Nos alojamos en un hotel con dos perros. Un hotel maravilloso y limpio. Servicio a un alto nivel. Dejar a los porta perros en el trastero del hotel, ya que no teníamos suficiente espacio en el coche. Todo lo que teníamos que hacer era preguntar y nos enviaron por correo a nuestra casa. Muchas gracias por eso.
Para alojarse con los animales por lo que y nadie nos molestó, nos dieron una habitación en la esquina donde no había otras habitaciones cerca. Por cierto, estas habitaciones son muy cómodas. Nadie se detendrá. Pero pida una habitación en la esquina en el piso 6-7. Porque es una vista impresionante.
Los desayunos son deliciosos, un montón de opciones. También se las arregló para ir a almorzar en el hotel, que tiene un buffet. El descuento de los huéspedes cuesta 250 baht por persona y los huéspedes. Es una cosa pequeña, pero es agradable. La elección fue enorme: rollos, pizza, pasta, mitballs, sopas, arroz, helado y pasteles, todo y no lista. Sabroso, satisfactorio y barato.
Hay un trans bordador al metro. A pie del metro 10 minutos, a la parada de autobús 7 minutos. El parque Lumpini está a 15 minutos. El gran centro comercial se encuentra a 20 minutos a pie por el parque. Cerca de la cafetería, supermercado 7/11.
También hay desventajas, pero no nos arruinaron el estado de ánimo.
Había cucarachas en la habitación☹️. Tenemos que hacer algo al respecto.
El cambio de divisa frente al hotel ha cerrado, pero la recepción tiene su propio cambio de divisa. El curso es un poco peor.
Prácticamente no hay espacio para animales que caminan. Un pequeño claro al lado del hotel y eso es todo. Es muy problemático cruzar la calle muy concurrida cerca del hotel, especialmente con perros, para que puedan hacer todas las tareas, no en el claro del hotel.
Sólo había impresiones agradables sobre el hotel, gracias por la hospitalidad!
Para alojarse con los animales por lo que y nadie nos molestó, nos dieron una habitación en la esquina donde no había otras habitaciones cerca. Por cierto, estas habitaciones son muy cómodas. Nadie se detendrá. Pero pida una habitación en la esquina en el piso 6-7. Porque es una vista impresionante.
Los desayunos son deliciosos, un montón de opciones. También se las arregló para ir a almorzar en el hotel, que tiene un buffet. El descuento de los huéspedes cuesta 250 baht por persona y los huéspedes. Es una cosa pequeña, pero es agradable. La elección fue enorme: rollos, pizza, pasta, mitballs, sopas, arroz, helado y pasteles, todo y no lista. Sabroso, satisfactorio y barato.
Hay un trans bordador al metro. A pie del metro 10 minutos, a la parada de autobús 7 minutos. El parque Lumpini está a 15 minutos. El gran centro comercial se encuentra a 20 minutos a pie por el parque. Cerca de la cafetería, supermercado 7/11.
También hay desventajas, pero no nos arruinaron el estado de ánimo.
Había cucarachas en la habitación☹️. Tenemos que hacer algo al respecto.
El cambio de divisa frente al hotel ha cerrado, pero la recepción tiene su propio cambio de divisa. El curso es un poco peor.
Prácticamente no hay espacio para animales que caminan. Un pequeño claro al lado del hotel y eso es todo. Es muy problemático cruzar la calle muy concurrida cerca del hotel, especialmente con perros, para que puedan hacer todas las tareas, no en el claro del hotel.
Sólo había impresiones agradables sobre el hotel, gracias por la hospitalidad!