El hotel hizo una impresión muy agradable. Territorio muy impresionante (dicho alrededor de 14 hectáreas). Mucha vegetación. Puedes usar un sello maltratado y decir que el hotel en él se está ahogando. Los casos son pequeños por 15 a 20 habitaciones, que en mi opinión es la mejor solución. Nada de hacinamiento. La comida es preciosa y variada (y qué más puede ser en Toscana!? ). Hay música en vivo regular a la hora del almuerzo. Un concierto improvisado. Me encantó la galería interior. Cubre todas las zonas peatonales. Moverse es muy cómodo, todo el tiempo a la sombra, y en la lluvia no se mojará. En la entrada se emite una tarjeta especial en la que se encuentra 200 euros. Es esta tarjeta la que paga todo dentro del hotel. Convenientemente, usted no tiene que llevar dinero con usted. Cuando salgas de la recepción solo paga por lo que comiste y bebiste. Spa, sauna, baño turco, salón de bronceado, gimnasio. Está todo ahí. La pequeña ciudad de San Vincenzo está a tres kilómetros. El hotel también está a 14 minutos en bicicleta. A cinco minutos a pie hay una pequeña tienda que tiene de todo, desde zapatillas de playa hasta alcohol fuerte. En resumen, para unas vacaciones relajadas el lugar es casi perfecto. Sin embargo, si hay un deseo de utilizar el coche, no hay problemas con el estacionamiento. Hay un hotel en el hotel. Tamaño muy decente. Por separado, quiero decir sobre la playa. Cinco minutos a pie. Largo y estrecho. El agua está a no más de 30 metros de distancia. Así que no hay sensación de un campo de fútbol de tumbonas. No tienes que pagar por las tumbonas. Arena, larga puesta de sol inclinada en el mar. No hay problemas con los lugares.
Sólo hay dos inconvenientes. Primero, las cerraduras de las habitaciones. Arcaico, con llaves. Periódicamente deje de abrir. Pero los empleados hábiles los arreglan en un instante. Segundo Wi-Fi. Lo es, pero sólo en lugares públicos. Eso es junto a la piscina, en el restaurante y en la recepción. No está en las habitaciones. Estoy seguro de que no es el mayor problema. Recomiendo el hotel inequívocamente!
Sólo hay dos inconvenientes. Primero, las cerraduras de las habitaciones. Arcaico, con llaves. Periódicamente deje de abrir. Pero los empleados hábiles los arreglan en un instante. Segundo Wi-Fi. Lo es, pero sólo en lugares públicos. Eso es junto a la piscina, en el restaurante y en la recepción. No está en las habitaciones. Estoy seguro de que no es el mayor problema. Recomiendo el hotel inequívocamente!