El Greif es sobresaliente. Las habitaciones están equipadas con un gabinete de madera bien diseñado y un sistema de escritorio que recorre la longitud de la habitación con un armario delantero con espejos junto a los gabinetes. Para un hotel que ha estado aquí durante cientos de años es sorprendentemente moderno debido a la remodelación del arquitecto vienés, Boris Podrecca.
El bar de la terraza al aire libre es acogedor y hay lonas que se pueden enviar para proporcionar sombra y mantener la lluvia lejos. La barra de desayuno es excepcional y café y huevos y se hace cuando se ordena.
Un diseño notable más es que el refrigerador se coloca hábilmente en un gabinete a juego a nivel de escritorio-no incómodamente en el suelo como la mayoría de los lugares. Los pisos de madera contrastante son encantadores, y las habitaciones están bien iluminadas de una serie de fuentes, que puede controlar los baños tienen todo lo que uno necesita con mármol en todas partes.
La ubicación de la Piazza Walther está a poca distancia a pie de la estación de tren de Bolzano-Bozen. El personal es una delicia y dispuesto a ayudar. Para aquellos con bolsas: hay un ascensor, pero hay pasos para negociar para llegar al ascensor la Ding en el vestíbulo. Se proporcionan albornoces y pantuflas de felpa con flip flop. Incluso una sombrilla de la habitación se proporciona durante la duración de su estancia.
Me alojaré aquí de nuevo: definitivamente.
Si te quedas aquí: ciertamente.
Voy a preguntar si puedo mantener las pantuflas…
El bar de la terraza al aire libre es acogedor y hay lonas que se pueden enviar para proporcionar sombra y mantener la lluvia lejos. La barra de desayuno es excepcional y café y huevos y se hace cuando se ordena.
Un diseño notable más es que el refrigerador se coloca hábilmente en un gabinete a juego a nivel de escritorio-no incómodamente en el suelo como la mayoría de los lugares. Los pisos de madera contrastante son encantadores, y las habitaciones están bien iluminadas de una serie de fuentes, que puede controlar los baños tienen todo lo que uno necesita con mármol en todas partes.
La ubicación de la Piazza Walther está a poca distancia a pie de la estación de tren de Bolzano-Bozen. El personal es una delicia y dispuesto a ayudar. Para aquellos con bolsas: hay un ascensor, pero hay pasos para negociar para llegar al ascensor la Ding en el vestíbulo. Se proporcionan albornoces y pantuflas de felpa con flip flop. Incluso una sombrilla de la habitación se proporciona durante la duración de su estancia.
Me alojaré aquí de nuevo: definitivamente.
Si te quedas aquí: ciertamente.
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