Hotel Nuovo Marghera

Hotel

Hotel tranquilo. Habitaciones confortables. Bastante en el medio. Hay un montón de nichos cercanos para comer. Personal amable.

Excelente ubicación para viajes en metro. Muchos lugares a continuación para catas de vino. Pizzería Napolitano bastante debajo de la habitación.

Muy amable, limpio y tranquilo. El personal era muy servicial y amable. Muy cerca de la estación de metro Vuelvo ahora.

Muy bien nada que añadir.

Fue un hotel muy bonito. Parada pongo unos pasos, habitaciones curadas y self desayuno con productos de elección tanto sabroso y dulce. Recomienda.

Personal amable, a 10 minutos del centro y a 20 minutos de la estación central en metro, a 25 minutos en coche del aeropuerto de linat.

Gran hotel de la ciudad. Central y no es caro. Limpio y silencioso. Ubicación estratégica. Las habitaciones individuales son muy pequeñas. Teniendo en cuenta la diferencia de la doble.

Hotel limpio y muy amable. Medio-pequeño tamaño habitaciones individuales, media-grandes dobles. En invierno son muy calientes y se puede regular su temperatura. Amplios y completos baños. Todos los días todo está arreglado y limpio. El desayuno no está incluido, pero puede ser solicitado incluso la misma mañana.

La habitación está excelente, muy limpia, con todo lo necesario: baño completo, clóset, mini refri, caja fuerte, tele, Wi-Fi. El desayuno está muy bien y barato si lo compras junto a la reserva. Muy buena atención y excelente servicio. Lo mejor es la excelente ubicación en el centro de Milán.

Habitaciones minimalistas con un personal servicial.

Limpio, cerca del metro, agradable, muy recomendado.

Excelente solución para aquellos que quieren estar en la Feria.

Altos precios, ubicación.

Reservados durante visita Expo.
Relación de calidad precio.
Cortesía suficiente.

Buen hotel y personal amable. No insonorizadas. Se oye todo. Aseo de los huéspedes. La nevera en la habitación y la Gente en el pasillo. Y el metro por debajo de Usted como un Trueno. Muy pequeño ascensor. Excelente desayuno. Amistoso sirvientas. Y limpio. Cerca de todo. Usted consigue lo que Usted Paga. Todo ha estado bien. Tenemos un balcón.

Limpio, básico, buena insonorización aunque oyes el metro debajo del hotel. Que en realidad no se molestó en 2do piso. La ubicación es genial especialmente en relación con el precio.

Me alojé allí el fin de semana con un amigo, fui a un partido de fútbol, vio los ojos y vino casero. (brillante).

CUIDADO CON LA RESERVA! SERVICIO DE CLIENTE POBRE POBRE
Mi reserva de hotel hecha y cancelada por escrito dentro de 12 horas de hacer la reserva lo. No había ninguna política que NO se aceptan devoluciones. Algo con respecto a usted deberá cancelar dentro de las 48 horas pero teniendo en cuenta esto fue una reserva y cancelación dentro de 12 horas no se aborda. Yo nunca prestados servicios allí y después de varios intentos por correo electrónico y llamadas telefónicas no me darán un reembolso del cargo sólo una penalidad de cancelacion. Incluso cobraban mi el impuesto de turista de 3 euros por persona. Lo que un error reservar allí.

Costo muy alto en comparación con lo que ffettivamente es el servicio. Cerca del centro y en una posición estratégica, está en una calle con restaurantes y bares de aperitivos.
La estructura no es malo, de hecho es también cuidado y también los desayunos son abundantes con una gran variedad pero el problema son espacios. Demasiado apretada alrededor, corredores, ascensores, habitaciones.
También tengo un recuerdo desagradable. En el 6 en el despertador por la mañana porque en la habitación de al lado había una pareja muy cercana nos hacía sentir en todo el hotel sus efusiones amorosas.

Muy muy mal! No cabe limpio, pequeño, y cada 20 minutos es como un terremoto. El Metro (estación de Wagner) está bajo el hotel!
El desayuno es pobre y no frutas, todos los servicios no es suficiente!
Tenga cuidado antes de reservar, en su lugar una habitación tengo una habitación individual! Completo desastre.

Muy buen valor por su dinero. Pequeño y acogedor hotel en buena zona con un montón de restaurantes y pequeñas tiendas y justo al lado de la estación de metro de Wagner. Las habitaciones son pequeñas pero limpio y acogedora, el personal es amable. El desayuno es bueno considerando el estándar italiano. Y siempre que puede estallar en una de las muchas cafeterías cercanas:).