Nosotros (2 adultos con nuestro perro) nos alojamos en el hotel para una estancia de una noche. Llegamos por la tarde, probamos por primera vez la taberna al aire libre. Servicio amable, una vista maravillosa al valle y ciclistas frescos nos prepararon para una gran escapada.
En el hotel nos dieron la bienvenida muy amable. Como se ha mencionado varias veces, hay ciertas restricciones de corona.
El desayuno se introduce sobre la base de una lista para el día siguiente y se elige una ventana de tiempo para el desayuno.
Al llegar a la habitación nos sentimos como en casa… Los muebles sin duda se han hecho viejos, pero todo estaba limpio. Aquí de nuevo un cumplido a las damas.
Después de un paseo tranquilo en un maravilloso ambiente tranquilo, nos tomamos asiento en el restaurante y dejamos que la noche termine relajado.
El menú era el tamaño ideal (para todos) y las porciones eran muy lujosas.
La comida era realmente deliciosa… ingredientes de alta calidad, perfectamente adaptados entre sí, grandes preparados y un verdadero placer para el paladar.
Una vez más, el servicio era muy amable y atento. E incluso se nos permitió llevar a nuestro perro al restaurante.
El desayuno de la mañana siguiente cumplió con todas nuestras expectativas. Logísticamente ciertamente no es fácil, si todo tiene que ser servido en su lugar. Pero el personal de servicio estaba en Zack y cumplió todos los deseos con una sonrisa.
Usamos este breve descanso para escapar de la vida cotidiana y encontrar relajación.
Esto se ha logrado maravillosamente aquí…
Gracias de nuevo a todo el equipo del hotel, que contribuyó mucho a ello.
En el hotel nos dieron la bienvenida muy amable. Como se ha mencionado varias veces, hay ciertas restricciones de corona.
El desayuno se introduce sobre la base de una lista para el día siguiente y se elige una ventana de tiempo para el desayuno.
Al llegar a la habitación nos sentimos como en casa… Los muebles sin duda se han hecho viejos, pero todo estaba limpio. Aquí de nuevo un cumplido a las damas.
Después de un paseo tranquilo en un maravilloso ambiente tranquilo, nos tomamos asiento en el restaurante y dejamos que la noche termine relajado.
El menú era el tamaño ideal (para todos) y las porciones eran muy lujosas.
La comida era realmente deliciosa… ingredientes de alta calidad, perfectamente adaptados entre sí, grandes preparados y un verdadero placer para el paladar.
Una vez más, el servicio era muy amable y atento. E incluso se nos permitió llevar a nuestro perro al restaurante.
El desayuno de la mañana siguiente cumplió con todas nuestras expectativas. Logísticamente ciertamente no es fácil, si todo tiene que ser servido en su lugar. Pero el personal de servicio estaba en Zack y cumplió todos los deseos con una sonrisa.
Usamos este breve descanso para escapar de la vida cotidiana y encontrar relajación.
Esto se ha logrado maravillosamente aquí…
Gracias de nuevo a todo el equipo del hotel, que contribuyó mucho a ello.