Todo en este hotel era la perfección absoluta, ¡no podríamos haber planeado una mejor estancia para nuestra fuga! Después de navegar por muchos hoteles, encontramos que el Hotel Poseidón era el más acogedor y una vez que nos pusimos en contacto para reservar, sabíamos que era la elección correcta. Al ser un hotel de gestión familiar con vistas y comodidades perfectas, era exactamente el lugar para nosotros.
Nos alojamos en la divertida suite que está situada en la planta superior del hotel. Con esta habitación teníamos espacio más que suficiente y pudimos usar la gran terraza privada a nuestro favor. Teníamos el espacio para prepararnos para nuestro día especial juntos, el aire acondicionado era increíble, ya que era un día muy cálido y teníamos la máxima privacidad en nuestra terraza. Utilizamos este espacio no solo para tomar nuestras fotos, sino también para darnos la privacidad de FaceTime con la familia para nuestro corte de pasteles con vistas a las vistas perfectas de Positano.
La ubicación del hotel es perfecta, ya que se encuentra en el corazón de la ciudad. En el momento en que llegamos al hotel, el personal se ocupó de nosotros de inmediato y superó nuestras expectativas. A diferencia de la mayoría de los hoteles en Positano, tienen una bahía de entrada, por lo que nos permitió salir de la carretera principal sin el estrés de detener el tráfico. Nuestra preocupación por el estacionamiento no era necesaria, ya que tenían estacionamiento en el lugar y se encargaron de todo por nosotros. Nos detuvimos con un coche lleno y el personal nos ayudó instantáneamente a descargar nuestro coche y nos enviaron todo a nuestra habitación, mientras que el recepcionista de la recepción nos dio un recorrido y nos llevó a nuestra habitación para asegurarnos de que todo fuera perfecto y cómodo para nuestra estancia.
Mientras planeábamos nuestra fuga, tuvimos la suerte de que Liliana nos contactara desde el hotel, ¡un agradecimiento especial para ella! Ella está a cargo de todas las relaciones públicas del hotel, además de ser parte de la encantadora familia que lo administra. Se aseguró de que tuviéramos todo lo que necesitábamos no para nuestra estancia, sino para nuestro día especial también.
Mientras investigábamos para nuestra fuga, nos dimos cuenta de que la mayoría de los hoteles en Positano se centrarán en lo que puede traer al hotel para eventos (número de invitados, uso de su restaurante, etc. ), no tuvimos esta sensación en Poseidón una vez, especialmente siendo solo nosotros dos para nuestro día especial. Todavía iban más allá, sin importar qué.
Liliana organizó una reserva para nosotros en el restaurante del hotel (Il Tridente) en la terraza; fue una hermosa configuración y vista con la comida más deliciosa y el personal fue muy atento. Liliana también me dio su línea directa para usar el día de la boda, para asegurarnos de que teníamos taxis organizados de inmediato, cualquier artículo que faltara para traernos e incluso arregló que su lindo y vintage escarabajo Volkswagen se sentara afuera para cuando regresáramos de casarnos en el ayuntamiento local para que pudiéramos usarlo para fotos. Nos fuimos al día siguiente de la boda y Liliana nos dio una salida más tarde para asegurarnos de que teníamos todo arreglado antes de irnos y ella vino al frente para despedirse de nosotros con nuestro auto ya esperando con todo empacado. Honestamente, no hay hotel como este que hayamos experimentado, fue una perfección absoluta y no podemos esperar para regresar con nuestras familias para experimentar también.
Estaba cerca de todos los vendedores que usábamos: Caminé a Michele Calabrese esa mañana para arreglarme el cabello (recomendado por Liliana) y usamos Angelo Pasticceria 1970 en el camino para nuestro increíble pastel que fue entregado directamente al hotel y traído para nosotros.
Muchísimas gracias por la estancia perfecta y el mejor día de todos.
Nos alojamos en la divertida suite que está situada en la planta superior del hotel. Con esta habitación teníamos espacio más que suficiente y pudimos usar la gran terraza privada a nuestro favor. Teníamos el espacio para prepararnos para nuestro día especial juntos, el aire acondicionado era increíble, ya que era un día muy cálido y teníamos la máxima privacidad en nuestra terraza. Utilizamos este espacio no solo para tomar nuestras fotos, sino también para darnos la privacidad de FaceTime con la familia para nuestro corte de pasteles con vistas a las vistas perfectas de Positano.
La ubicación del hotel es perfecta, ya que se encuentra en el corazón de la ciudad. En el momento en que llegamos al hotel, el personal se ocupó de nosotros de inmediato y superó nuestras expectativas. A diferencia de la mayoría de los hoteles en Positano, tienen una bahía de entrada, por lo que nos permitió salir de la carretera principal sin el estrés de detener el tráfico. Nuestra preocupación por el estacionamiento no era necesaria, ya que tenían estacionamiento en el lugar y se encargaron de todo por nosotros. Nos detuvimos con un coche lleno y el personal nos ayudó instantáneamente a descargar nuestro coche y nos enviaron todo a nuestra habitación, mientras que el recepcionista de la recepción nos dio un recorrido y nos llevó a nuestra habitación para asegurarnos de que todo fuera perfecto y cómodo para nuestra estancia.
Mientras planeábamos nuestra fuga, tuvimos la suerte de que Liliana nos contactara desde el hotel, ¡un agradecimiento especial para ella! Ella está a cargo de todas las relaciones públicas del hotel, además de ser parte de la encantadora familia que lo administra. Se aseguró de que tuviéramos todo lo que necesitábamos no para nuestra estancia, sino para nuestro día especial también.
Mientras investigábamos para nuestra fuga, nos dimos cuenta de que la mayoría de los hoteles en Positano se centrarán en lo que puede traer al hotel para eventos (número de invitados, uso de su restaurante, etc. ), no tuvimos esta sensación en Poseidón una vez, especialmente siendo solo nosotros dos para nuestro día especial. Todavía iban más allá, sin importar qué.
Liliana organizó una reserva para nosotros en el restaurante del hotel (Il Tridente) en la terraza; fue una hermosa configuración y vista con la comida más deliciosa y el personal fue muy atento. Liliana también me dio su línea directa para usar el día de la boda, para asegurarnos de que teníamos taxis organizados de inmediato, cualquier artículo que faltara para traernos e incluso arregló que su lindo y vintage escarabajo Volkswagen se sentara afuera para cuando regresáramos de casarnos en el ayuntamiento local para que pudiéramos usarlo para fotos. Nos fuimos al día siguiente de la boda y Liliana nos dio una salida más tarde para asegurarnos de que teníamos todo arreglado antes de irnos y ella vino al frente para despedirse de nosotros con nuestro auto ya esperando con todo empacado. Honestamente, no hay hotel como este que hayamos experimentado, fue una perfección absoluta y no podemos esperar para regresar con nuestras familias para experimentar también.
Estaba cerca de todos los vendedores que usábamos: Caminé a Michele Calabrese esa mañana para arreglarme el cabello (recomendado por Liliana) y usamos Angelo Pasticceria 1970 en el camino para nuestro increíble pastel que fue entregado directamente al hotel y traído para nosotros.
Muchísimas gracias por la estancia perfecta y el mejor día de todos.