Ferienhof Walter

Hostal o pensión

Hicimos nuestra fiesta de bodas en el paseo en tractor y brunch al día siguiente en la casa de campo Walter. Muchas gracias por todo. Hemos sido recibidos y atendidos de una manera súper amable. La comida (no importa lo que era) era simplemente genial! Definitivamente te recomendaremos y definitivamente volveremos.

Ya sea para el almuerzo en el hermoso Hofcafé o simplemente para unas compras cortas en la tienda de la granja — Walter's Hof mantiene la promesa de productos frescos (y sobre todo deliciosos) de nuestro propio cultivo y un ambiente agradable!
Siempre es agradable visitar Martina & Heiko.

Absolutamente superior, nosotros y nuestros amigos y familias tuvimos una gran celebración de una recepción con champán a un gran almuerzo buffet, recorrido por el viñedo y el posterior café y pastel. Simplemente funcionó y sabía muy bien. Todo el mundo estaba encantado con lo que habíamos elegido para una excelente ubicación. Muchas gracias a todo el equipo, nos ayudaste a un día inolvidable.

Nos encantó nuestra estancia en uno de los apartamentos recientemente. La familia Walter era muy acogedora, amable e hizo nuestras vacaciones muy fáciles. El apartamento estaba limpio, cómodo y muy espacioso, con una gran vista de los viñedos y Friburgo. Disfrutamos del abundante desayuno, el vino Walter (y el jugo para los niños! ) y era una excelente ubicación para pasear a Opfingen y explorar la hermosa Selva Negra. ¡Gracias de nuevo!

Estamos (tan lejos) felices de venir aquí cuando estábamos cerca.
También el domingo pasado el plato principal era sabroso y el servicio amable. Pero la reacción del jefe a la queja (justificada) de un vecino de mesa, ¡imposible!
La señora de la mesa auxiliar tenía un pastel de llamas, que se servía después de una eternidad de fieltro. Estaba bastante quemado, por decir lo menos. En la queja educada, la camarera desapareció sin palabras y se fue al jefe. Ella gritó al otro lado de la terraza: "No quieren pagar. ¡Pensé que estaba delicioso! "Ella fue fuerte roncando a la mesa vecina y continuó acercándose a la señora en voz alta. Cualquier respuesta tranquila no trajo nada. Mientras tanto, estaba mal en la terraza y las caras de los otros clientes hablaban volúmenes.
Todo el mundo puede tener un mal día, pero para dejar fuera su mal humor en la clientela (de pago) no es un comportamiento profesional! Tal vez ayuda a concentrarse en un negocio principal (patio, posada, tienda, cafetería y restaurante).