Broto es un pequeño y encantador municipio ubicado en la comarca de Sobrarbe, en la provincia de Huesca, Aragón. Situado en un valle rodeado de montañas y paisajes impresionantes, Broto es conocido por su belleza natural y su rica historia. El pueblo de Broto se encuentra a orillas del río Ara, lo que le otorga un entorno natural privilegiado. Sus calles empedradas y casas de piedra tradicionales le dan un encanto especial, transportando a los visitantes a tiempos pasados. Además, cuenta con una plaza principal donde se encuentran la iglesia parroquial y el ayuntamiento, que son testigos de la historia y la cultura de la región.
Broto es un destino ideal para los amantes de la naturaleza y los deportes al aire libre. Rodeado de montañas, ofrece numerosas rutas de senderismo y montañismo, donde se pueden descubrir cascadas, lagos y bosques de gran belleza. El Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, uno de los parques más emblemáticos de España, se encuentra a pocos kilómetros de distancia y ofrece paisajes espectaculares.
Además de su entorno natural, Broto también cuenta con una rica tradición gastronómica. Los platos típicos de la región, como el ternasco asado, la trucha del río Ara y el queso de oveja, son una delicia para los paladares más exigentes. Además, el pueblo cuenta con una amplia oferta de restaurantes y bares donde se puede disfrutar de la cocina local.