Maravillosa y perfecta ubicación, ya que está situado en el centro de la ciudad y en una calle principal. Para aquellos que son durmientes ligeros, los fines de semana pueden ser demasiado fuertes con los automóviles pasando y bocinando y las personas hablando hasta altas horas de la noche. Pero para los durmientes pesados como nosotros, no fue un problema. De hecho, fue agradable saber que había tanta gente alrededor (parejas, familias, grupos de amigos) porque como resultado, las tiendas y restaurantes permanecieron abiertos bastante tarde, la calle estaba bien iluminada y debido a estas cosas, nos sentimos bastante seguros (es decir, en nuestra habitación o si fuera, permaneciendo en la calle principal). Está a solo unas cuadras de la estación de tren, que es muy conveniente.
Nos alojamos en la suite del 1er piso y estaba muy limpio, de buen tamaño con una sala de estar con una mesa (wobbly), sillón y sofá, una zona de dormitorio con una cama cómoda y sin vástago, un escritorio con una mini nevera escondida dentro de la zona del armario, un baño con aseo, bidet, ducha, muchas toallas, secador de pelo, dispensador automático de jabón de manos espumoso, un pequeño balcón, aire acondicionado, TV, mucha iluminación, un armario, espejos.
El personal era excepcionalmente amable y servicial. Las opciones de desayuno eran buenas y variadas, pero puede parecer un poco decepcionante para los huéspedes estadounidenses / canadienses. ¡Sin huevos!
(Los pocos) Inconvenientes: el ruido puede ser un problema para algunos, no hay cubo de basura real (utilizamos bolsas de plástico, no es bonito, pero funcionó), no hay jabón de barra (el jabón dispensador no se puede utilizar en la ducha y el lavado de cuerpo / pelo que ofrecen no es práctico sin un loofah).
En general, una muy buena experiencia y lo elegiría de nuevo si vuelvo a Pompeya.
Nos alojamos en la suite del 1er piso y estaba muy limpio, de buen tamaño con una sala de estar con una mesa (wobbly), sillón y sofá, una zona de dormitorio con una cama cómoda y sin vástago, un escritorio con una mini nevera escondida dentro de la zona del armario, un baño con aseo, bidet, ducha, muchas toallas, secador de pelo, dispensador automático de jabón de manos espumoso, un pequeño balcón, aire acondicionado, TV, mucha iluminación, un armario, espejos.
El personal era excepcionalmente amable y servicial. Las opciones de desayuno eran buenas y variadas, pero puede parecer un poco decepcionante para los huéspedes estadounidenses / canadienses. ¡Sin huevos!
(Los pocos) Inconvenientes: el ruido puede ser un problema para algunos, no hay cubo de basura real (utilizamos bolsas de plástico, no es bonito, pero funcionó), no hay jabón de barra (el jabón dispensador no se puede utilizar en la ducha y el lavado de cuerpo / pelo que ofrecen no es práctico sin un loofah).
En general, una muy buena experiencia y lo elegiría de nuevo si vuelvo a Pompeya.