El Hotel Brancamaria está situado al principio de Cala Gonone, a la altura correcta para disfrutar de una maravillosa vista del Golfo de Orosei y espléndidas Albes sobre el mar. Las habitaciones son limpias, amplias y equipadas con Wi-Fi y televisión interactiva (algunas habitaciones también tienen un jacuzzi interior). La cocina es deliciosa: para el desayuno hay muchas opciones; Para la cena obtener consejos de Nino, con simpatía sabrá cómo aprovechar sus preferencias. No te pierdas la típica cena barbaricin: podría ir en pan carasau, salchicha sarda y oveja sazonada a través de los gulurgiones, malloreddus y porcetto, terminando con el Seadas acompañado de una nueva Myrtle. Las zonas comunes están equipadas internamente con una sala de estar con TV, librería, futbolín y ajedrez para los retos con los más pequeños. Mesas y sofás exteriores para el desayuno, la cena y después de la cena. En una gran terraza adyacente a la estructura está la piscina con tumbonas y bar donde se puede disfrutar de la vista al mar.
El Golfo de Orosei es el rincón más bello del Mediterráneo y uno de los más hermosos del mundo. El agua que vi en las calas al sur del Golfo no he encontrado incluso en mis viajes al Caribe. La excursión en el bote le permite verlos a todos; Son accesibles sólo por mar o por tierra a través de senderos dentro del parque nacional.
Cala Luna, Cala Mariolu y Cala Goloritzè ocupan gran parte de mi corazón.
No puedo esperar a abrazar esos lugares y a esa gente otra vez.
El Golfo de Orosei es el rincón más bello del Mediterráneo y uno de los más hermosos del mundo. El agua que vi en las calas al sur del Golfo no he encontrado incluso en mis viajes al Caribe. La excursión en el bote le permite verlos a todos; Son accesibles sólo por mar o por tierra a través de senderos dentro del parque nacional.
Cala Luna, Cala Mariolu y Cala Goloritzè ocupan gran parte de mi corazón.
No puedo esperar a abrazar esos lugares y a esa gente otra vez.