Comentario del Hotel le Dauphin 2*

Está compuesto por un bloque y un restaurante debajo. Cuando entras en el bloque donde están las habitaciones aparentemente parece un bloque de pisos normales pero son habitaciones. Las habitaciones están regular puesto que son pequeñas y bastante estrechas si tienes la suerte de compartir una habitación que da vistas al puerto de Ajaccio está bien situado, por lo contrario si te toca disfrutar de las vistas del interior no son nada bonitas. Las habitaciones tienen el aparato de aire acondicionado, por lo que a mí la primera y la segunda noche me costó dormir puesto que el aparato estaba estropeado y hacía mucho ruido. La segunda noche cuando baje a recepción a reclamar que estaba haciendo mucho ruido el recepcionista se negaba a subir para ver el problema que tenía el aparato de aire acondicionado hasta que tras insistir varias veces conseguir que subiera y una vez arriba no sabía a qué botón darle para quitar el ruido y cuando el aparato estaba apagado seguía haciendo ruido me dijo que no podía hacer nada ni me podía cambiar de habitación ni tenía un técnico para arreglarlo por lo que antes de irse me dijo que para que durmiera bien me pusiera unos tapones en las orejas. Al día siguiente cuando fui a buscar la llave para la habitación me dijeron de que no tenía reserva hecha y luego se ve que se habían equivocado con otro cliente y ya no me querían dar la llave de mi habitación. Luego para pedirme disculpas me cambiaron de habitación pero no me podían dar la llave y para que me dieran la llave tenía que subir a mi antigua habitación buscar mi equipaje y bajarlo a recepción y luego me acompañarían a la habitación buena, pero no podía quedarme en la habitación porque aún no estaba terminada y estamos hablando de que eran la 13:30 y me dijeron que la habitación estaría a partir de las 3. La comida por lo general para un hotel de 2 estrellas es acordé a lo que es un hotel de 2 estrellas, están compuestos por menú de 12 € primer plato segundo vino y postre. Las personas que te atienden les cuesta ser simpáticos. Te ofrecen para desayunar un mini buffet compuesto básicamente por galletitas, que una vez se ha cerrado el buffet las tapan con un mantel y las guardan para el día siguiente, no las quitan ya que es donde se come a la hora de hacer el restaurante por lo que estás comiendo y está la comida del buffet delante tuyo tapada. Yo antes de ir a dormir a este hotel miraría de buscarme otras alternativas y dejar este como último recurso. Si alguien tiene una duda más que no dude en preguntarme.