Comentario del Floral Villarosa 3*

El Foral Villarosa es un pequeño y hermoso hotel, con mucho encanto, restaurante y una piscina a pasos de su puerta. Al llegar, no tienes vistas del hotel desde la calle. Todo lo que ves es la puerta y una pared de hormigón, pero una vez que entras en el interior te sientes instantáneamente aislado del mundo exterior. Los empleados de recepción han ayudado con tours de reserva (y recoger recordatorios), enviándonos a una tienda de comestibles y darnos buenos consejos mientras aquí en Puerto Princesa. Todo el mundo es excepcionalmente amable y Cortés y se inclinará hacia atrás para ayudarle con sus necesidades. Las habitaciones son pequeñas, pero muy eficientes. Incluyen aire acondicionado, caja fuerte para objetos de valor, inodoro con agua corriente y una ducha con calentador de agua. La cama es de buen tamaño, firme, pero sólo tiene sábanas. Si eres como yo, estoy más cómodo con mi pequeña manta de viaje cubierto sobre la parte superior de mi sábana. Normalmente enfriar la habitación cuando llegamos por la noche, entonces simplemente apagar ya que estamos cayendo dormido. El restaurante es muy bueno. Tienen horas fijas, pero todavía muy conveniente. El menú consta de grandes favoritos filipinos, así como un poco de tarifa internacional. Mi marido no estaba decepcionado con su tocino, pan y huevos. La zona común en Villarosa floral consiste en una gran piscina se puede nadar vueltas en, muchas zonas para sentarse y socializar, tomar el sol tumbonas, una hamaca, una choza de comedor, una siesta o tal vez una cabaña de masajes. La zona común está al aire libre, pero utiliza la hermosa flora local de la zona para ser el punto central de su encanto. Por la noche se establecen velas e iluminan la zona dándole una sensación muy romántica. Recomendaría este hotel para 1-2 personas que quieran un aislado minutos de escapada desde el aeropuerto de Puerto Princesa.