Hotel Pension Baronesse

Hotel

El desayuno bueno, muy agradable el personal, la ubicación bien, sin embargo, las camas son pequeñas, las habitaciones son pequeñas, no vista, piso de madera. Interior de fecha, alfombra vieja, un poco mal olor. Histórico ascensor, bonito!

Muy agradable vecinos de audibilidad, especialmente si las ventanas y el balcón están abiertos. Recepción hablando. El Hotel está limpio pero viejo.

Algunas habitaciones no tienen nevera y caja fuerte. Elección del plato de desayuno es cantidad limitada. No hay aire acondicionado en la habitación. Wi-Fi es débil y muy lento. Mi no tiene reloj. Para reconocer las tiendas de turistas en domingo no funcionan.

Muy amable, muy bien situado dentro de la ciudad para cosas que hacer a poca distancia a pie.

¡ Buen personal! ¡ Buen desayuno! ¡ El mejor café de la ciudad!

Personal amable. La habitación era muy cómoda.

Esto no es un hotel, aunque dice SOW. Pero está limpio, cerca del centro y el precio es razonable.

Buena ubicación sin estar en el centro hinner de Viena. Habitaciones muy bonitas.

Buena ubicación, el precio un poco elevado (quizá por ser Navidad), habitaciones muy nornalitas.

Había una semana en septiembre. Muy céntrico y con el encanto de una buena-burguesa n Pension. Algo en los años ha venido de la decoración un poco peculiar pero de alguna manera encantador. Personal muy amable y servicial. Desayuno Buffet variado y con una amplia selección. Definitivamente una recomendación.

Renovar de un hotel muy antiguo creo. La pared y el piso de madera pueden ser un poco ruidosos. Pero el dormitorio y el baño está limpio. El precio es muy agradable en Viena. La estación de tranvía y autobús está cerca. Es conveniente para el viajero del presupuesto.

El personal es amable y buena ubicación, pero las paredes delgadas y frustrante ducha!

La ubicación para lo que es Viena está muy bien, puedes coger tranvía y en 2 paradas estás a 40-50 mtrs. La habitación correcta, limpia, amplia y calentita. Buena relación calidad-precio.

Era básico, limpio, cerca de la ciudad vieja y barato. Tienen habitaciones vintage y el precio es más barato que los otros hoteles en Viena. Está cerca de las estaciones de tranvía y autobús. Estación de U-Bahn está a unos 700 metros de distancia de aquí, 15 minutos para un paseo. Estaba limpio. Siempre hay un conserje en el vestíbulo.

Hogar lejos de casa. Cada vez que vengo a Viena, trato de quedarme en la baronesa. Sus modernas habitaciones son cómodas y tienen sus propias cafeteras, sus habitaciones tradicionales tienen un ambiente agradable y ambos tipos de habitación tienen mini neveras y ventiladores.
El Wi-Fi es bastante decente, baja ocasionalmente, especialmente en la tarde, pero hacen todo lo posible para volver a funcionar. Su zona de desayuno es un hermoso viejo café (ahora sólo se utiliza para el desayuno del hotel), es espacioso y cómodo. El personal es siempre amable y servicial, ya sea que necesite direcciones, ver consejos, recomendaciones de restaurantes, o incluso para charlar un poco. Siempre hay café y té disponibles en la recepción y una (por lo general) surtida máquina expendedora en el nivel de entresuelo con los fundamentos (jabón, chocolate, alcohol).
Mi única sugerencia es, si tienes el sueño ligero, no reservar una habitación con vistas a la calle, los tranvías y ruido de la calle te despertará terriblemente temprano. Si usted es un sueño pesado, sin duda reservar una de estas habitaciones, son espaciosas con una bonita vista de los tranvías y tiendas.

Un hotel cómodo y bien ubicado, limpio y tranquilo. El personal muy amable. La cama comodísima. Es una muy buena opción bastante económica.

Un lugar bastante bueno, las habitaciones son muy elegantes y las camas grandes. Tiene diversas plantas y ascensor para acceder a ellas. Antiguo pero bien mantenido.

