ventanal, de los cuales, desafortunadamente, sólo un ala de 40 cm de ancho se puede abrir. Justo en frente de la ventana se encuentra la terraza y una entrada trasera. Directamente, es necesario entender como se entiende. La terraza es, por supuesto, utilizado por los huéspedes como un rincón para fumadores, por lo que es imposible obtener aire fresco en la habitación a través de la pequeña abertura de la ventana. Además del volumen de conversaciones que tienen lugar frente a la ventana, también se puede ver desde el exterior en la habitación. Todos los que se sientan en la terraza o utiliza la entrada allí tiene la oportunidad de ver en la ventana. Asegúrese de que no todo el mundo, pero usted no deshacerse de la sensación. A quien le gusta, no me gusta.
Desafortunadamente, no hay baño real en o en esta habitación, pero sólo una habitación pequeña, como un armario que tiene una puerta de 50 cm de ancho con una puerta del armario defectuoso-imán-enlazado que usted tiene que sostener desde el interior si se coloca valor en una puerta de inodoro cerrada. En este Kabuff hay un inodoro desvenciado: un tazón con una tapa de asiento incongruble y una ducha con cortina y un cabezal de ducha defectuoso. Desafortunadamente, no se pudo ajustar un flujo uniformemente templado de agua. Por supuesto, también había un fregadero, pero no en el "armario de baño, " pero en la habitación en sí sin protección visual o al igual.
La mano, y toallas de baño en los bordes completamente frafted y oler fuertemente de detergente y/o suavizante. Probablemente no tiene alergias. Camas superiores y almohadas con plumas-abajo sería el término equivocado-lleno aquí. Las plumas, sin embargo, están completamente agrupadas y distribuidas de manera desigual.
La cama tan baja y suave sin el óxido de lamas que pensé en el primer intento de sentarse en la cama me caido hacia atrás. Vino a mí como una caja de saltar cama donde el colchón superior está perdiendo para equipar otra cama. Sentado en el borde de la cama = rodillas a la altura del oído, no muy cómodo como se puede pensar.
La habitación con alfombra, a la que no quiero decir nada más. En cualquier caso, siempre he usado zapatos o escoria.
Yo no uso el vestuario.
No sé si mis descripciones también se aplican a otras habitaciones o habitaciones en la casa de Greifenstein. De lo contrario, la casa de huéspedes hace una buena impresión. Tal vez un artesano sólo tiene que mirar.
Amigable y de diseño brillante. Las damas de la casa son muy amables y serviciales.
La oferta de desayuno era buena. Salchichas, queso, huevos, cereales, fruta, jugos de tomate, leche, té, etc. Todo allí. El café estaba delicioso.
Casi inmejorable, por supuesto, es la ubicación central de la casa justo detrás del dique. Un máximo de 5 minutos a pie de la playa y unos 10 minutos cada uno. Al centro, la estación Seal, Promenade, etc. Todo muy fácil de lograr. El precio es muy hospitalario, pero no justifica todo. Incluso algunas cosas pequeñas modificadas podrían hacer la estancia más agradable.