Hotel Convento San Esteban

Hotel

No satisfactorio en absoluto. No venir aquí.

Recomendado al 100 X 100 hemos llegado hace un rato y me ha sorprendido. Si queréis pegaros una escapada no os olvideis de este gran sitio.

Trato atento, habitaciones bien cuidadas y modernas. El desayuno estaba bastante bien, teniendo en cuenta que no se trata de un hotel con un elevado número de habitaciones el buffet es generoso.

Pesima organizacon en recepción. Nos confirmaron una habitación porque teniamos un bono co spa incluido y el mismo dia de llegada dice que hacia dias averiado el spa dejando nuestro correo y telefono no nos avisaron dos horas de viaje! … y un lo sentimos … ni mantenimiento ni orden a nuestro modo de ver! El spa seguro que no lo dejan utilizar si no hay muchos clientes que lo utilizan … no les compensaba para dos personas mas personas con quejas!

Ubicación y entorno muy buenos, habitaciones confortables y atención buena.

Bonito lugar para celebrar banquete de bodas.

Recomendado al 100 X 100 hemos llegado hace un rato y me ha sorprendido. Si queréis pegaros una escapada no os olvideis de este gran sitio.

El restaurante muy decepcionante. Servicio lento y la comida no supera las expectativas iniciales Hay restaurantes de la zona que están por encima del nivel demostrado por este restaurante. Es una pena es un sitio con mucho potencial.

Un desastre. Reservé para tres noches y me cambiaron tres veces de habitación. La que tenía ventana grande daba a un patio interno donde jugaban los niños y la temperatura no bajó de 25 grados por la noche y como no se podía bajar me ofrecieron un ventilador! — un dos de enero — me consta que hubo gente que se quejó de lo contrario — frío — Al día siguiente nos cambian de habitación ofreciéndome la nº 6 ventana y temperatura respetable y cuando llegamos por la noche nos encontramos con que se la habían dado a otros y la que nos dan, la nº 2 la ventana da directamente a una pared. Lo peor viene cuando el recepcionista que me lo había dicho lo niega! Nos fuimos un día antes de lo previsto. Es una pena, todos los pueblos de la zona son preciosos y el románico impresionante y se come de fábula. Pero buscaros otro alojamiento.

Edificio antiguo muy bien reformado; las habitaciones sin lujos pero modernas y por encima de lo que puedes encontrar en hoteles rurales. El desayuno de 7€ con zumo de naranja natural. En el restaurante tomamos el menú castellano; el lechazo excepcional.

Se queda corto en el servicio de cocina.

Si kereis abriros la cabeza la abitaciones abuhardilladas son perfectas. Una verguenza el buffet y no es nada equitativo cn el precio. No lo recomendaria ni a mi peor enemigo.

No lo recomiendo (el restaurante), la comida no está mala.

Una verdadera pena tras la reapertura. Me refiero sobre todo al restaurante, la carta muy escasa, sin imaginación, la camarera con piercings en la cara, vestuario inadecuado y muy malos modos a la hora de dirigirse a los clientes. Desconocimiento total de la carta y de los menús ¿?. Continuas voces en la cocina reprochando cosas unos a otros de los trabajadores. Todo el mundo que se encontraba allí, se enteraba de lo que cenaba el otro en su mesa. La encargada, preguntando a 15 metros de la mesa y a voces ¿Qué tal está todo! los baños sucios, con fuertes olores. Y ya a la hora de pagar, nos tenemos que levantar a la recepción del hotel para pagar con la tarjeta allí. Antes de este cambio de dueño era uno de mis restaurantes favoritos, los camareros, metre, José el dueño. Gente encantadora muy profesional y dedicada a los clientes. Un pena, mientras sigan estos nuevos dueños no volveré jamás.