Junto con mi amigo pasamos dos noches en el Palais Amani y quedamos impresionados por la belleza y la elegancia de este hotel situado en el antiguo Palacio marroquí! Tiene un jardín en el patio, con una fuente y naranjos. La terraza de la azotea es un lugar perfecto para disfrutar de una copa por la noche y ver la puesta de sol. También hay un lugar en la azotea con algunos chaiselongs donde se puede conseguir bronceado y un spa con hammam para aquellos que quieren experimentar tratamientos de belleza tradicionales.
Nuestra habitación era espaciosa y tradicionalmente decoradas, la cama era muy cómoda y había un muy buen secador de pelo (que es raro incluso en los mejores hoteles).
El desayuno era excelente, con un montón de frutas y productos locales, y se puede servir fuera en el jardín.
También probamos la selección de tapas marroquíes en el bar y nos parecieron deliciosas.
El servicio en el Palais Amani es perfecto, conseguimos ayuda eficiente para varios temas como la reserva de los billetes de autobús y la organización de la transferencia al aeropuerto. Todo el mundo era muy acogedor y amable y nos sentimos como en casa después de sólo dos días en el Hotel.
También reservamos una excursión de 3 horas en Medina con la guía del hotel y realmente disfrutamos de esta experiencia. De hecho, se lo recomiendo a todo el mundo que quiera aprender más sobre la historia de la ciudad y llegar a los lugares más interesantes sin perderse en las calles de Medina.
El Palais Amani está situado directamente en Medina y las famosas curtidurías están a sólo 10 minutos a pie. La puerta azul está a unos 20 minutos a pie.
En Resumen, recomiendo encarecidamente este hotel a cualquiera que quiera alojarse en el centro de Fez pero protegidos de la fiebre de la ciudad.
Nuestra habitación era espaciosa y tradicionalmente decoradas, la cama era muy cómoda y había un muy buen secador de pelo (que es raro incluso en los mejores hoteles).
El desayuno era excelente, con un montón de frutas y productos locales, y se puede servir fuera en el jardín.
También probamos la selección de tapas marroquíes en el bar y nos parecieron deliciosas.
El servicio en el Palais Amani es perfecto, conseguimos ayuda eficiente para varios temas como la reserva de los billetes de autobús y la organización de la transferencia al aeropuerto. Todo el mundo era muy acogedor y amable y nos sentimos como en casa después de sólo dos días en el Hotel.
También reservamos una excursión de 3 horas en Medina con la guía del hotel y realmente disfrutamos de esta experiencia. De hecho, se lo recomiendo a todo el mundo que quiera aprender más sobre la historia de la ciudad y llegar a los lugares más interesantes sin perderse en las calles de Medina.
El Palais Amani está situado directamente en Medina y las famosas curtidurías están a sólo 10 minutos a pie. La puerta azul está a unos 20 minutos a pie.
En Resumen, recomiendo encarecidamente este hotel a cualquiera que quiera alojarse en el centro de Fez pero protegidos de la fiebre de la ciudad.