Muebles de habitaciones no correctamente moderno, sanitario y azulejos anticuados, mal desayuno por un precio demasiado alto (€13). Punto a favor es sin duda la ubicación: a pocos minutos a pie se llega en el centro histórico de la ciudad.

Hotel histórico un poco distante del centro pero BN servido por transporte público.

Hotel está muy bien situado a poca distancia de imp. Visitas turísticas de Innere Stadt (Distrito 1 de Viena), pero también con buen transporte público cerca. Nuestra habitación tenía la atmósfera de la vieja Viena. Era algo cutre pero tenía todo que lo necesario (conexión Wi-Fi incluido). Cama era maravillosamente cómoda. El personal era amable. Todos elogios a las señoras de la limpieza que estaban a cargo de nuestra habitación.

Con una buena situación destaca sus amplias habitaciones decoradas tradicionalmente. El personal de la recepción es muy atento y amable.

El hotel está situado muy cerca del centro de Viena
en pocos minutos a pie, aunque unos 50 metros
cada pase de tranvía 5 minutos en todas las direcciones.
El personal es increíble, amable y disponible para resolver cualquier
necesidad, gran desayuno, bonitas habitaciones y limpieza.

Nos buscó un hotel cerca del centro de Viena con conexión Wi-Fi y en la Baronesse Hotel. Services especialmente cocina son a nivel pobre: no comidas de dieta, en el cargo persona no agradable. Ejemplo: llevar algo de comida para llevar y pedir que comer en la cantina en 11:00 que se fue negado, : — (. Pregunte a algunos partidos o brote — "lo siento Señor, no tenemos". Reorganización de los servicios necesarios cuanto antes.

Los Colchones son de 70 igern y algo polvoriento huestel! El Resto de la Habitación es muy limpio! Precio justificado por la Proximidad al Centro de la ciudad. Todo en todo, bien como Albergue por poco Dinero.

El personal es estupendo, muy bien de precio.

Buena relación precio/performance y no muy lejos el metro o el centro de la distancia.

Buena posición, personal del Hotel muy amable, habitación limpia y silenciosa.

Mi mayor queja es que encontré un poco ruidoso mi habitación. Tal vez porque estaba en el pasillo, pero recuerdo escuchar mucho ruido. No emitir, solo molestias, pero la tele era potencia (desconectada de la energía) y pierde la configuración del control remoto, así que no hay TV mientras me alojé en el hotel.

Busqué un hotel donde puedo guardar mi bicicleta y este hotel me da una oferta. Está muy cerca del centro de Viena y alrededor es restaurantes interesantes. El personal es muy servicial y Wi-Fi me sorprendió. Fue muy rápido. Habitación es limpio y acogedor.

Me gusto mucho nuestra estancia en este hotel. Hay muchas cosas que decir sobre este hotel:
Positivo:
— La gente del hotel muy amable, más que eso!
— La ubicación estaba cerca de la ciudad vieja, pero no demasiado cerca, así que tienes muchas posibilidades.
-Las habitaciones son hermosas!
— El ascensor es increíble.
— El precio es increíble!
Negativo:
— sólo una: el desayuno no era tan bueno como el resto del hotel.

Amable y servicial. Hoteles cerca de centro (a pie) y el transporte público. Excelente desayuno, té de 14 a 22. Bonitas habitaciones, con sábanas limpias pero un poco manchada. Calidad en el precio.

Vine con grandes expectativas: desde un amigo mío, local desde aquí, se lo recomendó a mí, pero el lugar, por lejos, fue más allá mis expectativas.
Para empezar, el lugar es ultra bien comunicado, cerca del centro y con tranvías menos de 50 mt.
Entonces, es ULTRA acogedor, las habitaciones son muy bonitas y el personal es el mejor que usted conseguirá!
El desayuno merece un párrafo aparte seguro. Es tan completa y que puede servir como un Brunch exquisito.
Por lo tanto y para resumir, el lugar merece 4 * y, por el precio que está pagando, te esperas una décima parte de lo que es.