El Hotel está muy limpio. Antes de eso en Egipto eran muchos años en el Hotel no muy cómodo. Pero prevaleció el deseo de disfrutar del sol.
Llegamos al Hotel por la noche, al principio de la décima. Hambrientos de la carretera la primera cosa nos dijeron que el empleado genial que queremos comer. Y el asentamiento se espera:). A lo que nos han explicado con tacto que el restaurante está cerrado y hay una limpieza después de la cena, tienes que esperar un poco mientras prepararse para la cena tardía. Mientras tanto, vamos a usar brazaletes (eran bonitas cintas de seda, la primera vez que se conocieron), podemos hacer algo para beber en el bar del vestíbulo y aún así ver nuestra habitación. Lo hicieron. Nuestra habitación familiar fue gratamente sorprendido. Leer las críticas y mirar un par de videos en el Yutuba, estaban listos para un suplemento y moverse a cualquier precio. Resultó ser no tan terrible como muchos críticos escriben. La habitación estaba muy limpia. Pero-colchón en la cama es bueno, este es el primer hotel en el que el marido no quejarse del dolor de su espalda;
— la habitación con una reparación cosmética fresca, y desde las palabras del relé de invitados de mayo abierto después de la reparación de las habitaciones familiares más cerca de la Resepshinu, creo que es mejor comprar un tour en ellos, en nynyshnem aunque y había una baldosa lavada para brillar, pero las piernas muy sucias, bien en sí mismos tomó zapatillas;
— Mi marido y yo tuvimos una habitación separada con una gota de alquitrán fue dos días de falta de agua caliente ( (, apeló a los caninos, envió Mastra, que mostró que detrás de la puerta principal en la solapa se apagó la caldera. Que sabía que era tan simple.
Nos quedamos muy contentos con la comida. La elección de la comida no es grande, pero todo exquisito, restaurante. La comida era muy sabrosa. Pero si algo llega a su fin, es una cosa muy impersonal. En el comedor no hay sensación de alboroto, prisa.
Los niños estaban encantados con el delicioso helado ilimitado también Nestle.
Gracias a Dios y cocineros de bajo sesgo, pero un enorme botiquín de primeros auxilios de la maleta no tenía que hacerlo. No hubo problemas con los vientres.
Antes de las comidas, las manos siempre se trataban con un antiséptico al entrar en el comedor. El dispensador no está regulado y las salpicaduras volaron a los ojos de los niños. Era necesario ajustar y se convierte a él de lado, una pequeña salida que toma el sol de un comedor, para lo que no oyó una vez rencoroso Burchania en la parte posteriora de compatriotas. Señoras lo siento por el pequeño inconveniente, pero la higiene es sobre todo:).
El personal era muy agradable y el personal era muy agradable. Jr. Todavía recuerda el tiempo pasado con Guley en el Club de niños, y el juego Senior de dardos, water polo, chistes y bailes de diversión en minidisco con Anton. Gracias a ellos por el buen nastnosnoem y los gratos recuerdos.
Sobre la playa ya escrita mucho, hay una foto y un video. Creo que no vale la pena repetirlo. Sólo quiero agradecerle al rizado y jovial azote del combate. Cuando mi inquieto se lesionó en la playa, el azote de la pelea con chistes y Pribautkami procesado y pegado mi herida.
Los camareros sirven en las "horas del piquete" muy rápidamente cuando hay tiempo para sorprender a los pequeños ganadores:). Lo principal es no olvidarse de consejos.
Llegamos al Hotel por la noche, al principio de la décima. Hambrientos de la carretera la primera cosa nos dijeron que el empleado genial que queremos comer. Y el asentamiento se espera:). A lo que nos han explicado con tacto que el restaurante está cerrado y hay una limpieza después de la cena, tienes que esperar un poco mientras prepararse para la cena tardía. Mientras tanto, vamos a usar brazaletes (eran bonitas cintas de seda, la primera vez que se conocieron), podemos hacer algo para beber en el bar del vestíbulo y aún así ver nuestra habitación. Lo hicieron. Nuestra habitación familiar fue gratamente sorprendido. Leer las críticas y mirar un par de videos en el Yutuba, estaban listos para un suplemento y moverse a cualquier precio. Resultó ser no tan terrible como muchos críticos escriben. La habitación estaba muy limpia. Pero-colchón en la cama es bueno, este es el primer hotel en el que el marido no quejarse del dolor de su espalda;
— la habitación con una reparación cosmética fresca, y desde las palabras del relé de invitados de mayo abierto después de la reparación de las habitaciones familiares más cerca de la Resepshinu, creo que es mejor comprar un tour en ellos, en nynyshnem aunque y había una baldosa lavada para brillar, pero las piernas muy sucias, bien en sí mismos tomó zapatillas;
— Mi marido y yo tuvimos una habitación separada con una gota de alquitrán fue dos días de falta de agua caliente ( (, apeló a los caninos, envió Mastra, que mostró que detrás de la puerta principal en la solapa se apagó la caldera. Que sabía que era tan simple.
Nos quedamos muy contentos con la comida. La elección de la comida no es grande, pero todo exquisito, restaurante. La comida era muy sabrosa. Pero si algo llega a su fin, es una cosa muy impersonal. En el comedor no hay sensación de alboroto, prisa.
Los niños estaban encantados con el delicioso helado ilimitado también Nestle.
Gracias a Dios y cocineros de bajo sesgo, pero un enorme botiquín de primeros auxilios de la maleta no tenía que hacerlo. No hubo problemas con los vientres.
Antes de las comidas, las manos siempre se trataban con un antiséptico al entrar en el comedor. El dispensador no está regulado y las salpicaduras volaron a los ojos de los niños. Era necesario ajustar y se convierte a él de lado, una pequeña salida que toma el sol de un comedor, para lo que no oyó una vez rencoroso Burchania en la parte posteriora de compatriotas. Señoras lo siento por el pequeño inconveniente, pero la higiene es sobre todo:).
El personal era muy agradable y el personal era muy agradable. Jr. Todavía recuerda el tiempo pasado con Guley en el Club de niños, y el juego Senior de dardos, water polo, chistes y bailes de diversión en minidisco con Anton. Gracias a ellos por el buen nastnosnoem y los gratos recuerdos.
Sobre la playa ya escrita mucho, hay una foto y un video. Creo que no vale la pena repetirlo. Sólo quiero agradecerle al rizado y jovial azote del combate. Cuando mi inquieto se lesionó en la playa, el azote de la pelea con chistes y Pribautkami procesado y pegado mi herida.
Los camareros sirven en las "horas del piquete" muy rápidamente cuando hay tiempo para sorprender a los pequeños ganadores:). Lo principal es no olvidarse de consejos.